¿Por qué es importante conocer los mecanismos de compra de vacunas por parte del Estado? La respuesta puede iniciarse con dos observaciones. La primera es que las decisiones de compra de insumos, vacunas, tratamientos y otros eslabones de la atención en salud están directamente relacionados con el uso eficiente de las partidas del gasto público, y de eso dependerá luego la perdurabilidad en el tiempo de las políticas.
Y la segunda, y estrictamente relacionada a la primera, es que en la base de una política pública de salud exitosa aparece como indispensable el manejo transparente y racional de los recursos públicos, que serán el sustento a palabras muy apreciadas para cualquier sistema sanitario, como son acceso e igualdad.
En el último tiempo, Argentina introdujo cambios en la compra habitual de vacunas que hizo con el Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), como lo vienen haciendo hace tiempo la mayoría de los países de la región, excepto Chile. Argentina hizo llamados a licitación a la industria farmacéutica, en algunos tipos de vacunas cuyos costos y condiciones en dólares se volvieron casi inaccesibles para el Estado argentino actual. Infobae reconstruyó tres casos testigo de compra de vacunas que plantean una nueva matriz. ¿Cómo son los nuevos mecanismos? ¿Van a perdurar o a convivir dos modelos?
Tres casos testigo
Tres casos testigo a los que pudo acceder Infobae permiten establecer un cambio en la matriz de compra de vacunas por parte del Estado nacional, conducidas por el Ministerio de Salud de la Nación, que hasta ahora -como lo vienen haciendo la mayoría de los países de América Latina- lo hace a través del Fondo Rotatorio para la Compra de Vacunas de la Organización Panamericana de la Salud (OPS); un mecanismo financiero que permite a 41 países de las Américas acceder a vacunas seguras y de calidad a precios reducidos, promoviendo la equidad en la salud pública.
Según pudo saber Infobae en la Argentina la decisión de “romper o abrir nuevos caminos” de compra de vacunas a través de mecanismos de licitación entre distintos oferentes privados de la industra farmacéutica no es nueva. Y no solo tiene que ver con la actual falta de dólares que aqueja a la Argentina; sino con bajar costos en el futuro y abrir nuevas matrices más ágiles y competitivas.
La compra de la vacuna de la meningitis —incluida como obligatoria en el Calendario Nacional de Vacunación— aparece como el primer caso testigo que da cuenta del cambio de modalidad de compra de vacunas hasta hoy. Aparece la idea de que cada compra sea analizada —caso por caso— según cada tipo de inoculante y según su sistema de producción, tanto en la industria pharma local y global.
El Fondo Rotatorio de la OPS por esta vacuna de la meningitis tenía un contrato con el Ministerio de Salud por USD 62 millones de dólares anuales, con dos cláusulas adicionales que encarecían aún más el precio final: un 15% extra de gastos logísticos y un costo extra de 4,25% por costos de comisión por unidad, todo en moneda dólar estadounidense.
Ante este escenario de altos costos de los inoculantes que dejó la pandemia, sumado a la escasez de dólares, el Ministerio de Salud argentino llamó a una licitación a tres compañías biofarmacéuticas con sede en Argentina, para la vacuna de la Meningitis, buscando costos en pesos y sin cláusulas extra que aumenten los precios por unidad. Los tres laboratorios que participaron de la licitación son productores de vacunas por excelencia: la británica GSK, el laboratorio francés Sanofi y la norteamericana Pfizer. Entre los tres deberá quedar la mejor oferta de la vacuna de la meningitis para el país. Aún no se conoce el ganador de la licitación.
Entre las condiciones de esta modalidad de compra por licitación -entre oferentes privados del sector- se propone pagar a medida que se liberen las partidas, y no a 6 meses por adelantado, en dólares, como propone el Fondo Rotatorio de la OPS.
¿Será mejor o peor el cambio de matriz en la compra de vacunas de parte del Estado argentino? Aún no lo sabemos. A primera vista resulta más conveniente el cambio de moneda, pasar de tener una deuda en dólares a tenerla en pesos. Habrá que estudiar bien en el sistema por licitación el costo por unidad. Pero lo crucial e imprescindible es abrir la competencia a todos los players de la industria pharma y que los nuevos mecanismos sean competitivos, justos y transparentes.
Vacuna contra Hepatitis A y HPV
A excepción de Chile, que en general ha comprado vacunas de manera solitaria y no a través del Fondo Rotatorio de la OPS, la Argentina —hasta hoy— figura entre los países que se han beneficiado de conseguir a través de esta modalidad vacunas a menor costo, y en mayores cantidades.
