Madre Teresa de Calcuta: cuáles fueron sus milagros, cuál es su historia y cómo es la frase que se le reza

La Madre Teresa de Calcuta, una de las figuras más veneradas del siglo XX, dedicó su vida al servicio de los más pobres y enfermos. Nacida en 1910 en lo que hoy es Macedonia, ingresó a la vida religiosa a una temprana edad, y pasó décadas trabajando en la India, donde fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad. Su incansable labor en las calles de Calcuta le valió un Premio Nobel de la Paz en 1979, y su legado continúa siendo una fuente de inspiración para millones de personas en todo el mundo.

A lo largo de su vida, la Madre Teresa fue testigo de numerosos eventos que sus seguidores consideran milagrosos. Su canonización en 2016 por el Papa Francisco incluye relatos de curaciones inexplicables atribuidas a su intercesión. Además de su obra tangible, la Madre Teresa dejó una huella espiritual profunda, encapsulada en oraciones y frases que los fieles recitan en busca de consuelo y fortaleza.

La Madre Teresa de Calcuta, nacida como Anjezë Gonxhe Bojaxhiu en 1910 en Skopie, en la actual Macedonia del Norte, sintió una vocación religiosa desde joven. A los 18 años, dejó su hogar para unirse a las Hermanas de Loreto en Irlanda, donde tomó el nombre de Teresa en honor a Santa Teresa de Lisieux. En 1929, fue enviada a la India, donde dio clases en una escuela para niñas en Calcuta. Sin embargo, en 1946, durante un viaje en tren, experimentó lo que ella describió como un “llamado dentro del llamado”, decidiendo dedicarse a ayudar a los más pobres entre los pobres.

En 1950, fundó las Misioneras de la Caridad, una congregación que comenzó con solo 12 miembros pero que creció exponencialmente, extendiendo su labor a más de 133 países. Madre Teresa y sus ayudantes ofrecieron atención médica, alimentación y consuelo a millones de personas marginadas. En 1979, su dedicación y servicio le valieron el Premio Nobel de la Paz. Después de su muerte en 1997, su legado continuó; fue beatificada en 2003 y canonizada en 2016, reafirmando su lugar en la historia como un símbolo de compasión y sacrificio.

El primer milagro atribuido a la intercesión de Madre Teresa se relaciona con Monica Besra, una mujer india que sufría de un tumor abdominal. En 1998, Besra visitó una clínica de las Misioneras de la Caridad en Bengala Occidental, donde las monjas le colocaron una medalla bendecida por Madre Teresa en el abdomen. Besra afirmó que el tumor desapareció milagrosamente, lo cual fue confirmado por los médicos que la atendieron. Este evento fue considerado un milagro y llevó a su beatificación en 2003.

El segundo milagro ocurrió en 2008 en Brasil. Marcilio Haddad Andrino, un ingeniero de 35 años, sufría de múltiples abscesos cerebrales y estaba en estado crítico. Su esposa rezó a Madre Teresa pidiendo su intercesión. Según los informes, Andrino se despertó sin dolor y recuperó su salud completamente, algo que los médicos no pudieron explicar. Este milagro fue uno de los factores decisivos para la canonización de Madre Teresa en 2016 por el Papa Francisco.

“Oh, Santa Teresa de Calcuta, tú permitiste al sediento amor de Jesús en la cruz convertirse en una llama viva dentro de ti, y así llegaste a ser luz de Su amor para todos. Obtén del corazón de Jesús (mencionar la petición). Enséñame a dejar que Jesús penetre y posea todo mi ser tan completamente, que mi vida también pueda irradiar su luz y amor a los demás. Amén.”

Esta oración busca la intercesión de Santa Teresa de Calcuta, pidiendo su ayuda y guía para seguir el ejemplo de su vida dedicada al amor y servicio hacia los demás.