En el concierto de las enfermedades respiratorias más dominantes del país, es decir las más diagnosticadas y las que más sufre la población, impulsadas por la estacionalidad del otoño-invierno, se destacan la influenza, la bronquiolitis, la neumonía y el COVID-19 (que llegó para quedarse), entre otras. Afortunadamente, en la Argentina existe una oferta potente y diversa de vacunas seguras y eficaces para adquirir protección, destinadas a todos los grupos etarios.
Hay que decir que para cada enfermedad respiratoria, existe un virus que la provoca, formando una especie de match perfecto, perturbador e indivisible. Así emerge en un lugar central.
Nos vamos a adentrar en este virus escurridizo y realmente multitarget porque afecta desde a neonatos, niños, adultos jóvenes y adultos mayores: es el virus sincicial respiratorio (VSR), reconocido por ser el agente causal de infecciones respiratorias agudas en lactantes y niños pequeños. El VSR es la principal causa de infecciones de las vías respiratorias bajas o inferiores, como la bronquiolitis y la neumonía viral. Pero la gran noticia es que hay disponible varias terapéuticas para enfrentarlo a lo largo de la vida.
A nivel global, se estima que el VSR causa 33 millones de casos anuales en niños menores de 5 años, con alrededor de 3,6 millones de hospitalizaciones. El VRS es responsable de 100.000 muertes anuales en el mundo por complicaciones derivadas de la infección, y la mitad de estos fallecimientos ocurren en bebés menores de 6 meses.
Todos estos datos reflejan una realidad conocida por muchos: los niños, y especialmente los menores de un año, con su sistema respiratorio en desarrollo, constituyen el grupo más vulnerable a las infecciones por VSR, que se evidencian especialmente en la bronquiolitis. Pero los chicos no son los únicos en riesgo, se estima que más de 300 mil adultos mayores de 60 años son hospitalizados cada año por infecciones causadas por este virus en todo el mundo.
El poder de las vacunas para prevenir las formas graves de enfermedades respiratorias quedó más que demostrado después del cimbronazo que dejó la pandemia de COVID-19, causada por el virus hasta ese entonces desconocido, el SARS-CoV-2. La inmunización es una herramienta terapéutica muy potente y segura que salva millones de vidas cada año. La buena noticia es que Argentina cuenta hoy con distintas fórmulas de inmunización para combatir el VSR, destinadas a los grupos de la población más vulnerables al ataque del virus.
El VSR posee una oferta vacunal crucial y multitarget. Pero, ¿por qué la oferta disponible en Argentina es la mejor de la región?
Un virus que ataca en todas las etapas de la vida
Todos los inviernos, o incluso antes, si el frío se anticipa como ocurrió el último mes, que fue el mayo 2024 más gélido desde que se tienen registros, las salas de las guardias de los hospitales y clínicas se llenan con pacientes a la espera de ser entendidos por síntomas causados por virus respiratorios: fiebre, tos y dificultad para respirar, entre otros.
En Argentina, se estima que cada año se producen unas 14.600 hospitalizaciones y 3.500 muertes en adultos a causa del VSR. Para los adultos mayores y las personas con enfermedades crónicas preexistentes, el VSR puede generar secuelas grave. Sin embargo, suele estar subdiagnosticado en esta franja etaria.
La transmisión del virus ocurre a través de las secreciones respiratorias (gotitas) que se dispersan cuando las personas infectadas tosen o estornudan, así como por contacto directo. Cada año, durante los meses de otoño e invierno, se observa un aumento en la circulación del VSR, lo que genera un incremento en las consultas pediátricas ambulatorias y en las internaciones, especialmente en niños y niñas menores de 1 año. Pero también en los adultos mayores.
El jefe de la sección de Infectología del CEMIC y miembro de la Fundación Vacunar, Pablo Bonvehí (MN 62.648), subrayó a Infobae la importancia de la prevención mediante medidas como “usar y desechar pañuelos descartables, lavarse las manos frecuentemente y ventilar bien los ambientes”.
En diálogo con Infobae, el neumonólogo Diego Litewka (MN 74.394), jefe de Neumonología del Hospital Juan A. Fernández, enfatizó que “las personas infectadas suelen diseminar el virus entre tres y ocho días tras el inicio de los síntomas, y al ser una enfermedad subdiagnosticada, no hay datos epidemiológicos precisos, especialmente en adultos”.
