VIERNES, 20 de diciembre de 2024 (HealthDay News) -- El sexismo es increíblemente tóxico para la vida de las mujeres, lo que resulta en un salario más bajo, menos oportunidades profesionales, una peor atención de la salud y un mayor riesgo de violencia.
También puede ser tóxico para la salud de su cerebro, según un estudio reciente.
Las mujeres estadounidenses nacidas en los estados más sexistas experimentan un deterioro de la memoria más rápido en los últimos años que las mujeres nacidas en estados con más igualdad de derechos, informaron los investigadores en la revista Alzheimer's & Dementia.
De hecho, las mujeres nacidas en el estado con el sexismo estructural más alto (Mississippi alrededor de 1910) experimentaron un declive de la memoria similar al de las mujeres 9 años mayores, encontraron los investigadores.
"Nuestros hallazgos sugieren que abordar las desigualdades sociales podría ser una forma poderosa de reducir la carga de Alzheimer entre las mujeres", señaló en un comunicado de prensa de la Universidad de Columbia la investigadora principal, Justina Avila-Rieger, científica investigadora asociada de la universidad.
"El Alzheimer es un enorme problema social, sobre todo entre las mujeres, que conforman dos tercios de los estadounidenses con la enfermedad", continuó Ávila-Rieger. "Es imperativo que obtengamos una mejor comprensión de lo que está causando esta discrepancia y qué se puede hacer al respecto".
En el estudio, los investigadores analizaron datos de casi 21,000 mujeres que participaron en estudios de salud a largo plazo. Los estudios de salud incluyeron mediciones regulares de la función cerebral de las mujeres.
El equipo también compiló indicadores de racismo estructural para cada estado de los Estados Unidos, basados en la participación de hombres frente a mujeres en la fuerza laboral, los ingresos promedio, los niveles de pobreza, el compromiso político y el conservadurismo religioso.
Los resultados muestran que cuanto más sexista es el lugar en el que nace una mujer, más probabilidades tiene de sufrir un deterioro de la memoria relacionado con la edad antes.
Este impacto negativo en la memoria fue más fuerte entre las mujeres negras, apuntaron los investigadores.
"Es probable que, para las mujeres racializadas como negras, el impacto interseccional del sexismo y el racismo cree una forma única de opresión que tiene mayor relevancia para la salud cognitiva que el sexismo o el racismo solos", señaló en un comunicado de prensa la investigadora sénior, Jennifer Manly, profesora de neuropsicología de la Universidad de Columbia.
Pero no está claro exactamente cómo el sexismo estructural contribuye a este declive de la memoria, anotaron los investigadores.
"Lo que sí sabemos es que las desigualdades estructurales dan forma a los resultados de salud individuales al crear barreras a las oportunidades y los recursos que mejoran la salud", dijo Ávila-Rieger.
"Eventualmente, estas exposiciones producen disparidades en las condiciones crónicas de salud física que influyen directamente en la salud del cerebro, el inicio del deterioro cognitivo y, en última instancia, la demencia", continuó Ávila-Rieger.
En estudios futuros, los investigadores se centrarán en los efectos del sexismo estructural en las mujeres en diferentes etapas de sus vidas.
"Es posible que la exposición temprana a la vida sea un periodo crítico para la desigualdad estructural, con consecuencias directas o indirectas que se acumulan con el tiempo", dijo Ávila-Rieger. "También tenemos que desentrañar qué aspectos del sexismo estructural tienen el mayor impacto en la salud cognitiva. Esto es importante en términos de hacer recomendaciones a los responsables de la formulación de políticas".
Más información
La Facultad de Medicina de Harvard ofrece más información sobre las mujeres y la enfermedad de Alzheimer.
FUENTE: Universidad de Columbia, comunicado de prensa, 18 de diciembre de 2024