Si bien el sistema de licitaciones garantiza cubrir las necesidades -vacuna por vacuna- que propone el calendario nacional que tiene el país, aún no está del todo claro el impacto de esta decisión en el gasto público y en el costo por unidad.
Además de la mencionada vacuna contra la meningitis, existen otros dos inoculantes que fueron adquiridos por licitación, las vacunas de la Hepatitis A y la del HPV cuadrivalente —la sigla en inglés que define la vacuna contra el papiloma humano, que previene el cáncer de cuello uterino—, ambas integran el Calendario Nacional de Vacunación (CNV).
En el caso de la vacuna contra el HPV, la elección de elegir con qué laboratorio elegir “por fuera” de la compra al Fondo Rotatorio de la OPS fue más fácil: el único oferente global de la vacuna contra HPV es el laboratorio norteamericano MSD. Y es a quien el Estado nacional hoy le está comprando esta vacuna.
Yendo al caso de la licitación para la compra de la vacuna contra la Hepatitis A, el Estado abrió una licitación y llamó a competir al laboratorio estadounidense Merck-MSD, nuevamente al británico GSK y al consorcio Sinergium, del grupo Insud, que lidera Hugo Sigman. Resultó ganador Sinergium Biotech. Y resultó que los precios por unidad de cada inoculante fueron mejores que los ofrecidos por el Fondo de OPS.
Precios OPS versus licitaciones
La Organización Mundial de la Salud seleccionó recientemente a Sinergium Biotech para llevar adelante el desarrollo de vacunas de plataformas ARN mensajero. La empresa trabajará en tandem con la biotecnológica mAbxience —que el año pasado fue adquirida por los alemanes de Fresenius con una participación del 55%— a efectos de desarrollar y fabricar los ingredientes activos de la vacuna.
La decisión de la cartera de Salud de la Nación de no proveerse en algunos sueros a través del sistema del Fondo Rotatorio de la OPS tiene mucho que ver con las condiciones de financiación poco atractivas para una Argentina con pocos dólares , sumados a los seis meses de adelanto en el pago; aún cuando significa importar vacunas sin aranceles ni impuestos. Salud optó por llamar a licitaciones, lo que habrá que ver y estudiar es cómo será el impacto en el precio y, en consecuencia, en la administración del gasto público.
Chile es un buen ejemplo de un país que siempre compró sus vacunas por fuera de la OPS. Es cierto que necesita menores cantidades y hay que decirlo también no tiene un Calendario Nacional de Vacunación (CNV) tan frondoso y completo como el argentino.
Fuentes del sector farmacéutico consultadas por Infobae explicaron que, “este cambio de matriz en las compras de las vacunas de la OPS a compras por licitación con oferentes privados- en estos tres casos puntuales de Hepatitis A, HPV y Meningitis- demostró que abre la competencia entre los players del sector, establece condiciones de producción de calidad y competititvas; y veremos como impactará en el precio y acceso.
Además de ayudar en este tiempo de pocos dólares, las compras abiertas justas y transparentes generan un círculo virtuoso en el sistema científico porque algunas vacunas se fabricarán en el país en su totalidad; y otras a través de la transferencia tecnológica, se terminarán bajo los procesos de fill & finish.
Cómo opera el Fondo Rotatorio para la Compra de Vacunas de la OPS
El sistema fue establecido en 1977 mediante la resolución CD25.R27. Según datos oficiales, en 2022 adquirió más de 400 millones de vacunas y otros insumos. Los precios de las vacunas se publican en el sitio web de la OPS para garantizar su transparencia.
La oficina regional de la Organización Mundial de la Salud (OPS) para las Américas actúa como agente de compras en nombre de los estados miembros e instituciones, a partir de un proceso de licitación. Los acuerdos anuales se negocian con proveedores que cumplen con los requisitos establecidos para la compra de vacunas y jeringas.
Existe consenso respecto de que el Fondo Rotatorio ha sido crucial para la eliminación de enfermedades como la viruela, la poliomielitis y el sarampión en el continente. Según Santiago Cornejo, director ejecutivo del Programa Especial Fondos Rotatorios Regionales de la OPS, este sistema “ha sido un gran impulsor de la inmunización en la región de las Américas”. En sus 46 años de funcionamiento, “no solo creció en sus compras de vacunas y contribuyó a la introducción de nuevos productos, sino que también desarrolló un rol clave con asesoramiento y consejos a los países sobre cómo instrumentar sus planes de inmunización”.
De acuerdo con los datos del Fondo Rotatorio, los países habrían pagado un 75% más por sus compras de vacunas entre 2018 y 2022 si hubieran actuado de forma independiente. Fue la propia ministra de Salud argentina, Carla Vizzotti, según constan en la web de OPS, quien destacó la importancia de este mecanismo en la adquisición de inoculantes de calidad a precios más bajos.
