En las últimas horas, se registraron tres casos de triquinosis en Córdoba, según informó el Ministerio de Salud provincial a través del Departamento de Zoonosis. Uno de ellos es oriundo de la ciudad de Córdoba, mientras que los otros dos corresponden al departamento de Río Primero, en las localidades de Las Gramillas y Villa Santa Rosa.
Los tres pacientes recibieron atención médica en distintos centros de salud de la provincia y se encuentran en buen estado de salud, con tratamiento ambulatorio. Durante las entrevistas epidemiológicas para determinar el origen de los casos, se pudo constatar que las personas consumieron salame y chorizo provenientes del departamento de Río Primero.
¿Qué es la triquinosis?
La triquinosis o trichinellosis es una enfermedad zoonótica (transmitida de animales a humanos) que puede afectar a las personas que consumen carne cruda o mal cocida de cerdo, de animales silvestres, como jabalíes o pumas, o de fiambres, chacinados y embutidos de origen desconocido o sin el control sanitario adecuado.
Se transmite a través de las larvas del parásito Trichinella spp. que se aloja en el músculo de los animales y no les da síntomas. Si bien en Argentina los cerdos domésticos son la principal fuente de infección, también se han registrado casos producidos por el consumo de otras especies silvestres.
¿Cuáles son los síntomas de la triquinosis?
El cuadro clínico de la triquinosis es muy variable en los seres humanos. Se puede presentar desde una infección asintomática hasta una enfermedad grave.
“En las personas se puede producir una sintomatología inespecífica, parecida a una gripe, con síntomas gastrointestinales, fiebre, vómitos, diarrea, dolores musculares, entre otros”, señaló recientemente Tatiana Aronowicz, médica veterinaria del área de Zoonosis de la Dirección Nacional de Sanidad Animal del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) cuando se conmemoró la semana de la lucha contra esta patología en mayo.
La especialista remarcó que “es importante asociar lo que uno consume con esos síntomas y concurrir al centro médico más cercano”. Porque cuanto antes se detecte, hay más posibilidades de controlar la enfermedad.
Asimismo, es fundamental que aquellas personas que se dediquen a la cría de animales “los mantengan en sus establecimientos en las condiciones higiénicas adecuadas y una correcta alimentación”. Esto se debe a que la triquinosis no se contagia de porcino a porcino, sino que el animal puede contraer la enfermedad a través de lo que come.
Otro aspecto relevante es “poder controlar y evitar en los establecimientos el ingreso de roedores, ya que pueden contener larvas de trichinella que ingiere el cerdo”, afirmó Mariana Barros, médica veterinaria de la Coordinación de Agricultura Familiar del Senasa.
Cómo prevenir la triquinosis y qué alimentos evitar
En cuanto a la población en general, se recomienda adquirir los productos únicamente en establecimientos que se encuentren certificados y habilitados para la elaboración de estos alimentos, y tener en cuenta la identificación de los productos a través de la etiqueta que certifique su origen.
Esto significa que se debe evitar los fiambres, chacinados y otros derivados cárnicos del cerdo, jabalí o puma que no hayan sido faenados y/o elaborados por establecimientos autorizados para tal fin por la Autoridad Sanitaria competente. En la Argentina, puede ser el Senasa, el Ministerio de Agricultura provincial o Bromatología provincial/municipal según corresponda.
Otra recomendación es cocinar correctamente la carne hasta que su interior pierda el color rosado, lo que indica que se alcanzó la temperatura que elimina las larvas que transmiten la enfermedad, mayor a 71 grados centígrados.
- No consumir ni permitir el consumo de carnes crudas y/o chacinados caseros que no hayan sido inspeccionados previamente a la elaboración.
- Verificar el rótulo o etiqueta de fabricación en todos los subproductos de cerdo que se adquieran. Deberá leerse claramente lo siguiente: marca del producto; empresa responsable; número de habilitación nacional del establecimiento; fecha de elaboración y de vencimiento del producto; condición de mantenimiento en cuanto a temperaturas ambientales; y rótulo con la composición del producto.
- No consumir choripán en puestos no autorizados o no habilitados.
- La salazón y el ahumado de las carnes no son suficientes para destruir los parásitos presentes.
Seguir leyendo: