La hepatitis C es una infección viral que afecta al hígado. Puede manifestarse de forma aguda a corto plazo y crónica (a largo plazo). Puede ser mortal si no se accede al tratamiento oportuno. Hoy existen medicamentos que permiten curar a más del 90% de los afectados.
En la Argentina, los casos reportados de personas con hepatitis C aumentaron después del descenso que hubo durante 2020, cuando la pandemia por el coronavirus generó interferencias en la atención sanitaria, según nuevos datos del Ministerio de Salud de la Nación que evaluó el período 2013-2023.
“Entre 2021 y 2023 se reporta el mayor número de casos confirmados y tasas de toda la serie. A lo largo del período se registró una mediana de 573 casos anuales con un mínimo de 392 (2013) y un máximo de 1.481 casos totales (2023)”, se informó. Es decir, el año paso se registraron 1.481 casos de personas con hepatitis C en el país en el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud.
En diálogo con Infobae, el médico Manuel Barbero, protesorero de la comisión directiva de la Sociedad Argentina de Hepatología, comentó: “El aumento está relacionado con que se informan más los casos diagnosticados. No hubo una suba en la incidencia de casos. Otra razón es que ahora hay más testeos, ya que el sistema de salud sale a buscar a personas que fueron diagnosticadas años pasados, pero que no accedieron aún a los tratamientos que pueden curar la infección hoy”.
También coincidió Federico Villamil, del Hospital Británico de Buenos Aires, que lleva adelante un programa con acuerdo con el PAMI: “Cada vez hay menos nuevos casos de hepatitis C. Es probable que haya más registrados porque durante los últimos años más personas fueron diagnosticadas y accedieron al tratamiento”.
En 2015 se había reportado un aumento, “traccionado por la posibilidad de tratamiento surgida en ese momento”, de acuerdo con la cartera de Salud. En los años siguientes los casos y tasas se mantuvieron por debajo del valor alcanzado en 2015, hasta el 2019 en el cual se registró otra suba.
Qué diferencias hay en el país
Cuando se analizan los datos por regiones, se observó un incremento de las tasas de en los tres últimos años en todo el país, con la excepción del Noreste en 2022 y 2023, que presenta un leve descenso.
En la región Cuyo (conformada por Mendoza, San Juan y San Luis, según la autoridad sanitaria) se registran las tasas más elevadas en la mayoría de los años del período, con un valor máximo de 4,59 casos por cada 100.000 habitantes en 2019.
Con respecto a la región Sur se evidencia un comportamiento similar al de Cuyo, alcanzando sus tasas máximas en el 2018, 2022 y 2023 (3,49 - 3,35 - 3,82 casos por cada 100.000 habitantes, respectivamente).
La región Centro (donde se incluye a ciudad de Buenos Aires y provincia de Buenos Aires) presenta una tendencia similar a la tasa del total del país, con sus valores más elevados entre 2022 y 2023 (2,32 y 3,44 cada 100.000 habitantes, respectivamente).
Las tasas de casos de hepatitis C para el total país oscilan entre un valor mínimo de 0,93 en 2013, y un valor máximo de 3,17 en 2023 cada 100.000 habitantes.
Qué síntomas tiene la hepatitis C
Entre los síntomas se pueden incluir fiebre, cansancio, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, orina oscura y coloración amarillenta de la piel o los ojos (ictericia).
Aunque se puede presentar como una infección aguda y dar síntomas, lo más frecuente es que la hepatitis C se desarrolle de forma asintomática. Evoluciona hacia una enfermedad crónica que con el tiempo puede conducir al desarrollo de otros problemas como cirrosis, cáncer de hígado y múltiples complicaciones fuera del hígado
A nivel mundial, hay iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que propone reducir el 90% de las nuevas infecciones por el virus de la hepatitis C y el 65% la mortalidad por las enfermedades que genera para el año 2030.
Cómo se transmite el virus de la hepatitis C
El virus de la hepatitis C se transmite a través del contacto con sangre infectada, lo que puede suceder al compartir agujas o jeringuillas o al realizar procedimientos médicos poco seguros, tales como transfusiones de productos sanguíneos sin analizar.
¿Cómo se hace el diagnóstico de la hepatitis C?
El diagnóstico de Hepatitis C se realiza mediante análisis de sangre específicos que detectan la presencia del virus. Se recomienda que al menos una vez en la vida todas las personas se realicen el test de la hepatitis C a partir de los 18 años.
Al momento no se dispone de una vacuna para prevenir la infección. Se debe evitar el contacto directo con la sangre de otras personas, no compartir cepillos de dientes ni otros artículos personales como agujas, máquinas de afeitar. Se debe usar preservativo durante las relaciones sexuales.
¿A qué edades se diagnostica la hepatitis C?
De acuerdo al boletín epidemiológico, en la Argentina el grupo de 40 a 59 años es el que presenta mayores tasas y grandes fluctuaciones. En los grupos de edad de mayores de 60 años y de 20 a 40 años, la tasa se mantuvo relativamente estable.
También el 59% de los casos son de sexo masculino. Esa diferencia es aún más marcada desde el año 2016 en adelante.