Como la mayoría de los virus respiratorios, el VSR puede causar daño en todas las etapas de la vida. Por eso es tan importante contar con vacunas para prevenir los cuadros severos. Infobae detalló la incorporación al Calendario Nacional de Vacunación (CNV) de la vacuna contra VSR del laboratorio Pfizer para las mujeres gestantes, que se aplica de forma gratuita y obligatoria entre las semanas 32 y 36 de embarazo y que genera, a través de los anticuerpos producidos por la madre, una protección de unos 6 meses en los recién nacidos.
Como anticipó este medio, la vacuna para gestantes desarrollada por el laboratorio Pfizer, fue aprobada por la ANMAT en septiembre de 2023 y fue incluida en el CNV por el Ministerio de Salud en diciembre. En marzo de este año, se inició la campaña de vacunación para proteger a las embarazadas y sus bebés por nacer de cara al otoño -invierno.
La novedad es que ahora otro grupo vulnerable cuenta en Argentina con vacunas para protegerse del virus. Las big pharma GSK y Pfizer ofrecen en el país dos poderosas herramientas terapéuticas para contraatacar el flagelo que causa este virus en los adultos mayores.
En diálogo con Infobae, el doctor Roberto Debbag, infectólogo y presidente de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica, detalló que “en el ámbito global, existen varias vacunas aprobadas para el Virus Sincicial Respiratorio (VSR). Entre ellas, se destacan las de Pfizer y GSK. La vacuna de Pfizer ha sido aprobada para su uso en mujeres embarazadas y en personas mayores de 60 años, mientras que la de GSK está autorizada únicamente para personas mayores de 60 años”.
Además, a fines de mayo 2024, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos autorizó la vacuna contra el VSR del laboratorio Moderna para adultos mayores de 60 o más. Si bien no está autorizada en Argentina, como siempre, las aprobaciones del ente regulador norteamericano marcan un precedente para los otros organismos del resto del mundo. Moderna, además, actualmente cuenta con tres vacunas en Fase III de investigación, destinadas a proteger a la población contra la tripledemia: COVID-19, VSR e influenza.
Respecto a otros virus respiratorios, esta semana Moderna informó datos de otro ensayo, el correspondiente a la vacuna combinada para COVID e influenza, denominada ARNm-1083, que según pudo saber Infobae, se espera esté disponible en 2025.
Otros dos grandes gigantes pharma, como AstraZeneca y Sanofi desarrollaron el medicamento (anticuerpo monoclonal) nirsevimab para combatir el VRS en niños menores de 2 años. Vale aclarar que no es una vacuna, sino una inmunización con un anticuerpo monoclonal, que, como informó Infobae, fue aprobado por ANMAT en noviembre del 2023. Aunque se administra de forma inyectable, se aplica directamente a bebés nacidos durante la temporada o que entran en su primera temporada de circulación del VSR, proporcionando así una protección rápida.
Como detalló Infobae, esta terapia innovadora consiste en la inmunización mediante un anticuerpo monoclonal de larga duración que se usa bajo prescripción médica de una sola dosis mediante una inyección intramuscular, que arrojó evidencia, en los distintos ensayos clínicos, de reducir un 83% las hospitalizaciones.
Esa eficacia fue superada cuando nirsevimab se aplicó en el mundo real: los primeros datos publicados en marzo de este año, en un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU, mostraron que el uso del medicamento nirsevimab en el mundo real redujo 90% las hospitalizaciones pediátricas por el virus sincicial respiratorio en territorio estadounidense.
Vacunas disponibles para los mayores de 60
La más recientes herramientas terapéuticas disponibles en Argentina están destinadas para proteger a los mayores de 60 años. Dos grandes laboratorios lanzaron vacunas para este grupo etario en los últimos meses. El inoculante elaborado por GSK mostró una eficacia del 82,6% para prevenir infecciones respiratorias bajas causadas por los dos tipos de VSR circulantes (VSR A y VSR B) en esta población y del 94,6% en adultos con enfermedades crónicas.
