A mediados de febrero pasado, la Policía Federal Argentina secuestró más de 1.600 kilos de picadura y semillas de marihuana en la ciudad de Córdoba: hubo 16 detenidos, todos integraban una organización narco. La droga que provenía desde Corrientes, tenía origen en Paraguay y zonas del Norte argentino. Fue hallada en vehículos interceptados en la Ruta Nacional 9 y en un galpón ubicado en el barrio 25 de mayo que simulaba ser el depósito de una empresa metalúrgica, pero que, en realidad, era donde la acopiaban, fraccionaban y desde donde se hacía la distribución hacia distintos puntos de esa provincia.
El operativo significó un golpe a la estructura criminal: se calcula que la poco más de tonelada y media de droga incautada le hubiera aportado más de $100 millones. Los allanamientos se dieron en el marco de una larga investigación dirigida por el fiscal Enrique José Senestrari, a cargo de la Fiscalía Federal N°1 de Córdoba, y el juez Alejandro Sanchez Freytes, titular del Juzgado Federal N°2. Esta causa derivó de otra por venta ilegal de armas iniciada en 2021.
Entre los 16 detenidos del caso se encuentran los proveedores de los estupefacientes y también varios integrantes de un grupo activo de la barra brava del Club Atlético Talleres de Córdoba, conocida como “La Fiel”. Según se supo, algunos de ellos registran frondosos prontuarios delictivos, con antecedentes por homicidios y robos a mano armada. Además, casi un mes después, a fines de marzo, se entregó Darío Cáceres, líder de esa barrabrava y uno de los sospechosos que no había sido hallado durante los procedimientos debido a que se encontraba de viaje por Brasil.
Sin embargo, la investigación no terminó allí y en las últimas horas se hicieron nuevos allanamientos en domicilios de Corrientes. Fueron 13 operativos enfocados en el incremento económico de los involucrados, especialmente los proveedores: el objetivo de los investigadores era establecer el método que seguían para realizar el blanqueo de divisas provenientes del tráfico de estupefacientes.
En ese contexto, la División Antidrogas de Córdoba de la PFA, en colaboración con otras divisiones que dependen de la Superintendencia de Drogas Peligrosas, detectó un stud -o caballeriza, donde se cuidan caballos de carrera- en la ciudad de Corrientes, con más de 20 caballos, muchos de ellos oriundos del Brasil y ganadores de premios en distintas carreras. La sospecha es que los detenidos habrían lavado dinero -cuyo real origen sería el narcotráfico- a través de caballos y sus apuestas.
“Esta es la posible modalidad de su acrecentamiento económico, ya que las ganancias obtenidas resultan de un mundo poco claro en cuanto a las apuestas que rondan cifras millonarias”, señalaron las fuentes.
El haras sería propiedad de uno de los acusados, identificado como Gustavo Daniel ‘Mosca’ Medina Ramírez. Se trata de uno de los 17 detenidos en los operativos de febrero. En aquella ocasión, al sospechoso le secuestraron una camioneta Toyota SW4, con la que había viajado desde Corrientes a Córdoba antes de ser capturado por la PFA. De acuerdo a la investigación, Medina Ramírez fue uno de los ciudadanos correntinos que cumplía, con su vehículo, el rol de apoyo al camión donde se transportaba parte de la marihuana incautada.
SEGUIR LEYENDO: