En la India, el virus Nipah volvió a producir un brote y ya causó la muerte de 2 personas. Es el cuarto brote en ese país. Ya se han testeado a más de 700 personas. Se trata de una infección zoonótica que puede transmitirse al ser humano a partir de animales (tanto silvestres como domésticos).
El virus Nipah es uno de los patógenos que está incluido en la lista de amenazas epidémicas que requieren medidas urgentes de investigación y desarrollo de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Porque “tiene potencial de producir una epidemia o una pandemia”, según señaló el Centro Europeo para el Control y la Prevención de la Enfermedad (ECDC).
Si bien por el momento el nuevo brote solo se detectó en el sudoeste de la India, ¿hay riesgo de que el virus Nipah llegue a circular y afectar a la población de Iberoamérica?
En diálogo con Infobae, el presidente de la Sociedad Latinoamericana de Medicina del Viajero (SLAMVI), el médico colombiano Alfonso Rodríguez Morales, señaló: “La infección por el virus del Nipah tiene alta letalidad. Pero no es alta su mortalidad. La letalidad solo tiene en cuenta cuántas personas se mueren con respecto al total de afectados. En el caso del Nipah, puede llegar a más del 40%”.
En cambio, si se considera la mortalidad, que es la cantidad de fallecidos por una enfermedad tomando como referencia a la población total, la tasa del Nipah es menor.
“Es una enfermedad con baja incidencia. Son pocos los casos de personas afectadas en relación a la población total. Por lo cual, la tasa de mortalidad es baja”, explicó Rodríguez Morales, quien es profesor de la Facultad de Medicina de la Fundación Universitaria Autónoma de las Américas en Pereira, Colombia.
“En la actualidad, el riesgo de que el virus Nipah llegue a afectar a la población en nuestra región es extremadamente bajo”, afirmó el experto. “Los flujos migratorios de Asia a España son diferentes que los de Asia a América Latina. La probabilidad de tener casos importados de Nipah en España o Portugal es aún baja, pero no es cero. Para Latinoamérica el riesgo es comparativamente menor que para España o Portugal”.
Cómo se puede prevenir una epidemia por Nipah
En tanto, el doctor Tomás Orduna, ex presidente de la SLAMVI, ex jefe del Servicio de Medicina Tropical y Medicina del Viajero en Hospital de Infecciosas Muñiz en Buenos Aires y miembro del comité científico de la Fundación Mundo Sano, comentó a Infobae: “La infección por el virus de Nipah está asociado fuertemente a la presencia de poblaciones de murciélagos frugívoros que habitan en Asia, África y Oceanía. Ese género de murciélago no se ha descripto en América ni en Europa”.
Esas especies de murciélagos se conocen como “zorros voladores” y son reservorios naturales del virus. “Podría haber en algún momento por traslado de animales que se hayan infectados, como cerdos y caballos, de esas regiones donde hay reservorios del virus. Por esto, hoy es crucial la vigilancia mundial que incluye el cuidado en el movimiento de animales para prevenir que no haya transmisión del virus Nipah en otras regiones del mundo. Si bien es improbable que se trasladen los murciélagos a otras regiones, sí hay que tener cuidado con cerdos y caballos”.
En cuanto a los seres humanos, Orduna puntualizó recomendaciones para las personas que viajen a zonas donde hubo brotes de Nipah: “Cuando alguien vuelve de la India u otros países de África, Asia y Oceanía, se ha estado en zonas rurales y en contacto con animales de granja, y se desarrolla un cuadro febril, se tiene que sospechar la posibilidad de la infección por Nipah en la consulta médica. Se debe hacer una averiguación de las actividades que la persona hizo en las dos semanas previas”.
Los murciélagos pertenecen a la familia Pteropodidae y son los hospedadores naturales del virus Nipah. La infección puede ser asintomática o leve, pero también causa enfermedad respiratoria aguda y encefalitis mortal. No hay disponible una vacuna efectiva y segura, y el tratamiento habitual consiste en proporcionar cuidados de apoyo.
Dónde se ha detectado el virus Nipah en el mundo
El virus Nipah fue identificado por primera vez en 1998 durante un brote de la enfermedad entre los criadores de cerdos en Malasia y Singapur. Desde entonces, se han documentado brotes esporádicos en Bangladesh, India, Filipinas y Singapur.
Se sabe que el patógeno puede infectar a los humanos directamente a través del contacto con los fluidos corporales de murciélagos y cerdos infectados, con algunos casos documentados de transmisión entre humanos.
El brote de 1998 fue en Malasia y Singapur y causó más de 100 muertos y casi 300 infectados. Entre 1998 y 2015 se notificaron más de 600 casos de infecciones humanas por el virus Nipah, según datos de la OMS. Un brote en India en 2001 y otros dos en Bangladesh mataron a 62 de las 91 personas infectadas.
En el brote anterior en Kerala, India, de 2018, el Nipah mató a 17 de las 18 personas infectadas, una tasa de letalidad del 94,4%.
Qué síntomas produce el virus Nipah
Los síntomas iniciales de la infección por virus Nipah pueden incluir fiebre, dolor de cabeza, mialgia (dolor muscular), náuseas, vómitos, dolor de garganta, tos y/o molestias respiratorias.
Puede desarrollarse una encefalitis aguda con los siguientes síntomas: mareo, somnolencia, alteración del estado de conciencia y cualquier otro signo neurológico indicativo. En casos graves, se producen encefalitis y convulsiones que pueden conducir al coma en 24-48 horas.
La progresión a encefalitis indica un mal pronóstico, con muerte en una mediana de seis días tras el inicio de los síntomas, de acuerdo con el ECDC.
La mayoría de las personas que sobreviven a la encefalitis se recuperan totalmente. Pero las disfunciones neurológicas persisten en alrededor del 20% de los sobrevivientes. Entre ellas se incluyen convulsiones recurrentes, fatiga abrumadora y alteraciones del comportamiento.
Cómo emergió el virus Nipah en animales de granja y humanos
Según la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), “quizás después de programas de deforestación, las granjas porcinas malasias donde surgió la enfermedad por primera vez contaban con árboles frutales que atraían a los murciélagos del bosque tropical”. Eso expuso a los cerdos domésticos a la orina y materia fecal del murciélago.
“Se piensa que la infección en los cerdos fue iniciada por estas excreciones y secreciones, y después se difundió rápidamente entre los cerdos de cría intensiva”, aclaró la agencia sanitaria. Más aún, la transmisión entre granjas puede deberse a prendas, equipos, botas, vehículos, entre otros, contaminados.