Unas 3 millones de personas fallecen por muerte súbita cada año en el mundo y en Argentina las cifras alcanzan los 40 mil casos anuales, lo que implica una vida perdida cada 15 minutos. Pero, ¿qué pasaría si más personas supieran cómo actuar? Según la American Heart Association, las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) pueden duplicar o incluso triplicar las probabilidades de supervivencia.
En el marco del Día Mundial del Corazón, que se celebrará el 29 de septiembre, la Federación Argentina de Cardiología (FAC) desarrolló un proyecto que busca afianzar la Red Nacional de RCP, por lo que se brindará entrenamientos este viernes a lo largo y a lo ancho de todo el país. Se dictarán cursos gratuitos en diferentes puntos del país, incluida la Legislatura porteña y la Base Marambio en La Antártida. La Ciudad de Buenos Aires iluminará lugares destacados para generar conciencia en la población.
Este proyecto de la FAC denominado “Salva una Vida con tus manos” fue seleccionado debido a su relevancia como estrategia de salud pública por la Organización Mundial del Corazón.
¿Quiénes tienen mayor riesgo de muerte súbita?
La etapa inicial y avanzada de la vida son especialmente vulnerables a la muerte súbita. En la temprana infancia, los bebés menores de seis meses son particularmente susceptibles. Por otro lado, los adultos pueden enfrentar este riesgo principalmente a causa de afecciones cardiovasculares. Una de las principales razones es la aterosclerosis, asociada a varios factores de riesgo como el envejecimiento, hipertensión, diabetes, antecedentes familiares, sedentarismo, y hábitos perjudiciales como fumar y el consumo de drogas.
Es relevante señalar que, aunque en niños y adolescentes la muerte súbita no es común, cuando ocurre, generalmente está ligada a defectos cardíacos congénitos, ya sean estructurales o eléctricos.
La muerte súbita se desencadena a menudo por una arritmia cardiaca severa, conocida como fibrilación ventricular. Esta arritmia lleva al corazón a un estado de agitación eléctrica, impidiendo un latido regular. En consecuencia, el corazón no puede bombear sangre eficientemente, la presión arterial desciende drásticamente y se corta el suministro sanguíneo al cerebro y otros órganos vitales. En esta situación, el cerebro es especialmente frágil.
Tan solo unos minutos de parada cardiaca pueden derivar en daños cerebrales irreversibles. Estos daños suelen ser las complicaciones más recurrentes en aquellos que son reanimados con éxito. Por cada minuto que pasa, la probabilidad de supervivencia disminuye en un 10%. Es decir, que al cabo de diez minutos dichas posibilidades son mínimas. Por ello, la reanimación debe empezarse de forma extraordinariamente rápida, idealmente en menos de tres minutos desde el comienzo del cuadro.
Cuáles son los síntomas de muerte súbita y cómo prevenir
Es crucial estar alerta a señales como el dolor torácico que se propaga hacia la espalda y extremidades superiores, que a menudo puede venir acompañado de síntomas como sudoración excesiva, debilidad o dificultad para respirar.
Para prevenir riesgos, especialmente en adultos, es esencial centrarse en identificar y gestionar factores de riesgo asociados con enfermedades cardiovasculares. Por ello, las consultas periódicas con el médico son fundamentales.
Es recomendable realizar exámenes completos, no solo para quienes practican deportes de manera profesional, sino también para aquellos que se ejercitan de forma recreativa. Estos chequeos pueden incluir una revisión física, electrocardiograma, prueba de esfuerzo y, si se considera necesario, una ecografía cardíaca.
En las etapas de la infancia y adolescencia, es vital priorizar revisiones médicas antes de competencias deportivas, ajustadas a la edad y nivel de actividad física del joven. Siguiendo las directrices de la FAC, se recomienda una evaluación cardíaca, que incluye un electrocardiograma, tanto en la fase prepuberal como en la postpuberal.
Dada la importancia de la prevención, la Federación Argentina de Cardiología fue una de las instituciones científicas que logró que en 2015 se sancionara la ley 27.159 de “Muerte Súbita. Sistema de Prevención Integral” que establece la obligatoriedad de contar con al menos un cardiodesfibrilador automático externo (DEA) en lugares públicos y privados con concentración o circulación diaria superior a 1000 personas/día, teniendo en cuenta que la desfibrilación dentro de los 3 a 5 minutos del episodio de muerte súbita puede producir tasas de supervivencia de entre el 50 a 70%.
Actividades por el Día Mundial del Corazón
Gracias al trabajo conjunto con el Ministerio de Salud y el Ministerio de Espacio Público de la Ciudad, el viernes 29 de septiembre se iluminará de color rojo el Obelisco, la Legislatura porteña y varios edificios emblemáticos, para generar conciencia sobre la principal causa de muerte a nivel mundial y la necesidad de evitar muertes prevenibles.
Entre otras actividades, en la Legislatura, el día 29 entre las 16 y las 18 horas se dictará el curso de RCP. También en la sede de la FAC de la calle Bulnes se realizarán varias actividades relacionadas el 28 y 29 de septiembre. Finalmente, en el Hospital de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez será a partir de las 10 de la mañana
En relación a estas acciones, días atrás la Cámara de Diputados de la Nación firmó un convenio para capacitar a todos sus integrantes en RCP.
Además de CABA, se unieron en esta cruzada de entrenamiento gratuito para la comunidad, las ciudades de Villa María (Córdoba), Salta, Jujuy, Rosario, San Juan, Corrientes, Paraná (Entre Ríos), La Plata, Santa Fe, Merlo (San Luis) y hasta la Base Marambio en la Antártida Argentina. Para llevar adelante estas actividades la Federación trabajará en conjunto con instituciones como la Cruz Roja, el Rotary Club, las sociedades de cardiología locales, Fundación UDEC, entre otras.