Brindar por el amor: qué vino elegir en San Valentín y dónde celebrar

Cada vez son más las parejas que aprovechan el 14 de febrero para festejar. Las mejores propuestas de menús, tragos y vinos para disfrutar de a dos en restaurantes y bares de Buenos Aires

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Por Fabricio Portelli

Cada vez son más las parejas que aprovechan el 14 de febrero para celebrar su amor, y para ello surgen innumerables propuestas de menús, tragos y vinos para disfrutar de a dos en restaurantes y bares de todo el país.

Si bien San Valentín es una "celebración importada", con los años va tomando fuerza, porque cada vez son más las parejas que se animan a festejar su día. Y más allá del costado comercial que tiñe la fecha, muchos prefieren aprovechar ese día para reforzar sus sentimientos, ya sea con un simple saludo, un pequeño regalo, una comida romántica – en casa o en un restaurante – o incluso una escapada. Y el vino se convierte en un aliado indispensable fara celebrar el amor.

Brindar por el amor con vinos

Ya sea en casa o en un restaurante, hay que pensar en ese vino que a la pareja le gusta o le hace revivir buenos recuerdos. Y si bien el tema del maridaje es importante, aquí se privilegia el festejo de a dos, y por eso todas las fichas hay que apostarlas a un solo vino, a menos que se trate de un menú por pasos en un restaurante.

Por lo tanto, la elección de ese vino puede ser el primer gran paso para tener éxito en San Valentín. Olvidarse de las preferencias personales, sobre todo si se tratan de tintos corpulentos, porque esos suelen ser más pesados y concentrados (y generalmente, tiñen de violeta los dientes), y es necesario terminar la comida en perfectas condiciones para tener ganas de seguir celebrando. Aquí lo mejor será elegir un vino pensando en el mayor disfrute del otro. Que sea fresco y liviano permite que la sobremesa se alargue, y además le quita protagonismo. Es decir, el vino debe acompañar en silencio e ir aportando lo suyo. Lo mismo debe pasar con la comida elegida.

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En casa puede ser una preparación inusual y entretenida, pero también de estructura liviana. Hasta un delivery puede ser suficiente, siempre y cuando rompa con la rutina. Claro que el maridaje es importante pero no se trata de un evento gastronómico sino de un momento de seducción.

El Champagne es el vino ideal porque simboliza la celebración en su máxima expresión, pero también por ser refrescante y tener estructura vivaz para acompañar muchos tipos de comida. Además, es un vino que está vivo en el recuerdo por los festejos de fin de año. Los Nature y Brut Nature suelen ser los más finos y delicados, en los Extra Brut y Brut el final es más amable gracias al licor de expedición, y los espumosos dulces están pensados más para acompañar los postres. Al ser un gran productor de vinos espumantes la oferta muy amplia, y los precios están muy en sintonía con la calidad embotellada. Los espumosos rosé pueden ir un paso más allá por ser más originales y ostentar su aspecto (brillante y rosado) desde las copas.

Los vinos blancos también pueden ser ideales, porque acá puede hacer calor en San Valentín, y será necesario un vino que reviva el paladar con cada trago, pero no por contundente sino por refrescante. Recordar que están los aromáticos (Torrontés, Sauvignon Blanc, Gewurztraminer, etc.), que muchas veces remiten a notas florales, y los más austeros (Chardonnay, Semillon, Pinot Gris, etc.). Ambos pueden cumplir muy bien con el objetivo y lucirse con sushi, pescados y carnes blancas, o simplemente con una buena tabla de quesos.

Si el tinto es el preferido de la pareja, sin dudas el más seductor será el Pinot Noir, aunque cada vez hay más Malbec y hasta Cabernet Franc, de cuerpo liviano y ágil, capaces de acompañar una velada sin llamar la atención. Pero el Pinot Noir tiene algo que lo hace especial, por eso lo llaman "el rompe corazones". Por un lado, es un vino original por su escasez, y además es el protagonista del vino más caro del mundo (Domaine de la Romanée-Conti, Borgoña, Francia).

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En la Argentina hay muy buenos exponentes, sobre todo en Patagonia y Valle de Uco. Los más destacados suelen ser equilibrados y frescos, con un carácter frutal muy sutil (cerezas) y suaves especias. Sus taninos siempre son suaves e incipientes. Un vino delicado en aromas, sabores y texturas, que se puede disfrutar solo por copa o acompañando carnes y pastas de todo tipo. Evitar servirlo con algo dulce como chocolate porque romperá su armonía.

Pero hay un vino que asoma como la mejor opción: el rosado. Una de las categorías que más ha crecido y evolucionado últimamente en la Argentina. Las variedades no importan tanto como sí el estilo, y eso es fácil de apreciar antes de abrir la botella. Porque al ser transparente deja ver la tonalidad de su color, y cuánto más suave, más delicado será el vino.

Obviamente hay botellas que parecen objetos de lujo, de precios altos (hasta con tapón de vidrio), pero también hay algunas muy buenas alternativas que van desde los $200 por botella y con tapa a rosca. Los rosé además son ideales para animarse a elaborar tragos con vino.

También puede ser solo una copa de vino dulce al final de la comida. Si es un blanco dulce natural, será más liviano en todo sentido, pero si de trata de un cosecha tardía, el dulzor será más intenso y bien equilibrado por la acidez. Y si es un fortificado tinto, tipo Porto, la sensación será más envolvente y madura. Los primeros pueden destacarse con bocados dulces a base de frutas y todo tipo de pastelería, mientras que el Porto es ideal para acompañar con un buen chocolate amargo.

