En los meses de verano, cuando las temperaturas alcanzan niveles extremos, es común usar el aire acondicionado para mantener la comodidad en el hogar. Sin embargo, su uso continuo puede disparar los costos de energía y, en algunos casos, afectar la salud por la exposición constante al aire frío.
Es aquí donde entra en juego el modo dry, una función poco conocida, pero altamente eficiente que no solo ayuda a reducir el consumo energético, sino que también mejora la calidad del aire interior.
El modo dry opera como un deshumidificador, eliminando el exceso de humedad del ambiente sin enfriar en exceso. Este enfoque equilibrado reduce la sensación de calor pegajoso típica de los días húmedos y previene problemas respiratorios derivados de la alta humedad.
Qué es y cómo activar el ‘modo dry’
El modo dry está diseñado específicamente para eliminar la humedad del aire sin enfriar tanto como el modo normal de refrigeración. Al activarlo, el aire acondicionado funciona a baja velocidad, extrayendo la humedad del ambiente mientras mantiene una temperatura estable.
Esto lo convierte en una herramienta eficaz para días húmedos en los que la temperatura no es excesivamente alta. Para activarlo, solo hay que buscar el botón identificado como dry o con un símbolo de gota de agua en el control remoto del aire acondicionado.
Una vez seleccionado, el equipo ajustará automáticamente su operación para centrarse en la deshumidificación. Es fundamental leer el manual del fabricante, porque las funciones pueden variar según el modelo.
En qué momentos es ideal usar esta función del aire acondicionado
El modo dry es especialmente útil en climas húmedos o durante la temporada de lluvias, cuando la sensación de incomodidad no proviene tanto del calor, sino del exceso de humedad en el aire.
También, es ideal para las noches, cuando las temperaturas bajan pero la humedad persiste, permitiendo un descanso más confortable sin enfriar en exceso el ambiente.
Además, este modo puede ser beneficioso en habitaciones que tienden a acumular humedad, como baños, sótanos o cocinas, porque ayuda a prevenir la formación de moho y a mantener un ambiente más saludable para la familia.
Cómo ahorrar energía con el aire acondicionado
El ahorro energético del modo dry ocasiona que el equipo utilice menos potencia al centrarse únicamente en la deshumidificación, en lugar de enfriar constantemente el aire.
Esto significa que el compresor no trabaja a máxima capacidad, reduciendo el consumo de electricidad y prolongando la vida útil del aparato.
Este modo puede reducir el consumo energético en comparación con el modo de refrigeración tradicional, especialmente en climas donde la humedad es el principal problema.
Este ahorro no solo beneficia al usuario, sino que también contribuye a un menor impacto ambiental al disminuir la huella de carbono asociada al uso de energía.
Cómo protege esta función a la salud de la familia
El exceso de humedad en el hogar puede convertirse en un foco para ácaros, moho y bacterias, que son responsables de alergias y problemas respiratorios como el asma. Al reducir la humedad, el modo dry minimiza estos riesgos y mejora la calidad del aire interior, creando un entorno más saludable.
Asimismo, evita el choque térmico que ocurre al usar el aire acondicionado en temperaturas extremadamente bajas, lo que puede provocar resfriados, sequedad en la piel y molestias respiratorias.
Al mantener un equilibrio entre temperatura y humedad, se consigue un confort térmico más natural y menos agresivo para el organismo.
Por otro lado, considerar que en días de calor extremo, su capacidad para enfriar el ambiente es limitada, porque su enfoque principal es la deshumidificación. En estas situaciones, hay que usar el modo de refrigeración para garantizar una temperatura adecuada.