“El Fondo Rotatorio es una herramienta crucial en la adquisición de vacunas para América Latina y el Caribe”, destacó Vizzotti. “Es muy importante la mirada y la estrategia que tiene el Fondo Rotatorio. Son vacunas de calidad, precalificadas por la Organización Mundial de la Salud y además tienen un punto que es muy relevante, que es el precio mínimo”.
El Fondo ofrece financiamiento sin intereses por 60 días a los países que adquieren vacunas. Se financia mediante un recargo del 4,25% por cada dosis vendida, de la cual el 2,5% se destina a un fondo de capital que los países pueden utilizar para esa línea de crédito para las vacunas. El restante 1,75% se utiliza para pagar los costos administrativos.
Son 25 las enfermedades que pueden prevenirse a través de la vacunación recibida en tiempo y forma, según los robustos calendarios nacionales de vacunación (CNV) disponibles en toda la región. Y en el caso de Argentina, además, el acceso al CNV es gratuito.
La paradoja científica alrededor de las vacunas hoy es fuerte y oscilante. Las cifras que marcan la progresiva baja de vacunados y la reaparición de enfermedades que se creían erradicadas por el efecto preventivo de los inoculantes. Esta vacilación, frente a la certeza que necesita la ciencia para avanzar, es grave y hay que ponerla en el centro del debate.
El proceso de licitación del Fondo Rotatorio es abierto e internacional. Los proveedores deben presentar propuestas técnicas y de precio, y solo aquellos que cumplen con los requisitos de calidad son considerados para una adjudicación. De esta forma, no solo facilita la compra de vacunas, sino que también fortalece los sistemas de inmunización en las Américas, asegurando que todos los países, independientemente de su tamaño, tengan acceso a vacunas asequibles y de alta calidad.
A pesar de las desigualdades globales, la vacunación accesible es la mejor y más democrática herramienta para salvar vidas. Durante muchos años, América Latina y el Caribe registró una de las tasas de vacunación infantil más altas del mundo. Ahora presenta una de las más bajas. Según datos recientes de UNICEF,
- Uno de cada 4 niños en América Latina carece de las vacunas esenciales, lo que significa el mayor descenso mundial en vacunación infantil en los últimos diez años.
- Actualmente más de 1,7 millones de niños son “cero dosis”, es decir que nunca han recibido una vacuna.
- Una de las causas de esta caída en las tasas de vacunación es la falta de confianza en la importancia de las vacunas, que disminuyó después del inicio de la pandemia. Esta desconfianza puede provenir de preocupaciones por efectos secundarios, discurso naturista, rechazo a la obligatoriedad y al sistema de salud, entre otros.
- Los movimientos antivacunas son un factor que agrava la falta de confianza en las vacunas, y cuentan con financiación y apoyo político. Para revertir esta situación es necesaria la participación y empoderamiento de la comunidad, la escucha social y la educación a favor de las vacunas.
Las consecuencias de este retroceso son graves: están resurgiendo enfermedades prevenibles por vacuna como la difteria, el sarampión y la polio, poniendo en peligro las vidas de los niños más marginados y el bienestar de toda la población. Y además, la caída de la vacunación es asimétrica. Entre los millones de individuos a nivel global que no fueron inmunizados a través de las vacunas, la mayoría son pobres o vienen en países de ingresos medio a bajos.
El Congreso de la Nación aprobó por unanimidad, en diciembre de 2018, una nueva Ley de Vacunas, de carácter federal, que garantiza su gratuidad y disponibilidad a lo largo de todo el país. La ley 27.491 reafirma a la vacunación como una política de Estado, donde las vacunas siguen siendo gratuitas y obligatorias, sumando al Estado Nacional la responsabilidad de adquirir los insumos necesarios para la vacunación y proveerles a las 24 provincias.
Un informe conjunto emitido en 2022 por la OPS, UNICEF y la SAP daba cuenta de que el impacto de la pandemia por SARS-CoV-2 sobre las coberturas de vacunación fue muy significativo en todos los grupos etarios. En el mismo año que se desató la pandemia por COVID (2020), ninguna vacuna del calendario nacional había superado un valor del 80% de cobertura a nivel nacional, lo que implica un incremento sustancial de individuos susceptibles que, acumulados con los susceptibles de años previos, generan un escenario que predispone y favorece la aparición de brotes, reemergencia o reintroducción de enfermedades prevenibles por vacunación (EPV) que se encontraban controladas o eliminadas en nuestro país.
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