Los casos de COVID subieron el 110% en tres semanas: las razones detrás del aumento de los contagios

Las nuevas infecciones de coronavirus registraron una suba exponencial en la Argentina. A la par, también se acrecentó la aplicación semanal de terceras dosis. Qué dicen los expertos sobre el actual aumento de las infecciones

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Los casos de COVID pasaron de 8.387 el 17 de abril a 17.646 el último domingo 8 (Efe)
Los casos de COVID pasaron de 8.387 el 17 de abril a 17.646 el último domingo 8 (Efe)

La suba de casos de COVID-19 volvió a ser noticia en la Argentina desde hace un par de semanas.

Desde el 17 de abril, fecha en que los partes emitidos por el Ministerio de Salud de la Nación comenzaron a difundirse cada siete días, el número de nuevos contagios pasó de 8.387 a 11.307 en el segundo reporte. La cifra se elevó a 11.443 el pasado domingo 1 de mayo y el domingo 8, que relevó los casos detectados durante la pasada semana, arrojó 17.646.

En total, en las últimas tres semanas, los nuevos contagios de coronavirus se incrementaron en un 110%.

En el mismo período, en tanto, el ritmo de vacunación también creció para todas las dosis disponibles en el país: desde el 17 de abril hasta el 8 de mayo se aplicaron 59.683 primeras dosis, 185.707 segundas dosis y 1.615.390 terceras dosis, o dosis de refuerzo.

Esto significa que, en cada uno de los casos, la aplicación de vacunas aumentó 0,15%, 0,50%, y para la 3ra dosis 8,14%, respectivamente.

Desde el 17 de abril hasta el 8 de mayo se aplicaron 59.683 primeras dosis, 185.707 segundas dosis y 1.615.390 terceras dosis, o dosis de refuerzo, es decir que la aplicación de vacunas aumentó 0,15%, 0,50%, y para la 3ra dosis 8,14%, respectivamente
EFE/ Jeffrey Arguedas
Desde el 17 de abril hasta el 8 de mayo se aplicaron 59.683 primeras dosis, 185.707 segundas dosis y 1.615.390 terceras dosis, o dosis de refuerzo, es decir que la aplicación de vacunas aumentó 0,15%, 0,50%, y para la 3ra dosis 8,14%, respectivamente EFE/ Jeffrey Arguedas

Puntualmente en lo que a refuerzos se refiere, que son las dosis que más miran de cerca las autoridades de cara al incremento de casos, la variación porcentual del promedio semanal de aplicación de terceras dosis fue del 193,55%.

En la Argentina, de las 99.934.936 vacunas aplicadas, 40.739.382 corresponden a primeras dosis, en tanto 37.343.377 personas completaron su esquema inicial de dos dosis y 21.589.502 personas ya recibieron su dosis adicional o de refuerzo (esto es, el 47% de la población nacional), tal como se informa en el Monitor Público de Vacunación, el registro online del Ministerio de Salud que muestra en tiempo real el operativo de inmunización en todo el territorio argentino.

“Era sabida esta suba de casos, ya que la variante Ómicron, y principalmente BA.2, que es la que está impulsando los contagios en el AMBA, son variantes tremendamente transmisibles”, aseguró Rearte (Getty)
“Era sabida esta suba de casos, ya que la variante Ómicron, y principalmente BA.2, que es la que está impulsando los contagios en el AMBA, son variantes tremendamente transmisibles”, aseguró Rearte (Getty)

Entonces, ¿cuál es la causa del actual aumento de casos en el país? ¿Cómo se explican los nuevos contagios con la mayoría de la población protegida contra el SARS-CoV-2?

En la mirada de la directora nacional de Epidemiología e Información Estratégica de la cartera sanitaria, Analía Rearte, “las coberturas con dosis de refuerzo en grupos de riesgo (mayores de 50) son buenas en el país”. Y ante la consulta de Infobae respecto al actual aumento de contagios, postuló: “La vacunación, incluso con el refuerzo, no impide la adquisición de la infección. Para otras variantes como Delta y Gamma era mucho más efectiva para prevenir infección y en análisis preliminares que estamos haciendo se ve que para prevenir infección por Ómicron la efectividad de las vacunas es menor”.

