La tarta de yogur es un postre versátil, fresco y perfecto para cualquier ocasión. Ideal para aquellos momentos en los que quieres sorprender con algo dulce pero no dispones de mucho tiempo, esta tarta destaca por su sencillez y sabor suave. Es una excelente opción para reuniones familiares o para disfrutar como merienda. Su textura ligera y cremosa, junto con un toque de acidez proporcionado por el yogur, la convierten en una alternativa refrescante y menos empalagosa que otras tartas más pesadas.
Originaria de la cocina europea, la tarta de yogur ha ganado popularidad en todo el mundo gracias a su facilidad de preparación y a la posibilidad de personalizarla con diferentes toppings, como frutas frescas, mermeladas o frutos secos. No requiere técnicas complicadas ni ingredientes difíciles de conseguir, lo que la hace ideal para cocineros principiantes o para aquellos que buscan una receta rápida pero deliciosa. Es perfecta para disfrutar en verano, aunque puede servirse en cualquier época del año.
Receta de tarta de yogur
La tarta de yogur es un postre muy sencillo que se caracteriza por su frescura y su textura suave. Se elabora principalmente con yogur, huevos y un toque de limón, lo que le aporta un sabor delicado. Aunque la base puede ser opcional, generalmente se utiliza una base de galletas trituradas que añade una textura crujiente a cada bocado.
Esta receta no requiere horneado en algunos casos, lo que la hace aún más rápida y fácil de preparar. Es perfecta para cuando tienes invitados y necesitas un postre que no requiera demasiada atención, pero que impresione por su sabor y presentación.
Tiempo de preparación
Para esta receta de tarta de yogur rápida y fácil se necesitan aproximadamente 3 horas y 20 minutos en total. Este tiempo incluye 20 minutos para preparar la base y el relleno, y unas 3 horas de refrigeración para que la tarta tome consistencia.
Ingredientes
- 200 g de galletas tipo María o Digestive.
- 100 g de mantequilla derretida.
- 500 g de yogur natural (puede ser griego para una textura más cremosa).
- 200 ml de nata para montar (crema de leche).
- 100 g de azúcar.
- 5 hojas de gelatina neutra o 8 g de gelatina en polvo.
- Ralladura de 1 limón (opcional).
- Frutas frescas o mermelada para decorar (opcional).
Cómo hacer tarta de yogur, paso a paso
- Triturar las galletas en un procesador de alimentos o en una bolsa con un rodillo hasta que queden finamente molidas.
- Mezclar las galletas trituradas con la manteca derretida hasta obtener una masa homogénea.
- Extender la mezcla de galletas en el fondo de un molde desmontable, presionando bien para que quede una base compacta. Reservar en el freezer.
- Hidratar las hojas de gelatina en agua fría durante unos 5 minutos. Si se usa gelatina en polvo, disolverla en un poco de agua fría.
- Mientras tanto, en un bol grande, mezclar el yogur con el azúcar y la ralladura de limón.
- Calentar la nata en una cacerola a fuego bajo sin que llegue a hervir. Retirar del fuego y añadir la gelatina escurrida o disuelta, removiendo hasta que se integre completamente.
- Añadir la mezcla de nata y gelatina al bol con el yogur y mezclar bien.
- Verter la mezcla de yogur sobre la base de galletas en el molde y alisar la superficie con una espátula.
- Refrigerar la tarta durante al menos 3 horas, o hasta que esté completamente cuajada.
- Antes de servir, desmoldar con cuidado y decorar con frutas frescas o mermelada al gusto.
¿Cuántas porciones rinde esta receta?
Con esta cantidad de ingredientes, esta receta de tarta de yogur rinde aproximadamente 8 porciones de tamaño estándar.
¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?
Cada porción de esta tarta de yogur contiene aproximadamente:
- Calorías: 300
- Grasas: 18 g
- Grasas saturadas: 10 g
- Carbohidratos: 30 g
- Azúcares: 20 g
- Proteínas: 5 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?
La tarta de yogur se puede conservar en el refrigerador por hasta 3 días, siempre y cuando se mantenga bien cubierta para evitar que absorba otros olores y se mantenga fresca.