Las propiedades de las semillas de chía son muchas y muy documentadas. Entre los beneficios, sumar esta semilla proveniente de la salvia hispánica en el desayuno aporta un plus de nutrientes a esa primera comida del día.
El agua de chía con limón es ideal para consumir en ayunas, ya que, además de los múltiples nutrientes que aporta al organismo, es una bebida saciante, que ayuda a perder peso.
Las semillas de chía pueden sumarse en ensaladas, agregarse al yogurt, así como ser la base de batidos, postres o pan.
Qué es la chía y cuáles son los beneficios para la salud
Proveniente del centro y sur de México, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica y Paraguay, la chía tiene, entre otras muchas propiedades nutricionales, el plus de ser una de las especies vegetales conocidas con mayor concentración de ácido graso alfa-linolénico omega-3, además de contener una cantidad importante de proteína y fibra.
Pero además, los aporta junto a ácidos grasos omega-6 en la proporción ideal para el organismo, que es una proporción de 3 a 1 (omega-6 y omega-3).
La nutricionista de la Cleveland Clinic de EEUU, Beth Czerwony, calificó a la semilla de chía como “un superalimento”, ya que, “también tienen algunas vitaminas y minerales esenciales para el organismo, como fósforo, magnesio, hierro y zinc”. Y enumeró que entre sus numerosos nutrientes, se destacan tres:
1- Antioxidantes: estas sustancias ayudan a proteger contra los radicales libres, que pueden contribuir al cáncer y diversas enfermedades y afectar la forma en que el organismo envejece.
2- Fibra: una medida de 30 gramos de semillas de chía aporta 11 gramos de fibra, que es clave para la salud intestinal, además de ayudar a sentir saciedad por más tiempo.
3- Proteína: denominadas “componentes básicos” del cuerpo, las proteínas son vitales para la salud de los músculos, piel y huesos, entre otros.
Además, a diferencia de otras semillas, la gran cantidad de antioxidantes que posee lachía respecto a otras semillas la hace una aliada para prevenir el enranciamiento de las propias grasas. Entre sus antioxidantes destacan sustancias como el ácido clorogénico, el ácido cafeico, la quercetina o el kaempferol.
¿Por qué tomar agua de chía con limón es bueno para la salud?
A los beneficios ya enumerados de la chía, conviene agregar en este punto que consumir limón en ayunas, además de aportar ácido cítrico, calcio, magnesio, vitamina C, es de gran ayuda a eliminar toxinas del cuerpo, beneficia la digestión, potencia el sistema inmunológico, y alcaliniza el organismo, entre otras cosas.
Por lo que la combinación con la chía los vuelve un mix altamente saludable. Según los especialistas, el agua de chía con limón es bueno porque:
1 - Tiene efecto saciante
Además de aportar muchísimos nutrientes beneficiosos para el organismo, el agua de chía con limón ayuda a regular el apetito.
El efecto saciante se explica en la concentración de fibra soluble de la chía, que hace que absorba una gran cantidad de agua, retrasando la absorción durante la digestión y aumentando la sensación de saciedad. Al entrar en contacto con el agua, la chía aumenta su volumen hasta absorber 10 veces su peso. Es por ello que, para aquellos que busquen reducir las cantidades en su dieta, puede servir de ayuda para sentirse lleno
2 - Hidrata y nutre el organismo
Si se suman las proteínas de las semillas de chía a los antioxidantes y la vitamina C del limón, esta bebida aporta muchísima energía, además de hidratar el cuerpo. Es una buena forma de consumir los litros de agua necesarios para afrontar el día para aquellas personas a las que les cuesta beber simplemente agua.
3- Previene el envejecimiento prematuro
Los antioxidantes que aportan la chía y el limón ayudan a combatir a los radicales libres, responsables en gran medida del envejecimiento prematuro.
Una investigación enfatizó que gracias a sus antioxidantes y los micronutrientes de las semillas de chía, la piel mantendrá su firmeza y su elasticidad, lo que ayudará a prevenir el envejecimiento prematuro, que en ocasiones provocan el cansancio, una mala alimentación o los malos hábitos.
4- Mejora la digestión
Tanto el limón como la chía ayudan al sistema digestivo a digerir mejor los alimentos, lo que se traduce en que el organismo absorbe los nutrientes de manera óptima. Así, todos los nutrientes de la dieta llegan a destino sin perderse por el camino, lo cual, si se lleva una alimentación sana y balanceada, repercutirá de forma positiva en la salud.
5- Ayuda a adelgazar
Ambos ingredientes -la chía y el limón- son una fuente de fibra y antioxidantes naturales que ayudan a depurar las toxinas del organismo y evitar la retención de líquidos, además de luchar contra el estreñimiento. Estos efectos, sumados al saciante antes descripto, ayudarán a regular el peso y perder los kilos de más.
“Las semillas de chía se mezclan con el agua y los jugos gástricos y se expanden en el estómago -explicó Czerwony-. Eso mantiene a las personas sin hambre por más tiempo porque ocupa espacio y toda esa fibra soluble ralentiza la digestión”.
Cuando la digestión se ralentiza -continuó explicando-, “el cuerpo libera azúcar en la sangre a un ritmo más lento, y se evitan los picos y descensos de azúcar en la sangre que causan un aumento del apetito”.
¿Cuáles son las propiedades del limón?
Los limones incluyen muchas vitaminas y nutrientes que pueden estimular el organismo, según indicó la nutricionista Tessa Wellon, del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh. Entre sus propiedades se encuentran:
Vitamina C: los limones son una buena fuente de vitamina C , que promueve la inmunidad, combate las infecciones, cura las heridas y más. Un limón proporciona alrededor de 31 mg de vitamina C, según FoodData Central del Departamento de Agricultura de EE. UU. La ingesta diaria recomendada es de 90 mg para hombres y 75 mg para mujeres.
Calcio: es importante para la función muscular, la secreción hormonal, la contracción vascular y más.
Potasio: ayuda a que los músculos y los nervios funcionen correctamente.
Ácido fólico: combate los defectos congénitos de la columna y ayuda en la formación de glóbulos rojos.
Cómo preparar agua de chía con limón, paso a paso
Para preparar el agua de chía con limón se necesita:
- una cucharadita de semillas de chía (5 g)
- un vaso de agua (250 ml)
- un limón
- una cucharada de miel (opcional)
Ahora, lo primero que se debe hacer es dejar en remojo la cucharadita de semillas de chía con medio vaso de agua durante una hora.
Luego, exprimir el limón y mezclar su jugo con el otro vaso de agua.
Cuando las semillas de chía hayan formado el mucílago (el gel que se forma cuando la semilla entra en contacto con líquido), mezcla el agua con jugo de limón con el “gel” de las semillas de chía.
Batir la mezcla a mano o con batidora y agregar la cucharada de miel si se quiere un sabor más dulce.