Receta de cremona casera, rápida y fácil

La cremona es un pan tradicional argentino, especialmente popular en la región de Buenos Aires, y se caracteriza por su textura hojaldrada y crujiente, ideal para acompañar el mate o servir en desayunos y meriendas. Su preparación puede parecer compleja debido a su técnica de hojaldrado, pero con esta receta rápida y sencilla podrás disfrutarla en casa.

La cremona se remonta a la influencia de la panadería italiana en Argentina, donde la técnica de incorporar manteca o grasa a la masa se popularizó para crear panes más crujientes.

A lo largo del tiempo, esta receta se ha adaptado a los gustos locales, convirtiéndose en una opción perfecta para quienes buscan un pan ligero pero sabroso, con una corteza dorada y una miga suave. Aunque existen variaciones en los ingredientes o en el grosor del amasado, lo que permanece invariable es su inconfundible forma en espiral.

El proceso para hacer una cremona es bastante similar al de otros panes hojaldrados. Comienza con una masa sencilla a base de harina, agua, sal, levadura y grasa (manteca o grasa vacuna), que se extiende y pliega varias veces para lograr la textura hojaldrada.

• Preparación de la masa: 20 minutos
• Tiempo de reposo: 1 hora
• Horneado: 15-20 minutos
• Tiempo total: Aproximadamente 1 hora y 40 minutos.

• 500 g de harina 000
• 25 g de levadura fresca
• 10 g de sal
• 300 ml de agua tibia
• 100 g de manteca o grasa vacuna (derretida para pincelar)
• 1 cucharadita de azúcar

• Disolver la levadura fresca y el azúcar en el agua tibia y dejar reposar unos 5 minutos hasta que espume.
• En un bol grande, mezclar la harina con la sal. Hacer un hueco en el centro y verter la mezcla de levadura.
• Amasar hasta obtener una masa homogénea y suave. Dejar reposar en un bol tapado durante 1 hora, o hasta que duplique su tamaño.
• Desgasificar la masa y estirarla con un palo de amasar en forma rectangular, hasta obtener un espesor de aproximadamente 1 cm.
• Pincelar la masa estirada con la manteca derretida, doblarla en tres partes (como si fuera una carta) y volver a estirarla. Repetir este proceso dos veces más para lograr el hojaldrado.
• Una vez realizado el plegado, cortar tiras de masa de unos 5 cm de ancho y enroscar en forma de espiral.
• Colocar las cremonas en una bandeja de horno, cubrirlas con un paño y dejarlas reposar unos 15 minutos mientras se precalienta el horno a 200°C.
• Hornear durante 15-20 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes por fuera.
• Dejar enfriar sobre una rejilla antes de servir.

Con esta cantidad de ingredientes, puedes obtener aproximadamente 8 cremonas medianas.

Cada porción de cremona contiene aproximadamente:

• Calorías: 250
• Grasas: 10 g
• Grasas saturadas: 5 g
• Carbohidratos: 35 g
• Azúcares: 2 g
• Proteínas: 5 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

La cremona casera se puede conservar hasta 3 días en un lugar seco y bien cubierto, para que mantenga su frescura y textura crujiente. También puedes congelarla por hasta 1 mes, y luego calentarla brevemente en el horno para que recupere su crocantez antes de consumirla.