Cómo aumentar tu autoconfianza con estas 9 frases, según una psicóloga de Harvard

Las herramientas verbales propuestas por Cortney S. Warren ayudan a manejar situaciones adversas y fomentan la resiliencia

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La resiliencia emocional implica aprender a controlar solo lo que está a nuestro alcance
(Imagen Ilustrativa Infobae).
La resiliencia emocional implica aprender a controlar solo lo que está a nuestro alcance (Imagen Ilustrativa Infobae).

En la vida cotidiana, los desafíos y contratiempos son inevitables. La manera en que las personas enfrentan estos obstáculos determina su fortaleza emocional. La psicóloga Cortney S. Warren, de la Escuela de Medicina de Harvard, explicó cómo ciertas frases pueden ayudar a aumentar la resiliencia y la autoconfianza, y así, proporcionar una guía para aquellos que desean fortalecer su capacidad de adaptación a las adversidades.

¿Qué es la resiliencia?

La resiliencia es la capacidad de adaptación frente a situaciones adversas. No es solo una cuestión de soportar el dolor, sino de responder de manera eficaz a las experiencias dolorosas, centrando la atención en lo que se puede controlar y dejando ir lo que no. Las personas emocionalmente resilientes practican esta habilidad deliberadamente, permitiéndose sentir el duelo pero también recordar por qué están agradecidas y cómo pueden avanzar.

Las frases que usan las personas que son fuertes emocionalmente

La aceptación ayuda a reducir el impacto de situaciones negativas (Imagen Ilustrativa Infobae)
La aceptación ayuda a reducir el impacto de situaciones negativas (Imagen Ilustrativa Infobae)

La psicóloga de Harvard, Cortney S. Warren, identificó nueve frases que pueden ser de gran ayuda para desarrollar la resiliencia emocional. Estas frases fomentan una mentalidad positiva y también ayudan a enfrentar y superar las adversidades diarias de manera más efectiva:

1- “Puedo superar esto”

Las personas resilientes entienden que deben ser fuertes y superar la adversidad sin dejar que esta les derrote. Esta frase resuena con determinación y dureza mental, componentes clave de la resiliencia.

2- “No me voy a permitir ser una víctima”

En lugar de verse a sí mismas como víctimas incapaces, las personas emocionalmente fuertes se preguntan cómo pueden crecer a partir de sus experiencias dolorosas. La frase implica un cambio de perspectiva, crucial para la resiliencia.

3- “La vida es dura”

Aceptar que la vida no siempre es justa ayuda a no tomar las dificultades como algo personal. Al entender que experimentar dificultades emocionales es parte de la vida, las personas resilientes manejan mejor los eventos indeseables.

4- “Esto también pasará”

Los contratiempos se sienten horribles en el momento, pero nada en la vida es permanente. Las personas resilientes se aseguran de que, aunque el dolor no desaparezca por completo, pueden trabajar para hacerlo menos traumático con el tiempo.

Las personas fuertes emocionalmente no se ven ni siquiera a sí mismas como víctimas (Getty Images)
Las personas fuertes emocionalmente no se ven ni siquiera a sí mismas como víctimas (Getty Images)

5- “¿Qué puedo aprender de esto?”

Buscar lecciones en experiencias difíciles permite cambiar la perspectiva. Al preguntar qué se puede aprender, se navega mejor por los altibajos inevitables de la vida.

6- “Necesito algo de tiempo”

La flexibilidad emocional es clave en la resiliencia. Tomarse un momento para regular las emociones y reducir su intensidad puede empoderar a una persona durante tiempos difíciles.

7- “Todavía tengo cosas por las que estar agradecido”

Incluso en tiempos de dificultad, las personas resilientes encuentran algo positivo en qué concentrarse. Esta práctica les permite mantenerse equilibradas emocionalmente.

8- “Es lo que es”

Aceptar la realidad tal como es, sin intentar cambiarla, ayuda a reducir su impacto negativo. La aceptación radical quita poder a las situaciones adversas, facilitando la superación.

9- “Estoy dejando pasar esto”

Aferrarse al resentimiento y a la venganza solo incrementa el dolor. Desarrollar resiliencia implica aprender a dejar ir las circunstancias difíciles, permitiendo que las personas avancen.

Cómo entrenar la fortaleza mental

Los fracasos pueden ser oportunidades para aprender y crecer emocionalmente (Imagen ilustrativa Infobae)
Los fracasos pueden ser oportunidades para aprender y crecer emocionalmente (Imagen ilustrativa Infobae)

La fortaleza mental es una cualidad esencial para superar los desafíos de la vida. Se desarrolla desde la infancia y se fortalece con el tiempo a través de experiencias y aprendizajes. Expertos destacan que practicar la flexibilidad, la autorregulación y la gratitud son aspectos fundamentales para construir una mente resiliente y recomiendan:

  • No malgastar energía en lo que no se puede controlar: es crucial concentrarse en la situación actual y en cómo resolverla, dejando de lado aspectos incontrolables.
  • Cultivar la inteligencia emocional: identificar y gestionar las propias emociones ayuda a enfrentar complejidades con mayor fortaleza mental.
  • Probar cosas nuevas: la curiosidad y la búsqueda de nuevas experiencias estimulan el cerebro, promoviendo una mente más flexible y creativa.
  • Liberar la mente de creencias limitantes: combatir pensamientos negativos y creer en las propias capacidades es esencial para aumentar la fortaleza mental.
  • Aprender de los errores: analizar las fallas para entender cómo mejorar en el futuro es una práctica común entre quienes poseen gran fortaleza mental.
Desarrollar la resiliencia incluye saber perdonar y avanzar
(Imagen Ilustrativa Infobae)
Desarrollar la resiliencia incluye saber perdonar y avanzar (Imagen Ilustrativa Infobae)
  • Cortar con relaciones tóxicas: mantener relaciones positivas y eliminar las tóxicas ayuda a gestionar mejor los recursos psicológicos necesarios para enfrentar crisis.
  • Saber perdonar y dar otra oportunidad: el perdón y la compasión son valiosos para mantener relaciones saludables y llevar una vida equilibrada.
  • Mantener una actitud prudente: la autorregulación y el autocontrol son fundamentales para evitar decisiones impulsivas y arrepentimientos.
  • Ser positivo y agradecido: el optimismo y la gratitud por las cosas buenas aportan bases sólidas para construir una mente resiliente y fuerte.
  • Reflexionar sobre los logros: valorar los logros pasados y reconocer la capacidad de superación fortalece la confianza para enfrentar nuevos desafíos.

La resiliencia y la fortaleza mental no son habilidades innatas, sino que se construyen y fortalecen con práctica y deliberación. Adoptar estas frases y estrategias puede ayudar a cualquier persona a convertirse en una versión más fuerte y segura de sí misma.

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