LUNES, 6 de enero de 2025 (HealthDay News) -- La riqueza podría relacionarse con la salud del cerebro, señala un estudio reciente.
Las personas criadas en comunidades o naciones más pobres parecen tener cerebros más propensos a encogerse con la edad, así como una conectividad interrumpida entre las regiones del cerebro relacionadas con la memoria y el pensamiento, según los resultados publicados recientemente en la revista Nature Aging.
Esto los pone en un mayor riesgo de trastornos cerebrales degenerativos como la enfermedad de Alzheimer, apuntaron los investigadores.
"Esta investigación resalta el rol crítico de la desigualdad estructural en la formación de la salud del cerebro", señaló en un comunicado de prensa de la escuela el investigador sénior, Agustín Ibáñez, profesor de salud cerebral global del Trinity College de Dublín, Irlanda.
"Teniendo en cuenta que las tasas de demencia aumentan sobre todo en los países de ingresos bajos y medios, nuestros hallazgos enfatizan la necesidad de intervenciones dirigidas para abordar las causas fundamentales de las disparidades en la salud del cerebro, que parecen ser específicas de cada región", añadió Ibáñez.
En el estudio, los investigadores analizaron escáneres cerebrales de más de 2,100 personas que vivían en Estados Unidos o en los países latinoamericanos de Argentina, Chile, Colombia, Perú y México.
Los resultados mostraron que cuanto mayor era la desigualdad entre ricos y pobres en una nación, más probabilidades había de que las personas sufrieran una reducción del volumen cerebral y la conectividad.
Estas asociaciones fueron independientes de otros factores como la edad, el sexo, el nivel educativo o la capacidad cognitiva.
"Vivir en un contexto de desigualdad agregada afecta a la salud del cerebro, independientemente del nivel socioeconómico específico, lo que demuestra las consecuencias de largo alcance de las disparidades sociales en el cerebro", señalaron los investigadores en un comunicado de prensa.
Además, el patrón fue más pronunciado y generalizado en América Latina que en Estados Unidos.
"En conjunto, estos hallazgos indican que el aumento de la desigualdad estructural en América Latina está relacionado con una salud cerebral adversa en el envejecimiento y la demencia, con asociaciones más grandes en la enfermedad de Alzheimer", concluyeron los investigadores en su artículo.
Los estudios futuros deben enfocarse en por qué la desigualdad podría hacer que el cerebro de una persona tenga un mayor riesgo de demencia y Alzheimer, concluyeron los investigadores.
"Estos hallazgos allanan el camino para futuros estudios que exploren los mecanismos biológicos que vinculan la desigualdad agregada con el envejecimiento y la neurodegeneración", dijo en un comunicado de prensa la investigadora principal, Agustina Legaz , del Instituto Latinoamericano de Salud Cerebral, en Chile.
Más información
El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento ofrece más información sobre la enfermedad de Alzheimer.
FUENTE: Trinity College Dublin, comunicado de prensa, 27 de diciembre de 2024