Pasan las semanas pero en la provincia de Córdoba aún resuenan las consecuencias por la muerte de los bebés en el Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo. Y si bien la causa ya tiene una enfermera detenida, la Justicia sigue avanzando sobre todos los responsables. Así es como el caso alcanzó incluso al exministro de Salud de Córdoba Diego Cardozo, quien fue imputado por omisión de deberes de funcionario público.
La decisión fue tomada por el fiscal de Instrucción Raúl Garzón quien consideró que Cardozo, que dejó su cargo el mes pasado por los cuestionamientos recibidos al presuntamente no alertar a tiempo la situación, habría tenido conocimiento meses antes de que se hiciera público.
El pasado 25 de agosto fue la fecha en la que Cardozo había dejado el cargo. Ese día presentó su renuncia y, a su vez, también fueron apartados de sus cargos otros funcionarios de Salud que estarían al tanto de la información. Ellos son: el secretario de Salud, Pablo Carvajal; el director de Hospitales Capital, Esteban Ruffin; y la directora de Maternidad e Infancia, Marcela Yánover.
En la misma línea también fue imputado el ex vicedirector de Gestión Hospitalaria del Neonatal, el abogado Alejandro Escudero Salama, por la misma figura, que alude a la omisión de haber denunciado los graves hechos que se dieron en el hospital.
Más temprano, la Justicia había resuelto ampliar las acusaciones por el delito de ‘falsedad ideológica’ a una enfermera y dos ex directivas del Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo.
La enfermera, la principal acusada de las muertes
Si bien la causa aún tiene secreto de sumario, una fuente judicial indicó el fiscal decidió ampliar la acusación por “falsedad ideológica” a la enfermera Brenda Agüero, de 27 años, detenida desde el 19 de agosto e imputada por “homicidio agravado reiterado por procedimiento insidioso”, al que ahora también sumará en grado de “tentativa”.
Por orden del fiscal que tiene a su cargo el expediente, Raúl Garzón, fue alojada el fin de semana pasado en el penal de Bouwer y desde entonces espera en un celda del ala femenina cómo avanza la investigación, aunque aparentemente en medio de una crisis de nervios que por estas horas afecta su salud.
Así lo reveló en diálogo con Infobae Luis Obregón, su abogado defensor, quien contó que por la acusación de homicidio calificado reiterado que pesa en su contra y ante el hecho de estar tras las rejas, la enfermera tuvo que ser medicada y está completamente sedada. “Está así porque no puede dormir, no puede ni alimentarse. Llora todo el día porque no entiende por qué está en esta situación”, dijo el letrado. En ese sentido, Obregón dijo que visitó a la joven en los últimos días pero con ciertos cuidados debido a su situación emocional, que obligó a los médicos del penal a tener que medicarla para evitar un desgaste y daños sobre la salud.
La nueva acusación también alcanza a la exdirectora del Hospital Materno Neonatal “Ramón Carrillo”, Liliana Asís, y a la ex jefa del área de Neonatalogía, Marta Gómez Flores, quienes se encuentran imputadas por los delitos de “omisión de los deberes de funcionario público”.
Por otra parte, la abogada Daniela Morales Leanza, representante legal de una de las mamás de una beba sobreviviente, nacida el 6 de junio de este año, sostuvo: “Nosotros somos parte querellante y solicitamos la ampliación de la tentativa de homicidio para la enfermera”. En ese contexto, dijo que entre las pruebas documentales presentadas se encuentran análisis que “confirman la inoculación intencional de potasio” que, según dijo, le dejó secuelas a la beba.
Según explica la letrada, la recién nacida, desde entonces, está siendo sometida a un “tratamiento de fisioterapia y dermatológico por pinchazos en la espalda que luego se transformaron en hematomas y después en necrosis” de la piel.
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