Y si bien aseguró que no cuentan con datos sobre la nueva subvariante BA.2, que es más transmisible aún, dijo suponer “que la protección para prevenir el contagio va a ser aún menor”.

Sin embargo, para la funcionaria, “eso no tiene nada que ver con el objetivo primario desde el inicio de la vacunación, que fue y es prevenir casos graves, internaciones y muertes”. “Al tener a la población protegida, principalmente a la población mayor de 50 años, lo que se disminuye es el riesgo de hacer enfermedad grave y fallecer -enfatizó Rearte-. Por eso es que estamos haciendo tanto hincapié en la necesidad de la aplicación de las dosis de refuerzo; porque cambia mucho la protección con una dosis, sin dosis o con esquemas de refuerzos completos”.

En CABA, “el ritmo de vacunación es bueno y ahora volvió a incrementarse la aplicación diaria", confiaron a Infobae (Andina)
En CABA, “el ritmo de vacunación es bueno y ahora volvió a incrementarse la aplicación diaria", confiaron a Infobae (Andina)

En la Ciudad de Buenos Aires, uno de los distritos que más contagios presenta en las últimas semanas, el 70% de la población general recibió su dosis de refuerzo, según confiaron a este medio fuentes de la cartera sanitaria porteña.

“El ritmo de vacunación es bueno y ahora volvió a incrementarse la aplicación diaria, porque como pasó anteriormente, cuando baja la circulación viral la gente se relaja y cuando vuelven a subir los casos empiezan a tomar más turnos y es lo que está pasando ahora”, señaló la misma fuente, al tiempo que aclaró que “de todos modos, ya en la última ola del verano se vio que con gran porcentaje de población vacunada se produjeron miles de casos, y eso es porque se sabe que las vacunas pierden capacidad de respuesta para la reducción del contagio frente a las nuevas variantes”.

Rearte insistió en que “era sabida esta suba de casos, ya que la variante Ómicron, y principalmente BA.2, que es la que está impulsando los contagios en el AMBA, son variantes tremendamente transmisibles”.

Y tras asegurar que “es totalmente esperable un aumento en el número de casos”, remarcó que “lo importante es que la vacunación, a pesar de que su efectividad para prevenir la infección disminuye con las variantes, todavía sigue demostrando efectividad en la disminución de enfermedad grave y mortalidad”.

Las razones que observan los expertos ante la suba de casos

“Todavía no está claro si las nuevas subvariantes causarán otra ola global de COVID-19", asgeura una publicación de la revista Science (Reuters)
“Todavía no está claro si las nuevas subvariantes causarán otra ola global de COVID-19", asgeura una publicación de la revista Science (Reuters)

Consultado por este medio, el doctor en física, investigador del Conicet y secretario de Planeamiento de la Universidad Nacional de Hurlingham Jorge Aliaga, sostuvo que según una reciente publicación de la revista Science, “las nuevas versiones de Ómicron son maestras de la evasión inmune”.

“Todavía no está claro si las nuevas subvariantes causarán otra ola global de COVID-19. Pero al igual que las versiones anteriores de Ómicron, tienen una capacidad notable para evadir la inmunidad de las vacunas, infecciones previas o ambas, un presagio inquietante para el futuro de la pandemia y una complicación potencialmente grave para los desarrolladores de vacunas”, asegura el artículo.

Aliaga remarcó que “en Europa y los EEUU cuando esas variantes se hicieron predominantes los casos subieron, saliendo del invierno”. “Acá además estamos entrando, y el mensaje, tanto de los gobiernos como de los medios de comunicación es que ya no hay riesgo, y en consecuencia la gente no ventila los ambientes, y no usa barbijo aun estando cerca de otros y en lugares cerrados. La suba es lo esperable”, consideró el especialista.

