Cada vez que alguien se enfrenta a la necesidad de conectar un electrodoméstico lejos de un enchufe, el uso de un cable de extensión o alargue parece ser la solución rápida y sencilla. Sin embargo, lo que muchos desconocen es que esta práctica puede desencadenar graves peligros, especialmente si se utilizan aparatos de alto consumo energético. Según Paul Martínez, propietario de Electrified NYC, en Brooklyn, Nueva York, los incendios causados por el uso inadecuado de alargues son más comunes de lo que se piensa, y las consecuencias pueden ser devastadoras.
La clave está en el calibre de los cables y la cantidad de energía que los aparatos conectados requieren. “Si los cables alargadores son de calibre 14 y se utiliza un aparato con un elemento calefactor, como un horno tostador o un microondas, el alargador no soportará el amperaje, y eso puede provocar incendios”, dijo el especialista en una entrevista para Reader’s Digest. Esta es una advertencia importante para cualquier hogar, ya que muchos desconocen los riesgos de sobrecargar un cable de extensión.
Capacidad de los cables de extensión
Los cables de extensión más comunes son los de calibre 14, que pueden soportar hasta 1800 vatios o 15 amperios, similar a la capacidad de un enchufe de pared estándar. Sin embargo, cualquier aparato que supere los 1500 vatios debe estar conectado directamente a un circuito dedicado, explicó Martínez. Esto se debe a que los alargadores no están diseñados para manejar la demanda energética de ciertos electrodomésticos, lo que aumenta el riesgo de sobrecalentamiento y, en consecuencia, de incendio.
Freidora de aire
Las freidoras de aire, aunque populares por su rapidez y versatilidad en la cocina, son uno de los aparatos que jamás deben conectarse a un cable de extensión. Dependiendo del modelo, una freidora grande puede consumir hasta 2000 vatios, lo que supera la capacidad de muchos alargadores. Dado que estos aparatos generan calor, si se conectan a un alargador existe un alto riesgo de incendio. Por esta razón, es crucial enchufarlas siempre directamente a una toma de corriente.
Microondas
Los microondas son otro electrodoméstico que no debe conectarse a un cable de extensión. Aunque su potencia varía, estos aparatos requieren un circuito dedicado debido a su alto consumo de energía. Al conectarlos a un alargador, se corre el riesgo de sobrecargar el cable, lo que puede provocar un sobrecalentamiento y un posible incendio. Es esencial que los microondas estén siempre enchufados directamente a la pared para evitar este tipo de accidentes.
Freezer
Aunque el freezer no consume tantos vatios como otros electrodomésticos de cocina, es importante recordar que funcionan de manera continua. Esto significa que el uso prolongado de un alargador puede no solo dañar el cable, sino también provocar un mal funcionamiento del refrigerador. Por esta razón, se recomienda que este tipo de electrodoméstico esté siempre conectado directamente a un enchufe de pared para asegurar su correcto funcionamiento y evitar riesgos innecesarios.
Tostadora y horno tostador
A pesar de ser pequeños, las tostadoras son aparatos que demandan mucha energía en períodos cortos de tiempo, lo que las convierte en un riesgo cuando se conectan a un cable de extensión. El horno tostador, por su parte, requiere incluso más potencia, oscilando entre 1200 y 1400 vatios, lo que lo hace aún más peligroso si no está enchufado directamente a la pared. Estos electrodomésticos deben estar en un circuito dedicado para evitar sobrecalentamientos y posibles incendios.
Calentadores de ambiente
Los calentadores eléctricos son conocidos como una de las principales causas de incendios en los hogares, y su uso con un alargador solo aumenta el riesgo. La combinación de un alto consumo energético y el uso prolongado de un calentador conectado a un cable de extensión puede causar que el enchufe se derrita y, en el peor de los casos, que se produzca un incendio.
Unidades de aire acondicionado
Las unidades de aire acondicionado, especialmente las portátiles, consumen grandes cantidades de energía, lo que las convierte en un peligro si se conectan a un alargador o regleta. Martínez destaca que es fundamental seleccionar un aire acondicionado del tamaño adecuado para el espacio en el que se utilizará. Un aparato de baja capacidad en una habitación grande trabajará más de lo necesario, aumentando el riesgo de sobrecalentamiento y de un posible incendio si se utiliza un alargador.
Conexiones en cadena: un error frecuente
Uno de los errores más comunes en los hogares es la práctica de conectar varios cables de extensión entre sí, lo que se conoce como “conexión en cadena”. Esta práctica puede sobrecargar el circuito, lo que incrementa el riesgo de sobrecalentamiento y de incendio. Es esencial evitar conectar alargadores entre sí, especialmente cuando se trata de alimentar electrodomésticos de alto consumo.