La importancia de adoptar comportamientos de éxito es innegable para alcanzar objetivos tanto en la vida personal como en el trabajo. A pesar de que el éxito es subjetivo, y cada quién puede tener una noción personal de lo que significa, lo cierto es que esto es algo que todos buscamos y deseamos obtener.
De acuerdo con un artículo de la Harvard Business Review (HBR), titulado “What Sets Successful CEOs Apart” (Qué distingue a los CEO de éxito), basado en una investigación de 10 años del ghSmart’s CEO Genome Project, hay claves que distinguen a las personas más exitosas en sus respectivas áreas.
Uno de los comportamientos más destacados entre los altos ejecutivos es la capacidad de tomar decisiones rápidas y resolutivas. Según HBR, “los CEOs de alto desempeño no necesariamente se destacan por tomar grandes decisiones todo el tiempo; más bien, destacan por ser más resolutivos”. Esto implica que, aunque no siempre se tomen las mejores decisiones, es crucial hacerlo de manera rápida y con convicción. La indecisión y el miedo a tomar decisiones pueden ser frenos significativos en el camino al éxito.
Otro comportamiento esencial es el de buscar crear impacto. Esta práctica implica conocer las necesidades y prioridades de clientes, público o inversionistas para poder satisfacer esas expectativas y generar mejores resultados. “Esto permite alinear tanto tus esfuerzos como los de tu equipo”, señaló HBR. Además, la habilidad de comunicar claramente las metas y prioridades es fundamental para trabajar de manera más efectiva.
La capacidad de adaptarse de manera proactiva también es una característica crítica de las personas exitosas. El mundo y sus necesidades cambian constantemente, por lo que la adaptabilidad se convierte en una herramienta indispensable: “Cuando te adaptas, entonces es más fácil lidiar con lo inesperado”. Este enfoque se centra en los objetivos a largo plazo y no solo en las necesidades inmediatas.
Una última conducta clave para lograr el éxito es la entrega confiable y la consistencia en la calidad del trabajo. Esto incluye respetar fechas límite y cumplir lo que se promete. Según HBR, “una práctica clave aquí es establecer expectativas realistas desde el principio,” permitiendo así que los demás confíen y dependan de ti, lo que facilita obtener apoyo y credibilidad.
Además de estos comportamientos, expertos han señalado la importancia de crear hábitos y rutinas diarias que encaminan hacia los objetivos deseados. Es esencial tener una actitud positiva y ajustar comportamientos que nos acerquen al éxito. “Los hábitos exitosos funcionan únicamente si se practican de manera constante,” enfatiza HBR.
Si bien existen un sinfín de consejos e información de diversas instituciones y especialistas, que nos dicen cuáles son los hábitos que tienen la personas exitosas, lo cierto es que también existen muchos malos hábitos que pueden estar impidiendo que logres estar en donde deseas estar.
Las conclusiones de la HBR derivan de análisis de perfiles de diversos CEOs a lo largo de la década, y subrayan que, si bien no todos tienen la misma visión del éxito, los comportamientos consistentes y las decisiones firmes son pilares comunes entre los más exitosos.
Estos comportamientos no solo son aplicables en el ámbito empresarial, sino que también pueden adaptarse a diversas facetas de la vida cotidiana. Mantener una buena actitud, establecer rutinas, y ajustar comportamientos son claves que pueden ayudar a cualquiera a avanzar en sus proyectos y alcanzar sus metas.
Si bien existen muchos factores que intervienen para alcanzar el éxito, estos hábitos te ayudarán a tener una mentalidad de enfoque y atención hacia las oportunidades. Esta información podría ayudar te reflexionar sobre que situaciones, hábitos o actitudes puedes modificar para convertirte en una persona que se llegue al éxito personal en los diferentes aspectos de su vida.