“La pandemia nos hizo dar un paso atrás en el diagnóstico temprano del cáncer”, dijo un prestigioso oncólogo argentino

Así se manifestó el director del Instituto Ángel Roffo, Juan Ignacio Hernández Morán. Llamó a no demorar las consultas por temor a los contagio de COVID-19. Expresó su homenaje a la Liga Argentina de Lucha contra el cáncer (LALCEC), que cumple 100 años

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la sobrevivida a cinco años
la sobrevivida a cinco años de una paciente con cáncer de mama detectado precozmente es del 90% mientras que detectado tardíamente baja drásticamente al 50% (EFE)

La Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer (LALCEC) cumple este 22 de julio 100 años. Desde 1921 la institución promueve la importancia de la prevención y el diagnóstico temprano de la enfermedad. Llegar a tiempo es la única forma de reducir la mortalidad por cáncer. A modo de reconocimiento por su trabajo en la concientización de la población en torno de esa enfermedad, el Instituto de Oncología Ángel Roffo entregó a la institución una placa conmemorativa, .

Cada año se detectan 129 mil casos nuevos de cáncer en la Argentina, y mueren anualmente más de 60 mil personas a causa de la enfermedad. Ya en 1921 Helena Larroque de Roffo, fundadora de la institución, remarcaba que la única forma de reducir la mortalidad de los pacientes oncológicos es la detección temprana. “Si bien es cierto que no todos los tipos de cáncer presentan síntomas en su fase temprana, es importante prestar atención a aquellos que sí lo hacen y anticiparse realizando los controles anuales correspondientes porque es la única manera de aumentar las probabilidades de supervivencia y la calidad de vida del paciente”, aseguró María Cristina Espil, presidenta de LALCEC.

Para el médico Juan Ignacio Hernández Morán, oncólogo y director del Instituto Ángel Roffo, ”si bien en los últimos años, gracias al continuo trabajo en la concientización de la importancia tanto de la prevención como el diagnóstico temprano de los distintos tipos de cáncer, habíamos notado un impacto positivo en la sobrevida de los pacientes y su evolución, y gracias también a las medidas tomadas en los últimos años en relación al tabaco, la importancia de los autoexámenes de mama y la concientización sobre el impacto del sol en la piel, estaban dando sus frutos, la pandemia nos hizo dar un paso atrás dejando como resultado -según estadísticas propias del Instituto Roffo- un 40% menos de consultas lo que provocó la llegada de muchas personas a la consulta con estadios más avanzados de diferentes tipos de cáncer, siendo una vez más el cáncer de mama el más notorio pero no el único”.

En este sentido, Hernández Morán precisó que “debemos ser conscientes de que la sobrevivida a cinco años de una paciente con cáncer de mama detectado precozmente es del 90% mientras que detectado tardíamente baja drásticamente al 50%. Es muy importante que volvamos a tener nuevamente los niveles de chequeo previos a la pandemia, ya que si bien este año estamos mejor que al comienzo de la pandemia todavía falta para alcanzar los niveles de controles y chequeos que teníamos antes de la llegada del COVID-19”. El Instituto de oncología Ángel Roffo tiene como objetivos no solo el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades oncológicas sino también la prevención del cáncer. “Por eso, instituciones como LALCEC son aliadas a la hora de concientizar y ayudar a llevar a la población este importante mensaje que es la detección temprana”, agregó el Dr. Hernández Morán.

100 años sosteniendo un mensaje

Durante toda su vida Helena Larroque -fundadora de LALCEC- estuvo vinculada a la defensa de la salud de la población. Estudió medicina y trabajó a la par de su marido, el doctor Ángel Roffo, cuando registró uno de los problemas que se presentaban en los pacientes con cáncer que llegaban al centro de salud: en la mayoría de los casos, cuando se presentaba el diagnóstico, ya era tarde. A principios de siglo las tecnologías para detectar el cáncer eran precarias, sin embargo, con chequeos médicos podían prevenirse algunas de las complicaciones. Si bien la mortalidad por cáncer en Argentina comenzó a descender de forma significativa a partir del 1980, ya en su época Larroque reconoció la importancia del tiempo en la lucha contra la enfermedad.

