La Navidad, esa época llena de luces, celebraciones y encuentros familiares, no siempre es sinónimo de alegría para todos. Mientras algunos disfrutan del bullicio festivo, otros enfrentan la llamada “depresión navideña”, condición emocional que puede ir desde una tristeza temporal hasta una angustia profunda.
La presión por cumplir con las expectativas sociales, los recuerdos de seres queridos ausentes, y la carga de las celebraciones pueden hacer que muchos sientan que la temporada está lejos de ser la más maravillosa del año.
¿Qué es la depresión navideña?
La depresión navideña no es un diagnóstico clínico por sí mismo, pero sí una forma de malestar emocional que se presenta durante la temporada navideña. Según el Dr. Ken Duckworth, director médico de la Alianza Nacional de Enfermedades Mentales de EEUU (NAMI, por sus siglas en inglés), este término generalmente describe los sentimientos de tristeza, agotamiento o estrés que algunas personas experimentan debido a los elevados estándares de la temporada, las expectativas sociales y familiares, y los recuerdos dolorosos o experiencias de vida difíciles durante las fiestas.
“Las festividades pueden traer consigo una gran presión social para estar felices y para cumplir con expectativas poco realistas, lo que genera estrés, ansiedad y, en muchos casos, tristeza”, explicó en diálogo con Every Day Health Duckworth. La soledad, los conflictos familiares, y las preocupaciones financieras son factores comunes que contribuyen a estos sentimientos.
Factores desencadenantes
Existen varios factores que pueden contribuir a la depresión navideña. En primer lugar, las expectativas poco realistas sobre las celebraciones, que a menudo se ven amplificadas por la publicidad y las redes sociales, pueden llevar a muchas personas a sentirse inadecuadas o desbordadas.
Además, el estrés de tener que organizar y asistir a múltiples reuniones, hacer compras o cumplir con compromisos sociales puede ser una fuente significativa de agotamiento emocional.
Seth Gillihan, psicólogo y autor del libro “Cognitive Behavioral Therapy Made Simple”, menciona que el periodo de vacaciones también puede aumentar la sensación de soledad para aquellos que están lejos de sus seres queridos o que han experimentado pérdidas recientes. “Los recuerdos de personas ausentes o las dificultades familiares pueden ser especialmente dolorosos en esta época del año”, señala Gillihan a Every Day Health .
¿Quién está en riesgo? La depresión navideña puede afectar a cualquier persona sin importar su edad, género, orientación sexual o contexto social. “Las personas que ya luchan con problemas de salud mental pueden encontrar más difícil sobrellevar la presión adicional de las festividades, especialmente si no tienen una red de apoyo sólida”, agrega Anna Costakis, psiquiatra y directora de residencia en el Hospital Universitario Northwell en Staten Island, Nueva York.
¿Cómo apoyar a una persona que sufre de depresión navideña?
Si tienes a alguien cercano que parece estar atravesando una depresión navideña, hay varias maneras de ofrecer apoyo:
- Escuchar activamente: según afirmó al medio norteamericano la psicóloga Vanessa Kennedy, directora de psicología en Driftwood Recovery, uno de los mejores apoyos que puedes brindar es simplemente estar presente para escuchar. “A veces, solo el hecho de que alguien valide los sentimientos de la otra persona puede ser muy reconfortante”, explica Kennedy.
- Ofrecer apoyo emocional: la depresión navideña puede ser profundamente aislante, por lo que es crucial ofrecer compañía y expresar que estás allí para la persona. Invitar a la persona a actividades sociales o pasar tiempo juntos de manera no invasiva puede ser útil.
- Fomentar el autocuidado: mantener una rutina saludable durante las fiestas es esencial. Esto incluye comer bien, hacer ejercicio y descansar lo suficiente. Gillihan recomienda establecer límites para evitar el agotamiento y tratar de no sobrecargarse con compromisos.
- Buscar ayuda profesional: si los síntomas de depresión persisten o empeoran, es importante buscar ayuda profesional. Como sugiere la Asociación Americana de Psicología, si los sentimientos de tristeza, fatiga o irritabilidad duran más de unas semanas o interfieren con la vida cotidiana, es recomendable contactar a un terapeuta o consejero.
- Limitar las expectativas de las festividades: el doctor Duckworth recomienda que tanto las personas que sufren de depresión navideña como aquellos que las apoyan, intenten reducir las expectativas sobre lo que debería ser la temporada. “Es importante recordar que la Navidad no tiene que ser perfecta. Lo fundamental es la conexión genuina, no los regalos o las celebraciones grandes”, señala.
¿Cuándo buscar ayuda profesional?
La depresión navideña generalmente disminuye cuando la temporada festiva llega a su fin, pero para algunas personas, los síntomas pueden persistir y convertirse en un problema más grave, como una depresión clínica. Según el doctor Duckworth, si una persona experimenta síntomas como tristeza prolongada, falta de interés en actividades que normalmente disfrutan, cambios en los hábitos de sueño o alimentación, y dificultad para concentrarse, es importante buscar ayuda profesional.