Para Aliaga “es muy difícil a esta altura llegar a la gente que ya no se llegó”
EFE/Ernesto Guzmán Jr
Para Aliaga “es muy difícil a esta altura llegar a la gente que ya no se llegó” EFE/Ernesto Guzmán Jr

Según su observación, “la vacunación subió en las últimas semanas pero tiene que ver con que se empezaron a aplicar las cuartas dosis”. Para Aliaga “es muy difícil a esta altura llegar a la gente que ya no se llegó”, y amplió: “El que no se dio la primera dosis no se la va a dar, el que después de la primera no se dio la segunda no va a retomar el esquema; en cambio los que se dieron la tercera cuando se les ofrece la cuarta inmediatamente van a vacunarse. Eso es lo que se observa”.

Y tras destacar que “la vacunación está manteniendo reforzados a los que están dispuestos a vacunarse, pero es difícil llegar al resto, y ahí hay una ventana de riesgo”, Aliaga sostuvo que “si bien el porcentaje de población inmunizada en el país es bueno, en enero/febrero aun con la cantidad de gente vacunada que había, el pico de casos de Ómicron dejó 10.000 muertos”.

En la misma línea, para el médico infectólogo Lautaro De Vedia (MN 70640) “indudablemente es posible que haya subvariantes de Ómicron que están impulsando los nuevos contagios”. “Se preveía que para mayo o junio podía haber un pico de casos, pero lo que se está viendo de todos modos es que se trata de casos de escasa gravedad, con poca tasa de internación, bajo ingreso a unidades de terapia intensiva y por ende baja mortalidad”.

Desde el comienzo de la vacunación, el objetivo no es controlar la circulación del virus, sino disminuir las complicaciones y evitar muertes (Getty)
Desde el comienzo de la vacunación, el objetivo no es controlar la circulación del virus, sino disminuir las complicaciones y evitar muertes (Getty)

En opinión del médico infectólogo Ricardo Teijeiro (MN 58065), “se sabía que iba a haber un aumento de circulación por estas nuevas subvariantes en los meses de frío en el país porque lo mismo pasó en el hemisferio norte”.

Y en coincidencia con sus colegas aportó que “la vacuna no controla la circulación del virus, sino que disminuye las complicaciones y evita que el paciente sea gravemente afectado por la enfermedad, tenga que internarse y muera”.

“En las primeras olas, cuando había 40.000 casos diarios, morían entre 700 y 800 pacientes por día, y sin embargo en la última ola del verano causada por Ómicron tuvimos 150.000 casos por día y la mortalidad no superaba los 70 pacientes por día -graficó-. Para eso está indicada la vacuna”.

Un punto no menor que señaló la médica infectóloga María Cecilia Niccodemi (MN 105624) tiene que ver con que “en las personas que se vacunaron en las últimas dos semanas en que se aceleró el ritmo de vacunación la inmunidad se va a ver reforzada a los diez días de haber recibido la dosis”.

Desde la Unidad de Datos de Infobae afirmaron que del 3 al 17 de abril el promedio de aplicación de dosis de refuerzos había bajado un 5,37%
EFE/Bienvenido Velasco/Archivo
Desde la Unidad de Datos de Infobae afirmaron que del 3 al 17 de abril el promedio de aplicación de dosis de refuerzos había bajado un 5,37% EFE/Bienvenido Velasco/Archivo

Para ella, “lo importante es saber cómo venía la vacunación en las semanas anteriores a que empiecen a subir los casos porque se sabe que la inmunidad generada por la vacuna en huéspedes normales dura cuatro meses; sería interesante saber qué pasó en las semanas previas al 17 de abril”.

Al respecto, desde la Unidad de Datos de Infobae aportaron que del 3 al 17 de abril el promedio de aplicación de dosis de refuerzos había bajado 5,37%.

Sobre eso, Niccodemi ahondó: “Seguramente ante la baja de la circulación del virus que se tradujo en baja del ritmo de vacunación, la inmunidad disminuyó, y eso sumado a las pocas medidas de cuidado creo que eso justifica lo que está pasando ahora”.

Habrá que ver, entonces, si el actual incremento de las tasas de vacunación llega a frenar la suba de casos antes de que una nueva ola pandémica se instale en el país.

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