Receta de pesto, rápida y fácil

El pesto es una salsa italiana clásica que combina albahaca, ajo, piñones, queso parmesano y aceite de oliva para crear una explosión de sabor. A continuación, te mostraré cómo preparar una versión rápida y fácil de esta deliciosa salsa.

El pesto es una salsa versátil y deliciosa que se originó en Génova, Italia. Tradicionalmente, se prepara con albahaca fresca, ajo, piñones, queso parmesano y aceite de oliva, todo triturado en un mortero. Esta salsa verde vibrante es perfecta para acompañar pastas, untar en sándwiches o como aderezo para ensaladas. Aunque el método tradicional implica un poco más de tiempo y esfuerzo, hoy te presento una receta simplificada que puedes hacer en minutos con la ayuda de una licuadora o procesador de alimentos.

El pesto es famoso por su sabor fresco y su versatilidad en la cocina. Es una excelente opción para aquellos días en los que necesitas una comida rápida pero sabrosa. Además, esta receta rápida conserva todo el sabor y la autenticidad del pesto tradicional, permitiéndote disfrutar de un plato de calidad en menos tiempo.

Para preparar esta versión rápida de pesto, utilizaremos los mismos ingredientes básicos pero empleando un procesador de alimentos para ahorrar tiempo. Esto nos permitirá disfrutar de todo el sabor del pesto tradicional en una fracción del tiempo.

Preparar este pesto te llevará aproximadamente 10 minutos en total. Esto incluye el tiempo para lavar y preparar los ingredientes, así como para mezclarlos en el procesador de alimentos.

• 2 tazas de hojas de albahaca fresca
• 1/2 taza de queso parmesano rallado
• 1/2 taza de aceite de oliva virgen extra
• 1/3 taza de piñones
• 2 dientes de ajo
• Sal al gusto
• Pimienta negra al gusto

1. Lava bien las hojas de albahaca y sécalas con cuidado.
2. En un procesador de alimentos, agrega las hojas de albahaca, el queso parmesano rallado, los piñones y los dientes de ajo pelados.
3. Procesa los ingredientes hasta que estén finamente picados.
4. Con el procesador en marcha, vierte lentamente el aceite de oliva en un flujo constante hasta que la mezcla esté bien combinada y tenga una textura suave.
5. Detén el procesador y sazona con sal y pimienta al gusto.
6. Procesa nuevamente brevemente para asegurarte de que los condimentos estén bien incorporados.
7. Transfiere el pesto a un frasco o recipiente hermético y guárdalo en el refrigerador hasta que estés listo para usarlo.