En el marco de la Semana Mundial del Virus Sincicial Respiratorio (VSR), celebrada del 2 al 8 de septiembre, se busca concienciar sobre los peligros de este virus que, aunque ampliamente conocido por su impacto en lactantes y niños pequeños, también representa una grave amenaza para la salud de los adultos mayores, especialmente aquellos con enfermedades crónicas.
El VSR es el principal agente causante de infecciones respiratorias agudas en lactantes y niños pequeños. Aunque en la mayoría de los casos provoca síntomas leves similares a los de un resfriado común, se estima que entre el 20 y el 30% de los infectados desarrollan complicaciones graves, como bronquiolitis o neumonía, especialmente durante la primera infección. Este virus es responsable de un tercio de las muertes en niñas y niños durante su primer año de vida, lo que resalta su peligrosidad.
En Argentina, se calcula que cada año el VSR provoca aproximadamente 14.600 hospitalizaciones y 3.500 muertes en personas mayores de 20 años, afectando de manera desproporcionada a quienes superan los 50 años.
¿Cuáles son los síntomas del virus sincicial respiratorio?
El neumonólogo Diego Litewka (MN 74394), jefe de Neumonología del Hospital Fernández, explicó que “los síntomas de la infección por VSR son similares a los de cualquier otra enfermedad respiratoria y pueden variar desde el cuadro de un resfriado hasta neumonías potencialmente graves. Por eso, es difícil obtener un diagnóstico”.
Esta dificultad diagnóstica se ve agravada por la falta de pruebas de diagnóstico de rutina, lo que contribuye a un bajo nivel de conciencia y, en muchos casos, la subestimación de la carga viral de la enfermedad.
El doctor Litewka agregó que en las tomografías, las neumonías causadas por VSR pueden mostrar un patrón de consolidación en hasta el 60% de los casos, lo que las hace indistinguibles de las neumonías bacterianas en estudios radiológicos.
¿Cómo se transmite el virus sincicial respiratorio?
La transmisión del VSR se produce a través de las secreciones respiratorias, como las gotitas que se diseminan al toser o estornudar, y por contacto directo. Cada año, durante los meses de otoño e invierno, el aumento de la circulación del VSR genera un incremento en las consultas pediátricas ambulatorias y en las internaciones hospitalarias, particularmente en niños menores de un año.
Sin embargo, habitualmente se pasa por alto es que este virus también afecta gravemente a los adultos mayores, especialmente a aquellos que ya padecen de enfermedades crónicas como EPOC, diabetes o insuficiencia cardíaca.
En aquellos que tienen más de 65 años o poseen un estado de salud delicado, una infección por VSR puede causar neumonía y requerir hospitalización. La internación puede durar en promedio de tres a seis días y hasta el 31 por ciento de los pacientes puede requerir cuidados intensivos.
En cuanto a las enfermedades preexistentes, por ejemplo, el asma aumenta el riesgo de hospitalización por VSR hasta 2,5 veces, la EPOC hasta 13,4 veces, y la insuficiencia cardíaca hasta 7,6 veces.
Estos riesgos son comparables, e incluso superiores, a los asociados con el virus de la gripe. En Argentina, se estiman alrededor de 14.600 hospitalizaciones y 3.500 muertes anuales relacionadas con el VSR en adultos mayores de 20 años, con un impacto particularmente severo en aquellos mayores de 50 años.
¿Cómo se previene la infección por virus sincicial respiratorio?
Ante este panorama, la prevención es clave. Es esencial que tanto los adultos mayores como sus cuidadores sean proactivos en la prevención de enfermedades respiratorias. Mantener al día las vacunas es vital para reducir el riesgo de infección por VSR, especialmente en poblaciones vulnerables, como los mayores de 60 años.
Además, adoptar hábitos de vida saludables, como evitar el contacto cercano con personas enfermas y consultar a un médico ante los primeros signos de infección respiratoria, puede prevenir no solo el VSR, sino también otras enfermedades respiratorias virales que pueden derivar en complicaciones graves.
Para los lactantes menores de 6 meses, el grupo más vulnerable, la vacunación materna se presenta como una medida preventiva eficaz. La vacunación durante el embarazo, administrada entre las semanas 32 y 36 de gestación, permite que los anticuerpos se transfieran al bebé a través de la placenta, ofreciendo una protección crucial contra la bronquiolitis y otras formas graves de infección respiratoria causadas por el VSR.
En Argentina, desde marzo de este año, la vacuna contra el Virus Sincicial Respiratorio (VSR) destinada a personas gestantes (que debe aplicarse entre las semanas 32 y 36 de embarazo), se sumó al Calendario Nacional de Vacunación.
El doctor Litewka afirmó que “el riesgo asociado a la infección por VSR no es reconocido a nivel general, en parte por la similitud de su presentación con otras enfermedades respiratorias y por la complejidad de los estudios necesarios para su confirmación. Las vacunas disponibles para el VSR han demostrado efectividad y seguridad”.
El VSR, que a veces se manifiesta como un simple resfriado, tiene el potencial de provocar consecuencias graves, especialmente en aquellos con comorbilidades. Por ello, en el contexto de la Semana Mundial del VSR, es crucial recordar la importancia de consultar al médico para conocer las formas de prevención y buscar atención temprana ante cualquier síntoma, a fin de evitar complicaciones respiratorias severas.