Salta: un ciudadano de Bolivia falsificó su identidad para recibir atención gratuita en un hospital

Un confuso episodio se vivió en Salta, luego de que se descubriera que un ciudadano boliviano utilizó el documento de identidad de un argentino para recibir atención médica gratuita. El caso ocurrió en el Hospital de San Bernardo que, por disposición oficial, desde fines de febrero cobra la atención sanitaria a pacientes extranjeros, medida que fue refrendada luego por la Ley Nº 8421.

La irregularidad se conoció cuando el hombre, cuya verdadera identidad no trascendió, falleció producto de una larga enfermedad. Para las autoridades del hospital se trataba de una persona que pertenecía al pueblo originario wichí y que había ingresado al centro de salud en un estado “deteriorado”. Incluso se había activado el dispositivo de cuidados paliativos y se evaluaba darle el alta para que pudiera fallecer en su ciudad de origen.

Tras el deceso se descubrió que había falseado su identidad. “Por la gravedad de su cuadro, fue atendido, pero falleció. El documento decía que era un ciudadano de los pueblos originarios, entonces, nos comunicamos con sus referentes para informar que había fallecido. Nos dicen ‘no, si está acá con nosotros’. ¿Cómo que está con ustedes, si lo tenemos acá fallecido?”, relató Martín Monerris, secretario de Servicios de Salud de Salta, en diálogo con Infobae.

El caso está judicializado y todavía no se sabe cómo llegó el DNI a sus manos: si fue una venta, un robo o si se lo prestó el mismo argentino.

“Están haciendo algunas maniobras espurias para poder ser ingresados al hospital sin tener que abonar. Estamos empezando a sospechar que sea así -una modalidad de delito y no un caso excepcional- pero no lo sabemos”, añadió el funcionario provincial.

Fuentes ligadas a la investigación confirmaron a Infobae que el hospital tuvo conocimiento de la irregularidad una vez que el hombre de identidad boliviana murió. Es más, personal especializado en abordaje de pueblos originarios acudió al registro civil junto con la mujer que lo acompañaba, quien se había presentado como tía. Allí, le exigieron el documento y el certificado de defunción del hospital. En ese momento se quebró y reveló el engaño: reconoció que el DNI no era el correcto, que el hombre era ciudadano boliviano y que ella no era su tía, sino la pareja.

“Nosotros revisando la historia clínica del paciente, tenemos consultas del año pasado, donde el paciente ingresó con la misma identidad”, explicó Pablo Solomón, gerente del hospital, en diálogo con El Tribuno. De acuerdo con el medio local, el ciudadano boliviano sufría de un cáncer de páncreas y había sido derivado de la ciudad de Tartagal.

En los últimos días, el cobro de los servicios de salud en Salta fue actualizado en un promedio del 20%. De acuerdo con Monerris, la jurisdicción atendía anteriormente 3.300 extranjeros por mes, más de 39.000 al año. Hoy, esa cifra no superaría anualmente los 15.000.

“Eran 100 pacientes -extranjeros- por día. Una barbaridad, porque por cada uno que atendés, dejás de atender en tiempo y forma a uno de Salta. No pagaban absolutamente nada. Nuestro presupuesto se iba y no podíamos recuperar el costo para dar mayor calidad de atención a nuestros pobladores”, añadió el secretario de Servicios de Salud de Salta.

La aplicación de la nueva disposición tuvo un efecto inmediato. La concurrencia de extranjeros en los centros de salud disminuyó notablemente. El caso más representativo es el de Salvador Mazza, localidad al norte de la provincia, en donde se redujo en un 95%. Le siguen San Ramón de la Nueva Orán, en un 90%; el Hospital Materno Infantil, 55%, y el departamento de Tartagal, en un 42%.

“Se le explicó a la cónsul de Bolivia -Felipa Huanca- que nosotros estamos acogidos a la ley N° 8.421 y que no vamos a hacer nada en contra la ley. Pero hubo manifestaciones de que querían volver al sistema anterior para que no les cobremos el recupero de costos. Estaría bueno que todas las provincias tengan un sistema así, podríamos dar mejor calidad a nuestros ciudadanos”, explica.

Advirtió, además, que la mencionada ley autoriza al “recupero de costos” de las atenciones a pacientes extranjeros, siempre y cuando no se trate de una emergencia o haya una vida en riesgo: “En ese caso sí atendemos y después vemos qué pasa. No se deja de atender por un hecho de gravedad que pone en riesgo su vida”, detalló.

Con el ajuste de los aranceles, estos son los nuevos costos vigentes:

• Una cama en habitación con baño por día: $93.481
• Internación entre dos y cuatro horas: $39.330
• Bloqueo de habitación para el acompañante por día: $107.712
• Consulta en guardia: $8.362
• Atención médica por día: $8.362
• Uso de material descartable por día: $8.196

• Apendicectomia: $647.209
• Colicistectomia: $658.681
• Legrado: $252.191
• LT: $368.805
• Anestesia: $119.380
• Parto: $328.421
• Cesárea + LT: $594.814
• Cesárea: $505.995
• Control obstétrico del trabajo de parto: $6.109
• Atención del RN en la habitación por día: $24.045

• Ginecológica: $10.332
• Mamaria: $11.824
• De testículo: $9.924
• Hepática: $12.100
• Vejiga o próstata: $8.566
• Renal: $10.740

• Cráneo, cara, senos paranasales: $7.750
• Rx de raquis: $8.610
• Rx de hombro, húmero, pelvis, cadera, fémur: $9.110
• Rx codo, antebrazo, muñeca, mano, rodilla, tobillo, pie: $5.302
• Rx de tórax: $7.886
• Rx de abdomen: $7.478

• Hemograma, urea, creatinina, glucemia, ionogr.: $25.500
• Serologías hasta tres: (Ej: toxo, VIH, VDRL): $35.468