Mantener una relación de pareja estable y satisfactoria exige un enfoque consciente en ciertos aspectos fundamentales que fortalecen el vínculo y promueven una conexión emocional saludable. A lo largo del tiempo, las relaciones enfrentan desafíos que requieren estrategias efectivas para superarlos. Estas estrategias ayudan a construir una base sólida que permita no solo la resolución de conflictos, sino también el florecimiento individual y compartido.
Al centrarse en prácticas clave, las parejas pueden fomentar un entorno de amor y respeto mutuo, favoreciendo una relación que perdure en el tiempo con estabilidad y equilibrio emocional.
¿Cómo es un amor saludable?
Un amor saludable se caracteriza por un equilibrio entre la conexión emocional y el respeto por la individualidad. En una relación saludable, ambos miembros se comunican de manera abierta y honesta, permitiendo expresar necesidades y sentimientos sin temor al juicio. El respeto mutuo es primordial, donde cada uno valora las opiniones y límites del otro.
La independencia individual se fomenta, permitiendo que ambos sigan desarrollándose de manera personal, sin que la relación interfiera en su crecimiento personal. Además, la confianza se establece a través de la transparencia y la consistencia, creando un entorno seguro y estable. Por último, el apoyo mutuo es fundamental, ya que ambos se acompañan en momentos difíciles y celebran logros juntos, construyendo una relación sólida y enriquecedora.
Las 5 claves para tener un amor saludable
Estos 5 consejos promueven la longevidad del vínculo y también el bienestar emocional de cada individuo, asegurando que el amor florezca de manera equilibrada y duradera:
- Comunicación efectiva: mantener un diálogo abierto y honesto es fundamental para resolver diferencias y fortalecer la relación. Escuchar activamente y expresar pensamientos y sentimientos de manera clara ayuda a evitar malentendidos. “Cuando piensan en el otro, amablemente y cariñosamente. Los amores saludables reparan, piden perdón, y tratan de no volver a hacerlo”, apunta la escritora y psicóloga Celia Antonini.
- Respeto mutuo: valorar y aceptar las diferencias del otro es esencial. El respeto implica reconocer las opiniones y límites de la pareja, fomentando un ambiente de igualdad y consideración mutua, según explica Paulina Uribe Morfín, subdirectora de Transversalización de Políticas Universitarias de la CIGU, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en la gaceta de UNAM.
- Independencia individual: cada miembro de la pareja debe mantener su propia identidad y autonomía. Fomentar el crecimiento personal y respetar el espacio individual ayuda a enriquecer la relación sin perder la esencia propia. “El amor es aceptar al otro y, justamente, la riqueza del amor es que se trata de un otro. Porque somos distintos, nos deseamos y porque nos deseamos, podemos querernos y porque, como nos queremos, podemos construir una relación de amor”, afirmó el psiquiatra, psicoanalista, escritor y académico José Abadi a Infobae.
- Construir confianza: la confianza se construye con el tiempo y requiere consistencia y transparencia. Ser confiable y honesto en las acciones fortalece el vínculo y asegura una base sólida para la relación. Según explicó en una nota anterior la psicóloga Adriana Guraieb, la confianza es un pilar esencial, tanto en una relación como individualmente. “Es el termómetro de la implicación y la vinculación que tenemos con los demás y, si en algún momento hay una mentira y la confianza está consolidada, entonces la persona sabrá y podrá esperar, preguntar, entender y, si hiciera falta, perdonar. Es necesario atreverse a dar, darse y otorgarse una segunda oportunidad, antes que criticar herir o cortar una relación, desde luego todo con un límite de respeto y dignidad con el otro”, dijo.
- Apoyo mutuo: estar presente y ofrecer apoyo emocional en los momentos difíciles es crucial. Ayudar a la pareja a superar desafíos y celebrar juntos los logros contribuye a un amor saludable y duradero. “Es clave el proyecto en común, e igual de importante es que cada uno tenga su espacio propio y respete el espacio del otro, aceptando su individualidad”, sostiene la psicóloga argentina, especialista en dependencia emocional e influencer, Paola Bertiz Broll en su libro Que sea mutuo o no sea nada. Arma una pareja sana y feliz.
Cómo lograr una relación durarera
Estas son algunas ideas a tener en cuenta a la hora de hacer que la relación con nuestra pareja sea más duradera y estable:
- Confiar en el otro: con confianza una relación puede soportar los mayores desafíos. Se cree que cuando un compañero logra abrirse, es fundamental no romper su confianza. Esto significa no burlarse de sus secretos más vergonzosos, incluso durante una pelea.
- Tener metas similares: se encuentran soñando aspectos similares para su futuro. Piensan en su relación, en la vida, el matrimonio, los niños y el trabajo entre otras cosas.
- Mantener intimidad: dicen que el número de veces que una pareja tiene sexo prueba qué tan feliz o infeliz pueden ser en su matrimonio… Pero la intimidad física viene en muchas formas importantes por igual. La forma más leve de afecto puede mantener una relación fuerte, ya sea un beso en la mejilla o un mensaje a mitad del día.
- Saber cómo comunicarse de manera saludable: las parejas que llevan tiempo juntos, desarrollan su propia forma de comunicarse, incluso a través gestos. Son capaces de comunicar abiertamente sus sentimientos, deseos y opiniones. Se entienden mejor y tienen más intimidad.
- Poder admitir cuando se equivocan: quien ama a su pareja se llevará un golpe al orgullo si eso significa dejar de discutir.
- Sentirse como uno mismo: al principio, las parejas buscan mantener en secreto sus actitudes más ‘raras’. Luego, cuando se sienten más cómodos con el otro logran amarse por lo que en verdad son.
- No buscar cambiar nada del otro: cuando se enamoran de todos los aspectos de esa persona.
- Apoyarse en tiempos difíciles: se cree que si fue capaz de acompañarte durante un momento difícil, esa es la prueba de que lo hará de nuevo, y eso es una muy buena señal.
- Aún se gustan cuando están enojados: es fácil darse cuenta. Ocurre cuando uno aún quiere hablar y estar con el otro, incluso después de una pelea intensa.
- Competencia sana: buscan ser las mejores versiones de sí mismos. Se animan y se empujan mutuamente para alcanzar sus metas. Si uno que la pareja le recuerda todas las cosas que dijo que haría, no hay que enojarse, es una receta para el éxito.
- Reírse a menudo: reírse y bromear de las cosas pequeñas hace que los malos tiempos sean un poco más fáciles.
- No sostener rencores una vez que terminaron de pelear: por desgracia, hay peleas que son inevitables. En realidad, es signo de una pareja sólida luchar. Sin embargo, la clave está en dejarlas ir una vez que se hayan terminado. Fundamental: resistirse el deseo de traer eso de nuevo la próxima vez.
- Saber lo que la pareja necesita y respetarlo: es necesario entender lo que la pareja necesita sin tener que pedírselo. Las personas que comprenden las necesidades de sus socios son más eficaces en la comunicación y en el compromiso.