Pedirle a la comunidad que
Pedirle a la comunidad que retome sus controles y chequeos médicos con sus clínicos, el control ginecológico anual, los controles de autoexamen mamario y los que correspondan (Reuters)

“Era una mujer con gran humildad, una luchadora incansable. En ese momento que una mujer saliera a visibilizar una enfermedad no era habitual”, señaló Graziella Donnet, histórica voluntaria de la institución y ex presidenta de LALCEC. Convencida de que para reducir las muertes por cáncer y mejorar la calidad de vida de los pacientes tenía que educar a la población, Larroque fundó la Liga. “Eran un equipo de voluntarios que querían lograr que la gente hablara sobre cáncer, sobre los síntomas, las formas de prevenir, perder el miedo a nombrarlo. Hoy podemos decir que fue ella quien logró instalar la palabra prevención en boca de todos”, agregó Donnet.

“En el marco de un importante aniversario como son los 100 años de LALCEC, queremos recordar el trabajo de Helena Larroque de Roffo, una extraordinaria mujer que a pesar de haber dejado la carrera de medicina en su sexto año fue un motor esencial que hizo posible edificar y equipar el Instituto gracias a las donaciones que recibía. También debemos reconocer su importante aporte con la creación de la escuela de enfermería, un recurso clave para la medicina. Sin duda nuestro mejor reconocimiento para ella será pedirle a la comunidad que retome sus controles y chequeos médicos con sus clínicos, el control ginecológico anual, los controles de autoexamen mamario y los que correspondan. No debemos dilatar, ni atrasar las consultas por miedo al contagio del coronavirus ya que las instituciones médicas públicas y privadas toman las precauciones necesarias para que haya el menor riesgo posible”, puntualizó el Dr. Juan Ignacio Hernández Morán.

A lo largo de un siglo, los y las integrantes de LALCEC encontraron distintas maneras de funcionar como puente entre las demandas de la sociedad y las respuestas del Estado. Incluso dando respuestas concretas en el acceso a la salud, como sucede con el mamógrafo móvil, que desde 1999 ofrece mamografías gratuitas a mujeres en edad de riesgo y sin cobertura médica de cada rincón del país, o bien la iniciativa “Chau Pucho”, un equipo que empezó de la mano de un grupo de personas que estaban decididas que dejar de fumar es la forma más efectiva de prevenir y evitar el cáncer de pulmón. “En todas las campañas la clave es el seguimiento. Si vos tirás la bomba y escondés la mano, el diagnóstico no tiene sentido”, detalló Espil y relató: “nos adaptamos a las épocas y a los cambios científicos que ha habido. Y no nos cansamos de trabajar porque vemos los buenos resultados que tenemos”.

La posibilidad de prevenir

Existen al menos seis tipos
Existen al menos seis tipos de cáncer que, detectados a tiempo, tienen un mejor pronóstico y mayor probabilidad de sobrevida. Estos son el cáncer de pulmón, próstata, piel, útero, mama y colon. Salvo el cáncer de pulmón que requiere una tomografía de baja radiación (Getty)

Si bien existen cerca de 200 tipos de cáncer en el mundo, hay una serie de ellos que históricamente tienen más incidencia en las sociedades, es decir que afectan a un número mayor de personas. “Con la pandemia hubo un retroceso muy grande en cuanto al acceso a los chequeos correspondientes para prevenir diagnósticos avanzados de cáncer. Nosotros en medio del confinamiento nos animamos a decir: salí de casa, andá al médico. Porque así como Helena supo ver hacia adelante, sentíamos que era necesario mirar hacia el futuro”, describió Donnet.

Existen al menos seis tipos de cáncer que, detectados a tiempo, tienen un mejor pronóstico y mayor probabilidad de sobrevida. Estos son el cáncer de pulmón, próstata, piel, útero, mama y colon. Salvo el cáncer de pulmón que requiere una tomografía de baja radiación para un grupo de riesgo específico, todos los demás tienen estudios de diagnóstico accesibles y poco invasivos que nos sirven para detectarlo en sus primeros estadíos ya que muchos de estos son asintomáticos en dichas etapas. En ciertos tipos de cáncer, como el de próstata, colon y mama, la edad es un factor determinante, por lo cual es central la realización de chequeos anuales como la mamografía a partir de los 40 años para todas las mujeres. Por otro lado, a partir de los 50 años todos deben realizarse una colonoscopia y es primordial para los hombres incorporar a su chequeo el examen de tacto rectal y análisis de PSA en sangre.

Desde LALCEC remarcan que llamar al cáncer por su nombre se trata de entender que la enfermedad existe, y que cuánto más atención le pongamos a nuestra salud, más cerca estaremos de hacer la diferencia y reducir la mortalidad del cáncer en la sociedad.

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