En Argentina el inoculante de GSK está aprobado para mayores de 60 años, pero vale destacar que esta semana la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) autorizó la aplicación de la vacuna contra el VSR desarrollada por GSK para su administración a adultos en riesgo de entre 50 y 59 años
En tanto, la vacuna contra el VSR de Pfizer que integra el Calendario Nacional de Inmunización de Argentina, es gratuita para gestantes entre las semanas 32 y 36 de embarazo. Y, además, se encuentra disponible en vacunatorios para su aplicación en adultos a partir de los 60 años, según indicación médica.
El médico pediatra Gonzalo Pérez Marc, investigador principal del ensayo clínico de la vacuna VSR de Pfizer en Argentina, resaltó a Infobae: “Dentro de los primeros 90 días de vida, la eficacia de esta vacuna aplicada a personas embarazadas para proteger a los bebés de la enfermedad severa por Virus Sincicial Respiratorio es de más del 82%. Y hasta los seis meses de edad, se sigue sosteniendo en un 70%, lo cual representa niveles de alta protección. En los adultos mayores, el estudio arrojó un 85,7% de eficacia de la vacuna en mayores de 60 años con al menos tres signos o síntomas”.
“En Argentina, se ha avanzado en la incorporación de la vacunación contra el VSR en embarazadas. Según las estimaciones del Ministerio de Salud, desde el inicio del programa de vacunación se ha alcanzado una cobertura del 40% al 50% del objetivo mensual de vacunación. Esta cifra es indicativa de un progreso significativo, aunque aún no se disponen de datos oficiales que comparen la efectividad de la vacunación contra el VSR entre mujeres vacunadas y no vacunadas”, agregó el infectólogo Debbag.
Según pudo saber Infobae, la farmacéutica MSD se encuentra en las etapas iniciales del desarrollo de su vacuna para VSR, aunque aún no ha obtenido aprobación para su uso.
Pico de infecciones y grupos vulnerables
Según el último Boletín Epidemiológico Nacional del Ministerio de Salud de la Nación, “los estudios reportados por la red de virus respiratorios muestran un aumento en las últimas semanas tanto de Influenza como de virus sincicial respiratorio (VSR)”.
El reporte nacional detalló que, en lo que va 2024, “se registraron 322.429 casos de Enfermedad Tipo Influenza (ETI), 41.737 casos de Neumonía y 33.010 casos de Bronquiolitis en menores de dos años”.
Ante el actual pico de infecciones por virus respiratorios que hace crecer la demanda de atención en el sistema público y privado de salud, vale destacar que, aunque muchos lo desconozcan, además de los menores de 5 años, otro sector de la población especialmente vulnerable al VSR son los adultos mayores.
Como las vacunas suelen ser víctimas de su propio éxito y su eficacia para reducir la prevalencia, los cuadros graves y las internaciones hospitalarias, muchas veces nos olvidamos de su capacidad de protección: robustecen el sistema inmune ante la presencia de un patógeno externo. Estar vacunado marca una distinción vital: la inmunización previene la hospitalización y disminuye la severidad con la que la infección ataca al organismo.
Los especialistas aclaran que la mayoría de las infecciones por VSR son leves y se manifiestan como un resfrío, sin embargo, se estima que entre el 20 y el 30% de los pacientes pueden desarrollar complicaciones como bronquiolitis o neumonía, que en algunos casos puede evolucionar en cuadros potencialmente graves.
Los bebés, las personas con comorbilidades cardíacas o respiratorias, y los mayores de 60 años tienen más probabilidades de presentar una infección grave por el VRS y ser hospitalizados. Además, el VSR es responsable de un tercio de las muertes en niñas y niños durante el primer año de vida.
Las cifras del VSR en adultos mayores
Este virus, similar a otras infecciones respiratorias, puede derivar en neumonía y exacerbar condiciones crónicas como el asma, EPOC, e insuficiencia cardíaca. Las razones por las cuales el VSR suele ser subdiagnosticado, y no es informado en su totalidad, son varias según los expertos: bajo conocimiento de la enfermedad, la similitud clínica con otros virus, como la gripe o el COVID-19, y la falta de un tratamiento específico.
