Aunque parece que todo se ha relajado, la pandemia por el coronavirus continúa. En la Argentina, los casos de personas diagnosticadas por testeos con el COVID-19 aumentaron un 57% durante las últimas dos semanas, según los datos abiertos del Ministerio de Salud de la Nación.
Los incrementos de los casos confirmados se están produciendo en 13 de las 24 jurisdicciones. Son provincia de Buenos Aires, Ciudad de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Corrientes, Formosa, Mendoza, Río Negro, Salta, Santa Fe, Tierra del Fuego y Tucumán.
Pero la curva de casos en Tierra del Fuego, Ciudad de Buenos Aires, provincia de Buenos Aires, Catamarca, y Córdoba estaría más acelerada que en el resto de las jurisdicciones donde hay más diagnósticos.
La tasa de incidencia son 1,57 casos por cada 100.000 habitantes a nivel nacional. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los casos reales de personas con COVID-19 podrían ser más porque los testeos solo están limitados a algunos grupos de personas desde abril pasado. También podría haber casos confirmados que aún no fueron cargados en el sistema de la cartera de Salud.
Pero si se consideran los reportes al sistema de vigilancia epidemiológica del Ministerio de Salud según la fecha de inicio de síntomas a nivel nacional, desde la última semana de julio pasado los casos de COVID-19 habían empezado a reducirse. Es decir, una ola pequeña en comparación con la del verano pasado impulsada por el primer sublinaje de la variante Ómicron.
En esa semana de julio, hubo un máximo de 7.435 casos confirmados como promedio semanal. Luego, fueron bajando. En la semana del 30 de octubre se produjo el menor registro de casos, con 130 casos como promedio semanal. Pero a la semana siguiente la situación cambió. Se reportaron 178 casos y la semana pasada y pasaron a ser 252 casos.
“Al tener en cuenta que hoy no todas las personas con la infección tienen que hacerse el hisopado y puede haber demora en la carga de datos, se puede solo afirmar que hubo un aumento del 57% como mínimo a nivel nacional en comparación con los detectados en los 14 días previos”, dijo a Infobae el doctor Jorge Aliaga, secretario de Planeamiento de la Universidad Nacional de Hurlingham, quien hace un análisis de los datos semanales de la cartera de Salud.
Si se consideran las jurisdicciones del país, se verifican diferencias como también se ha observado en las olas anteriores desde 2020. En Ciudad de Buenos Aires, el promedio de casos semanales se triplicaron durante las últimas semanas (pasaron de ser 35 en la semana del 30 de octubre a 98 casos en la última semana reportada.
En Tierra del Fuego, se estaba en una situación muy particular. En las cuatro semanas que van entre fines de septiembre y la semana del 6 de noviembre no tuvieron ni un solo caso confirmado como promedio semanal. Pero la semana pasada registraron 3 casos confirmados como promedio.
En provincia de Buenos Aires, los casos crecieron un 60% durante las últimas tres semanas: pasaron de 43 casos confirmados en promedio a 69 en el último reporte nacional. “Es posible que se estén haciendo más testeos en las jurisdicciones donde han aumentado más los casos. Habrá que ver si los aumentos se producen en todas las jurisdicciones en el próximo mes o no”, afirmó.
“Hay que insistir en que, ya sea por el virus de la gripe o por el coronavirus, lo mejor hoy es estar en ambientes ventilados o al aire libre. Y si estamos cerca por bastante tiempo, en transportes o centros de atención médica en especial, usar barbijo”, recordó Aliaga, que fue uno de los organizadores de la campaña Ventilar para la prevención de la transmisión del COVID-19 por aerosoles del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación junto con las científicas Sandra Cordo y Andrea Pineda Rojas.
Por el momento, el aumento de casos no se ha trasladado al número de hospitalizaciones por el COVID-19 ni en más fallecimientos. Desde la segunda semana de agosto, las internaciones habían empezado a bajar. Pasaron de 483 internaciones diarias como promedio semanal hasta 245 internaciones en la semana del 23 de octubre pasado. La semana pasado llegaron a 236 internaciones. En cuanto a los fallecimientos, desde el 16 de octubre hubo solo 1 muerte como promedio semanal a nivel nacional.
Frente a la posibilidad de que los casos de COVID-19 sigan aumentando por la propagación del coronavirus, se necesita subir la adherencia a la vacunación. En la Argentina, el 83,5% de la población se aplicó el esquema primario de vacunas. Pero con el transcurso del tiempo la protección decae y hay que darse refuerzos.
Solo el 48% de la población total fue a aplicarse el primer refuerzo o booster y el 14% asistió para recibir el segundo refuerzo. Ya también está habilitado el tercer refuerzo para mayores de 50 años, personal de salud, personas con condiciones de riesgo (comorbilidades) y que hayan recibido su segundo refuerzo hace más de 4 meses. Se acordó en el marco del Consejo Federal de Salud, compuesto por representantes de las 24 jurisdicciones nacionales,
Además de las vacunas, “es clave que las personas tengan en cuenta que la ventilación cruzada y permanente de los ambientes cerrados y el lavado de manos. Si una persona tiene gripe, COVID-19 o bronquiolitis debería estar en aislamiento para no transmitir los patógenos a otros”, dijo a Infobae la doctora Leda Guzzi, de la comisión de comunicación de la Sociedad Argentina de Infectología.
“La vacuna antigripal está incluida en el Calendario de vacunación en Argentina para los grupos con mayor riesgo de desarrollar complicaciones, como las personas mayores de 65 años, las personas gestantes, las personas con factores de riesgo, como EPOC, y los lactantes”, agregó Guzzi.
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