Representantes de seis sociedades médicas de cardiología que formaron parte de la reunión de ayer con funcionarios del gobierno nacional para buscar soluciones al faltante de insumos que afectan a la práctica clínica, calificaron hoy de “productivo” el encuentro. Sin embargo, los médicos también expresaron a los funcionarios del Ejecutivo su preocupación por otras cuestiones críticas, como los bajos honorarios, la consecuente fuga de talentos y el deterioro en la calidad del servicio de salud, tanto público como privado. ‘El trabajo médico fue siempre la variable de ajuste en esta contienda de intereses’, afirmaron en un comunicado.”
El encuentro de ayer fue encabezado por el secretario de Comercio de la Nación, Matías Tombolini, junto con autoridades del Ministerio de Salud, además de las entidades de médicos cardiólogos prestadores del área de la salud y cámaras de proveedores de insumos médicos. “Allí se estableció una mesa de trabajo conjunta para establecer prioridades y encauzar diferentes situaciones que afectan al sector”, indicaron las sociedades científicas de cardiología en un comunicado emitido hoy.
Estos faltantes se convirtieron hace varias semanas en un problema grave que está afectando a diversas especialidades. Las voces se fueron sumando en los últimos días para alertar sobre la profundidad de la crisis que atraviesan los hospitales, clínicas, sanatorios y centros de diagnóstico y tratamiento a causa de la escasez de materiales básicos para prácticas que van desde las más complejas hasta las más simples.
Esta grave situación está impactando en la gran mayoría de los sectores de la salud, como gastroenterología, odontología, oftalmología y hasta las tomografías y otras áreas de diagnóstico. Sí es cierto, que los primeros coletazos los sintió la cardiología que hoy por hoy es una de las más afectadas, lo que se profundiza teniendo en cuenta la cantidad de personas que deben someterse, por ejemplo, a angioplastias y colocación de stents.
Las entidades que representan a los cardiólogos que formaron parte de la convocatoria de ayer en la Secretaría de Comercio fueron la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC); la Federación Argentina de Cardiología (FAC), la Fundación Cardiológica Argentina (FCA), el Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI), el Colegio Argentino de Cirujanos Cardiovasculares (CACCV) y el Colegio Argentino de Cardiología (CAC). Se trata de las mismas que el último 27 de octubre firmaron un duro documento advirtiendo sobre la falta de insumos médicos debido a las dificultades que existen para la importación.
Tras el encuentro de este martes, el doctor Pablo Stutzbach, Vicepresidente 1° de la SAC dijo a Infobae que fue una reunión “muy buena” y se trató de un “primer paso para identificar los problemas y escuchar a las distintas partes” del sistema sanitario.
Pero esta mañana, las seis entidades cardiológicas en su conjunto, con la firma de sus presidentes, emitieron un nuevo comunicado para informar detalles del encuentro. Tras “expresar su agradecimiento por la rápida respuesta recibida” por la Secretaría de Comercio, “que se mostró receptiva para encontrar caminos tendientes a comenzar a resolver el tema de la falta de insumos en cardiología” reiteraron, tal como dijeron “en la anterior comunicación, la escasez de insumos afecta la realización de intervenciones, tanto diagnósticas como de procedimientos, y se origina en gran medida en las dificultades financieras que impactan en las importaciones, como así también por el aumento injustificado en el precio de los insumos médicos vitales efectuados por algunos proveedores”.
Estimaron que, tras esa reunión que fue “productiva” aguardan “la implementación de medidas consensuadas para ir solucionando paulatinamente los faltantes”. Los cardiólogos “aprovecharon la oportunidad para expresarle a las autoridades la preocupación del sector por la situación actual que se está viviendo en la práctica clínica, ya que los insumos representan solo una de las aristas de la tremenda crisis que está viviendo la atención médica en la Argentina”.
“Entre otras cuestiones críticas, se abordó el tema de los honorarios médicos, mayoritariamente relegados por el aumento de los costos de los insumos y de los estudios diagnósticos, honorarios que se encuentran en sus niveles históricos más bajos de los que se tenga memoria, lo cual corresponde en gran medida a que el trabajo médico fue siempre la variable de ajuste en esta contienda de intereses”, lamentaron.
El reclamo de los cardiólogos que de esta forma se extendió a todas las especialidades es que las autoridades produzcan un “replanteo urgente por parte de los organismos regulatorios, tanto públicos como privados, en pos de evitar la fuga de talentos hacia el exterior y de mejorar la calidad del servicio hacia los pacientes, que son los principales perjudicados ante la situación crítica por la que atraviesa el sistema de salud de nuestro país”.
Ayer el vicepresidente de la SAC había dicho a Infobae: “Se escucharon a todas las partes, nosotros obviamente en el sistema de provisión de estos insumos no tenemos nada que ver, nosotros somos los que usamos y necesitamos traerlos para poder atender a los pacientes como se merecen y, según las evidencias escritas, de la mejor forma de tratar, por ejemplo, un infarto y algunas otras enfermedades. “Es clave tener esos dispositivos, esos elementos para el diagnóstico y todas las drogas que utilizamos para tratar estas enfermedades”,
En su primer comunicado, que desencadenó la convocatoria del gobierno, los cardiólogos describieron la grave situación generada por la falta de insumos: “Es de destacar que esta situación ya hoy, no solo afecta la realización de intervenciones programadas, sino también a las de urgencia como las angioplastias primarias en el tratamiento del infarto de miocardio o neurointervencionismo en el manejo de los accidentes cerebrovasculares, cuya inadecuada o imposible realización determinará un aumento inmediato de la mortalidad y/o discapacidad”.
El doctor Stutzbach destacó, que “obviamente la solución llevará su tiempo, tiene aristas múltiples porque es una cadena de comercialización con el extranjero, pero lo bueno fue que se pudieron identificar productos esenciales que no pueden faltar para la práctica de la cardiología y las emergencias cardiovasculares”.