Receta de pizza de 4 quesos

La pizza de 4 quesos es un deleite para los amantes del queso. Su origen se encuentra en Italia, la cuna de la pizza, donde esta versión se destaca por su deliciosa mezcla de cuatro tipos de quesos que se funden creando una experiencia cremosa y sabrosa. A menudo incluye una combinación de quesos suaves y fuertes, como mozzarella, gorgonzola, parmesano y emmental, lo que le da una profundidad de sabor única. Es una elección perfecta para quienes buscan una pizza sin los ingredientes tradicionales de carne o vegetales, permitiendo que los diferentes matices de los quesos brillen por sí mismos.

Tradicionalmente, la pizza de 4 quesos se elabora sobre una base de masa delgada y crujiente, que resalta la textura de los quesos. Dependiendo de la región, se puede encontrar con diferentes tipos de quesos, incorporando opciones locales como el pecorino o la fontina. Esta pizza se suele disfrutar con una copa de vino blanco fresco, que complementa perfectamente la cremosidad de los quesos.

La receta de la pizza de 4 quesos es sencilla y rápida de preparar. Comienza con una base de masa de pizza que se puede hacer en casa o comprar ya lista. Luego, se cubre con salsa de tomate y se agregan los cuatro quesos elegidos para la mezcla. Se hornea a temperatura alta hasta que la masa esté dorada y crujiente, y los quesos estén perfectamente derretidos y burbujeantes.

Para esta receta, utilizaremos una combinación de mozzarella, gorgonzola, parmesano y emmental, que aportan una mezcla perfecta de suavidad, cremosidad, un toque fuerte y un sabor ligeramente a nuez. Sin embargo, se pueden sustituir estos quesos según tu gusto o disponibilidad.

La preparación de esta pizza de 4 quesos requiere aproximadamente 1 hora y 30 minutos, detallado de la siguiente manera:

• Preparación de la masa (si se hace en casa): 1 hora (incluyendo el tiempo de levado).
• Armado de la pizza y colocación de ingredientes: 10 minutos.
• Horneado de la pizza: 15-20 minutos.

• 250 g de harina de trigo.
• 1 sobre de levadura seca (7 g).
• 150 ml de agua tibia.
• 1 cucharada de aceite de oliva.
• 1 pizca de sal.
• 1 taza de salsa de tomate.
• 150 g de queso mozzarella rallado.
• 50 g de queso gorgonzola desmenuzado.
• 50 g de queso parmesano rallado.
• 50 g de queso emmental rallado.
• Orégano seco al gusto.
• Aceite de oliva para rociar.

• Preparar la masa: en un bol, mezclar la harina con la sal. Disolver la levadura seca en el agua tibia y agregar a la harina junto con el aceite de oliva. Mezclar bien hasta formar una masa suave y elástica.
• Amasar: amasar la masa en una superficie ligeramente enharinada durante unos 5-10 minutos. Colocarla en un bol, cubrirla con un paño y dejar reposar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño (alrededor de 1 hora).
• Formar la base de la pizza: precalentar el horno a 220°C. Una vez que la masa haya levado, extenderla sobre una superficie enharinada con un rodillo, dándole forma redonda o cuadrada según se prefiera. Transferirla a una bandeja de horno ligeramente enharinada o sobre papel de hornear.
• Agregar la salsa de tomate: extenderla sobre la base de la pizza, cubriendo uniformemente toda la superficie.
• Añadir los quesos: repartir de forma uniforme el queso mozzarella rallado, seguido del gorgonzola desmenuzado, el parmesano rallado y el emmental.
• Hornear: llevar la pizza al horno precalentado y hornear durante 15-20 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente, y los quesos bien derretidos y dorados.
• Servir: sacar la pizza del horno, rociar con un chorrito de aceite de oliva y espolvorear orégano seco al gusto. Cortar en porciones y servir inmediatamente.

Con esta cantidad de ingredientes, la receta de pizza de 4 quesos rinde aproximadamente 2-3 porciones, dependiendo del tamaño de las porciones.

Cada porción de pizza de 4 quesos (aproximadamente un tercio de la pizza completa) contiene:

• Calorías: 380
• Grasas: 18 g
• Grasas saturadas: 9 g
• Carbohidratos: 38 g
• Azúcares: 3 g
• Proteínas: 16 g

Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.

La pizza de 4 quesos se puede conservar en la heladera durante 2-3 días. Se recomienda almacenarla en un recipiente hermético o bien envuelta para mantener su frescura. Para recalentarla, se puede usar el horno o una sartén para que la masa recupere su textura crujiente.