Halloween es una de las celebraciones del año en las que los dulces juegan un papel esencial. Las golosinas que acompañan a cada niño en su recorrido por los vecindarios terminan en sus organismos y tienden a repercutir en sus niveles de glucosa ingeridos. Ante este fenómeno, las autoridades sanitarias han establecido regulaciones para controlar los niveles de azúcar en los productos accesibles para los menores. Una de las medidas cautelares son los etiquetados frontales que muestran al consumidor qué contiene un alimento ultraprocesado.
Alrededor del mundo, Halloween ha ganado popularidad, y con ella, se perfilan chocolates, caramelos y gomitas como los más populares, según los datos de Instacart, una empresa dedicada a la industria de entrega de alimentos. Estos tres dulces sobresalen entre las tendencias de compra en el mercado estadounidense. Sin embargo, los productos derivados del cacao son los más consumidos a nivel continental, de acuerdo con el Laboratorio de Datos Contra la Obesidad (LabDo).
Incluso se ha calculado que el consumo desmedido de golosinas durante Halloween es de 3500 calorías en los niños, lo equivalente a tres tazas de azúcar y 1.5 de grasa adicional, de acuerdo con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos. Las estimaciones incluso llegan a las 7000 calorías, una cantidad que requiere realizar actividad física durante 60 horas para quemar lo consumido.
Los niveles de azúcar en los dulces favoritos en Halloween
La primera golosina más popular en las casas estadounidenses es el maíz dulce clásico de Brach’s, según la encuesta de Shiny Smile Veneers, una empresa especializada en el cuidado dental. Este producto en su presentación estándar tiene 15 piezas que se convierten en 23 gramos de azúcar, una advertencia que se encuentra en el mismo empaquetado.
El problema más grave con este dulce es el uso del colorante Red 3, cuyo potencial cancerígeno ha sido reconocido por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), conforme al artículo científico publicado en el Center for Science in the Public Interest (CSPI), una de las organizaciones de defensa del consumidor con base científica más antiguas de aquel país.
En la lista de dulces populares, figuran los Reese’s Cups, los cuales son reconocidos como los caramelos más buscados durante Halloween. Estos pequeños chocolates en su presentación sencilla o snack tienen 16 gramos de azúcar en cada porción de dos tazas. Los productos derivados del cacao, en su mayoría, lideran las encuestas de preferencia en el consumidor y aparecen como los principales proveedores de calorías.
En el rango medio de contenido azucarado, destacan el chocolate con leche Hershey’s y los KitKat en tamaño sencillo. Mientras que los primeros sugieren en sus empaquetados consumir una porción de dos barras pequeñas, los famosos Kit Kat indican la ingesta de dos paquetes por porción. El resultado es 14 gramos de azúcar. Los Twizzlers, con sabor a cereza, contienen algo menos de azúcar, con una porción de cuatro trozos igualando a 13 gramos de azúcar.
Respecto a las golosinas con menor contenido de azúcar, destacan los Tootsie Roll Pop y los cacahuetes M&M’s: los primeros, con sus tres paletas por porción, suman 10 gramos de azúcar; mientras que los segundos, destacados por tener el nivel más bajo con 9 gramos por bolsa. Sin embargo, se advierte que este último caso se refiere a la ingesta de una bolsa completa en un solo momento, como sugiere el empaquetado.
En el lado más espeluznante de las golosinas, surgen los Sxtlets y los caramelos PEZ. Ambos contienen el colorante Rojo 3, y su consumo en exceso puede ocasionar cáncer e incluso afectaciones al ADN, pues el primero de ellos contiene dióxido de titanio, que la CSPI ha recomendado evitar porque daña el material genético de las personas que lo consumen en varios alimentos ultraprocesados.
En América Latina hay riesgo por el consumo de dulces en exceso
El mercado de los dulces tiene como consumidor frecuente a América Latina. Entre los países amantes de las golosinas, Brasil lidera la lista. El segundo lugar es para los mexicanos, quienes ingirieron 4.5 kilogramos de dulces en 2021, de acuerdo con las estimaciones en una publicación de LabDo.
Una problemática para aquel país que también lidia con el problema de diabetes relacionada con una mala alimentación, según datos de la Federación Internacional de Diabetes en esa nación.
Entre los productos que suelen consumirse durante el año y en las fiestas como el Día de los Muertos y Halloween, destacan el mazapán, la grenetina y el chocolate. Esta última golosina y los caramelos proporcionan el 8% de la energía alimentaria en América Latina que proviene de este tipo de alimentos, una proporción preocupante, solo superada por las bebidas carbonatadas, galletas y bebidas endulzadas, conforme a la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Esta organización explica que los chocolates aportan el 11% de los azúcares en los productos ultraprocesados, el 9% de las grasas totales y el 13% de las grasas saturadas.
El país que se destaca por más problemas de consumo en exceso de calorías de este tipo es México, donde las personas incorporan en su dieta alrededor de 365 kilocalorías al día a partir de fuentes azucaradas, de acuerdo con un estudio publicado en The Journal of Nutrition.
Entre los resultados más importantes se indica que los azúcares representan un 12.5% del aporte energético total, un porcentaje que excede significativamente el 5% recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Entre las consecuencias de este tipo de consumos, los problemas cardiovasculares son los más frecuentes en el mundo.