Esta falta de diagnóstico se refleja en los números, ya que la infección por el VSR en adultos mayores de 65 años representa:
- 11% de las hospitalizaciones por EPOC
- 11% de las hospitalizaciones por neumonía
- 7% de las hospitalizaciones por asma
- 5% de las hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca congestiva
Las vacunas previenen los casos graves
Durante la temporada invernal, la complejidad del diagnóstico aumenta debido a que sus síntomas son clínicamente indistinguibles de otras infecciones respiratorias como la influenza y el COVID-19. Litewka indicó que “es muy difícil diferenciarlo porque pueden tener características similares, como fiebre, tos e inclusive congestión nasal”. Bonvehí añadió que la manifestación de este virus puede incluir síntomas como disminución del apetito, estornudos y sibilancias.
Los especialistas advierten que, desde 2021, la temporada invernal se caracteriza como “tripledemia” por el aumento de casos de influenza, COVID-19 y VSR. Estas infecciones respiratorias pueden dejar secuelas permanentes y ser mortales para los adultos mayores o aquellos con enfermedades crónicas
El doctor Litewka advirtió que “la inmunidad que genera la infección es débil, por lo que las personas que ya padecieron la enfermedad están expuestas a volver a infectarse. La vacunación, en cambio, da una protección mucho mayor”.
Ante los primeros indicios de infección, se recomienda quedarse en casa y buscar atención médica inmediata, teniendo en cuenta las comorbilidades que puede tener la persona y que podrían agravar el cuadro clínico de forma crítica.
Mujeres gestantes y neonatos, cómo protegerse
La vacuna para las mujeres gestantes contra el Virus Sincicial Respiratorio (VSR), incorporada al Calendario Nacional de Vacunación (CNV) se aplica desde marzo en forma gratuita y obligatoria en todos los vacunatorios del país.
Al estar incluida en el CNV, no se requiere prescripción médica para su aplicación. El esquema de vacunación se centra en los meses de marzo a julio, coincidiendo con la temporada alta de bronquiolitis.
La vacuna VSR elaborada por Pfizer debe administrarse entre las semanas 32 y 36 de gestación. Al inmunizar a las embarazadas, se facilita la transmisión de anticuerpos durante el embarazo, lo que brinda una valiosa protección a los bebés recién nacidos.
Se trata de una vacuna bivalente de prefusión F estabilizada contra el VSR (RSVpreF) y fue la primera aprobada en el país para prevenir infecciones respiratorias causadas por el Virus Sincicial Respiratorio, que pueden derivar en neumonía y bronquiolitis.
Como señaló Infobae, la vacuna contra el VSR se puede administrar junto con otras inmunizaciones recomendadas durante el embarazo, como la antigripal, la COVID-19 y la triple bacteriana acelular. En las mayoría de las provincias y en la Ciudad de Buenos Aires, está disponible en hospitales y centros de salud.
La formulación es de subunidades proteicas recombinantes. El doctor Pérez Marc, quien participó en el ensayo clínico de la vacuna VSR de Pfizer en Argentina, expresó a Infobae que el estudio mostró resultados favorables. “Disponer de una herramienta para proteger a los más pequeños desde su nacimiento y tenerla incluida en el Calendario Nacional de Inmunización, representa una excelente herramienta contra un virus sumamente agresivo”, señaló.
En el estudio clínico MATISSE, publicado por la revista médica internacional The New England Journal of Medicine, participaron más de 7.000 personas gestantes, incluyendo un significativo aporte de Argentina. Los resultados indicaron una eficacia del 81,8% en la prevención de infecciones respiratorias agudas bajas graves en los primeros 90 días de vida de los lactantes, y del 69,4% a los seis meses.
El doctor Enrique Casanueva, del Hospital Universitario Austral, consideró que esta vacuna para gestantes es fundamental para reducir el impacto del VSR en la comunidad y en la salud pública, sobre todo en la época invernal: “Porque además del compromiso en la salud del infante, los brotes de bronquiolitis suelen saturar la disponibilidad de camas en los centros de salud, se deben anular cirugías o suspender consultas programadas y las familias tienen ausentismo laboral (aún aquellos cuyos niños no están internados) con su correspondiente costo, entre otras complicaciones”.