Sólo el 6% de los menores de 60 con comorbilidades recibió una vacuna contra el COVID-19 en la Argentina

Según los últimos datos disponibles en el Monitor Público de Vacunación, el registro online del Ministerio de Salud que muestra en tiempo real el operativo de inmunización en todo el territorio argentino, del total de 7.557.986 vacunas administradas en el país, 357.170 corresponen a personas de 18 a 59 años con factores de riesgo.

Si se toma en cuenta que en la Argentina ese grupo está conformado por 5.653.000 personas, las inmunizadas contra el COVID-19 alcanzan poco más del 6%. Eso significa que el 94% de la población entre 18 y 59 años de edad con factores de riesgo aún no recibió ninguna dosis de algunas de las vacunas autorizadas en el país.

Y si bien tal lo establece el Plan Estratégico de Vacunación dispuesto por el Ministerio de Salud de la Nación, este grupo se ubica en el quinto lugar de priorización luego del personal de salud, los adultos mayores de 70 años, los adultos de 60 a 69 años y el personal estratégico (docentes, personal no docente, fuerzas de seguridad, etc), la segunda ola de la pandemia en la Argentina muestra que el 76% de los nuevos contagios totales se encuadra en ese rango de edades y muchos de ellos desarrollan cuadros graves de la enfermedad.

A esto se le suma, además, que se trata de la población laboralmente más activa, lo cual exige a estas personas a salir a diario de sus casas a cumplir con sus obligaciones.

“El Plan Estratégico de Vacunación es nacional, es un lineamiento que la Nación bajó a cada jurisdicción, que es la encargada de implementarlo -explicaron a Infobae fuentes de la cartera sanitaria que dirige Carla Vizzotti-. Ahora, cómo lo hacen, o con qué priorización lo llevan adelante es incumbencia de cada provincia, en función de la disponibilidad de vacunas y la situación epidemiológica, entre otros factores”.

La aclaración vino a cuenta de que, por ejemplo en la Provincia de Buenos Aires, “la vacunación a menores de 60 años con comorbilidades en algunos distritos ya arrancó aunque oficialmente la campaña no se lanzó”, confiaron desde el Ministerio de Salud bonaerense.

En ese distrito compuesto por 135 municipios “ya hay casi tres mil vacunados de los 900 mil inscriptos”.

Y tras señalar que “en función de la cantidad de población y las dosis recibidas, algunos municipios, como Tordillo o General Guido por ejemplo ya tienen alrededor del 80% de la población inscrita vacunada”, desde la cartera sanitaria bonaerense destacaron que “los mayores de 70 y mayores de 60 con enfermedades de riesgo ya están casi en su totalidad inmunizados”. Lo mismo ocurre con los docentes, muchos de los cuales fueron inmunizados con la vacuna de Sinopharm, que recién arribada al país no estaba autorizada para mayores de 60 y se avanzó con ese grupo.

La campaña en la Provincia continuará con los mayores de 60 sanos y las personas de 18 a 59 años (con cortes cada década) con factores de riesgo.

En este contexto, en Buenos Aires creen que “el análisis del porcentaje de personas inmunizadas debiera hacerse sobre la población dispuesta a vacunarse, ya que al no ser obligatoria la vacuna, estimar el alcance de la campaña sobre el total de la población sería un error”.

A su turno, desde el Ministerio de Salud porteño informaron a Infobae que en la Ciudad “se sigue el plan estratégico de vacunación de Nación, fase a fase”. En ese sentido, aseguraron que van por la tercera (personas entre 60 y 69 años) y que el grupo etario de 18 a 59 es la quinta, después del personal estratégico.

“Es clave avanzar en la vacunación de ese grupo; en realidad todos los grupos establecidos como prioritarios son los que tenían mayor riesgo de mortalidad”, consideró el médico infectólogo Lautaro De Vedia (MN 70640), para quien “si bien en general los adultos mayores de 60 son los que mayormente se asocian con comorbilidades como diabetes o hipertensión, entre las personas de menor edad también hay quienes las padecen y debieran ser inmunizados”.

El experto del Hospital Muñiz y ex presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) concluyó: “Es importante poder avanzar y totalizar las 15 millones de personas que desde el inicio de la campaña fueron consideradas prioritarias, que es alrededor del 30% de la población; es clave llegar mínimo a ese porcentaje para disminuir la circulación del virus y la mortalidad. Eso no alcanzaría para lograr inmunidad de rebaño, pero englobaría a los principales grupos de riesgo”.

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