Frente a los casos detectados de Encefalomielitis Equina en Argentina, advierten la necesidad de vacunar caballos lo antes posible para controlar la infección viral que ya afectó a un hombre en Santa Fe.
El llamado de atención lo hizo el decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Marcelo Pecoraro, quien analizó la situación en medio del Alerta Epidemiológico que emitió en noviembre el Ministerio de Salud de la Nación.
Los virus de la Encefalomielitis Equina circulan en la naturaleza en ciclos de transmisión entre pájaros, pequeños roedores y mosquitos de un modo difícil de detectar, pero en ocasiones, dadas ciertas circunstancias, afectan a caballos generando brotes de enfermedad en esta especie y, eventualmente, en los seres humanos, recordó la Facultad.
Pecoraro, explicó que en el país “se conjugaron diversas circunstancias a nivel de la ecología viral que han hecho que muchas localidades tengan brotes de Encefalitis”. “Con el advenimiento de los brotes, el Senasa ha reconstruido la resolución y desde ahora hay que vacunar. También hay restricción de tránsito, para evitar que los animales estén en los lugares donde la zona es caliente”, señaló.
“Es importante aplicar la vacuna lo más rápido posible, para por un lado hacer una contención en los lugares de foco, y por otro lado, empezar a proteger otros espacios hípicos que hoy están en peligro”, planteó el referente de la institución educativa.
Para Pecoraro, uno de los principales factores que habilitó hoy el brote de Encefalitis Equina tiene que ver con una decisión tomada en 2016 por el Senasa que modificó la estrategia de vacunación obligatoria anual contra la encefalitis equina del este y del oeste previa a los movimientos de caballos”. Y si bien los caballos no diseminan la enfermedad, si son susceptibles de enfermarse y la falta de protección vacunal los dejó en estado de alta vulnerabilidad.
“Desde entonces hasta el día de la fecha no se ha vacunado o se ha vacunado en nichos muy pequeños. No habiendo una prevención desde el 2016, todos los caballos, sobre todo los rurales, que nacieron a partir de ese año están desprotegidos”, consideró.
“Argentina lo tenía controlado, se vacunaba una vez al año, hasta que entre 2017 y 2019, por alguna razón se dejó de vacunar al no ser obligatoria a partir de esa fecha”, coincidió Sergio Paz, de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (FCA-UNLZ). “Es necesario vacunar a todos los animales y denunciar los casos”, aseguró el investigador y docente de la cátedra de equinotecnia de la casa de altos estudios lomense.
El pasado 28 de noviembre el Ministerio de Salud emitió el Alerta Epidemiológica por Encefalomielitis Equina, tras el reporte de brotes en equinos. Desde entonces se puso en marcha la vigilancia epidemiológica en humanos, mediante la cual se detectó días atrás la enfermedad en un residente del departamento de General Obligado, Santa Fe, luego de 25 años sin notificaciones. Hasta la semana pasada se han detectado 920 brotes en animales de 15 jurisdicciones del país.
Síntomas de la infección y cómo se previene
En los humanos, el período de incubación de la encefalitis equina del oeste varía entre 2 y 10 días. La mayor parte de los casos no presentan síntomas o se manifiestan de forma leve, incluyendo fiebre, fatiga, dolores musculares y malestar general, los cuales suelen resolverse por sí mismos en un lapso de 7 a 10 días.
Además puede presentar síntomas neurológicos, como dolor de cabeza, vómitos, convulsiones, cambios de comportamiento, somnolencia y coma. En los lactantes, la enfermedad neurológica suele aparecer poco después de su aparición.
En niños mayores y adultos, la encefalitis puede ocurrir después de varios días de enfermedad sistémica. La mayoría de las personas se recuperan por completo, cuando no hay afectación del sistema nervioso central.
El Ministerio de Salud nacional recomendó “el saneamiento ambiental para evitar la proliferación de mosquitos y la protección de las personas que trabajan o viven en las inmediaciones de lugares propicios para el desarrollo de mosquitos y donde se alojan caballos”.
Ante la presencia de síntomas, se recomienda la consulta médica, enfatizaron desde la cartera sanitaria. También se aconsejaron las siguientes medidas de cuidado:
-Saneamiento ambiental de los predios donde se alojan caballos y personas asociadas a dicha actividad.
-Drenaje o rellenado de espacios de anegación temporaria que puedan servir como sitio de oviposición para las hembras de esta especie.
-Desmalezado del peridomicilio (el hogar y zonas periféricas) y predios verdes para disminuir la presencia de mosquitos adultos.
-Protección personal de quienes trabajan o viven en las inmediaciones de lugares propicios para el desarrollo de mosquitos y donde se alojan caballos, incluyendo: el uso de ropa de trabajo clara y de manga larga y la utilización de espirales en el exterior y pastillas o aerosoles en el interior de las edificaciones, y la aplicación periódica de repelentes de insectos con el ingrediente activo DEET mientras se realizan tareas en el exterior o dentro de establecimientos de animales.
Con información de Agencia Télam.