Para aprovechar el 14 de febrero

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Para acompañar a los enamorados en sus festejos, Aldo´s Vinoteca presenta un menú diseñado por su chef Maximiliano Matsumoto, que estará disponible tanto en el local de San Telmo como en el de Palermo, maridado con vinos Saint Felicien. Propone langostinos asados, maíz, pepino y sorbet de duraznos con un Chardonnay 2016, y un truchón con puré de calabaza ahumado, eneldo y pickles de ciruelas con su clásico Cabernet Merlot 2015, entre las opciones.

La Locanda, el restaurante italiano al mando del prestigioso chef Daniele Pinna, preparará un festejo único ideado para celebrar el día de San Valentín, con vinos de la bodega Rutini (Chardonnay y Pinot Noir): copa de bienvenida de espumante, langostinos a la livornese, raviol de ricota de oveja con tomates frescos y menta, y mousse de chocolate como postre, es una de las alternativas que se pueden elegir del menú ($1200 por persona).

En bares y restaurantes de CABA y GBA, a los que consuman una botella de cualquiera de los espumantes Chandon, se les obsequiará otra botella del Chandon Rosé de 750cc para disfrutar en pareja.

Implantado en el antiguo Pasaje Belgrano, en un ambiente que enmarca arte y siglos de historia arquitectónica, Puerta del Inca puede ser el escenario ideal para celebrar el amor. El 14 de febrero, todas aquellas parejas que concurran al restaurante y acompañen su cena con una botella de espumante Navarro Correas Reserva, se llevarán de regalo dos botellas del Extra Brut para extender el festejo en sus hogares. Su cocina se destaca por los sabores de la gastronomía peruana con variedad de ceviches, tiraditos y causas.

Para un festejo con acento francés Fleur de Sel, uno de los restaurantes más exclusivos de Belgrano, propone disfrutar de una noche especial en un ambiente cálido, íntimo y romántico, donde los manjares franceses serán los protagonistas. Un menú de 5 pasos, especialmente creado por sus chefs y dueños Valentina Avecilla y Jean-Baptiste Pilou, para agasajar a los enamorados en una velada única llena de amor, maridado con vinos de El Esteco.

Daniel Hansen, el chef a la cabeza de La Pecora Nera, diseñó dos opciones para poder disfrutar el día de los enamorados: a la manera italiana en el Ristorante, o con las mejores carnes en el Grill, ambas con vinos Nicasia y el espumante DV Catena Nature, de la bodega Catena Zapata. Uno de los menús incluye ostiones gratinados, cuchara de pulpo español, ensalada de palta, alcauciles, vivos de pomelo y mollejas aderezada con vinagreta de miel y tamarindos, ravioles de queso de cabra y perejil en manteca de olivas negras, Lomo de novillo envuelto en jamón crudo con hongos frescos y romero, acompañado de papines jujeños, Sorbete de albahaca, Dúo de semifreddo: piña con mango y avellanas con cacao amargo.

Por su parte, La Tornería de Camila invita a celebrar San Valentín con dos propuestas exclusivas con suculentos platos creados por su chef Camila Pérez. Una de las opciones es un menú degustación de 5 pasos: bruscheta de salmón gravlax, creamchese de lima, cebolla colorada y alcaparras, Papas estilo huancaína con huevo frito, risotto cremoso de remolacha y parmesano, bondiola con cebollas caramelizadas y batatas, cheesecake de banana con dulce de leche de cabra.

En los restaurantes del Hotel Four Seasons -Elena y Nuestro Secreto (solo en el jardín)- servirán un menú fijo, mientras que en el bar Pony Line se llevará a cabo "Dark San Valentín" con música del DJ Fernando Pulichino, de 21 a 1hs, con menú a la carta, y todo con vinos de la bodega Escorihuela,

En el piso 15 del edificio Comega se podrá disfrutar de un menú de tres pasos en alguna de sus terrazas admirando la vista de la ciudad. La propuesta de Vuelta Abajo Social Club comienza con una entrada de langostinos, vieyras y cereza; el plato principal será pesca blanca, chauchas y almendras; mientras que el postre serán frutos rojos, curd de limón, dulce de leche y chocolate blanco, todo acompañado con vinos D.V. Catena.

Para una noche más informal, Mamba Food & Drinks propone una experiencia sensorial desde lo gastronómico hasta lo arquitectónico. Gastronomía de fusión que incluye raciones como langostinos envueltos, mollejas crispy y bondiola tandoori, y especiales como magret de pato, ojo de bife y chernia a la ceniza. En su larga barra se ofrece una exclusiva carta de Gin Tonics.

En Parque Bar, el 14 de febrero obsequiará a las parejas un exclusivo cóctel, ideado por su jefe de barra Matías Luis Benitez, compuesto por London Dry Gin, Americano Gancia, syrup de frambuesas, jugo de limas, agua de pepino y aquafaba. Ideal para la temporada por sus leves notas entre lo cítrico y lo dulce, con un toque de London Dry Gin que, junto al Gancia, completa los sabores, siendo un cóctel muy refrescante al paladar.

Fabricio Portelli es sommelier argentino y experto en vinos

Twitter: @FabriPortelli

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