Un infectólogo advirtió que sólo la vacunación rápida de la población puede contrarrestar el impacto de las nuevas cepas de COVID-19

A raíz de las demoras en la provisión de vacunas, Roberto Debbag (MN 60253) consideró necesario que el Gobierno informe sobre los acuerdos suscritos con los laboratorios y conocer el cronograma de entrega de las dosis

Guardar
El doctor Emilio Macia, de
El doctor Emilio Macia, de 52 años, recibe una inyección de la vacuna Sputnik V (Gam-COVID-Vac) contra la enfermedad por coronavirus (COVID-19) en el hospital Dr. Pedro Fiorito de Avellaneda, en las afueras de Buenos Aires, Argentina. 29 de diciembre de 2020. REUTERS/Agustín Marcarián

La aparición de nuevas cepas del coronavirus es una preocupación en todo el mundo”, advirtió hoy el médico infectólogo Roberto Debbag (MN 60253). Por ello, consideró, es necesario una “rápida vacunación de la población” para evitar esta circulación “y el huracán de lo que podría ocurrir con la infección y las nuevas variantes”.

A raíz de las demoras en la provisión de las dosis para el plan de vacunación instrumentado por el Gobierno, el profesional consideró necesario que se informe sobre los acuerdos suscritos con los laboratorios y conocer de manera fehaciente el cronograma de entrega de las dosis. “Es un problema de los acuerdos alcanzados por los que deciden en la Argentina, no en el mundo; el problema de la producción mundial es por mayor cantidad, no por disponibilidad si no tengo acuerdos”, afirmó en radio Mitre.

“En Argentina sabemos que tenemos circulación del virus del Reino Unido, pero en las próximas semanas va a haber circulación de otras variantes”, señaló, y agregó: “Ya tendría que estar en Argentina Sinopharm, que es una vacuna inactivada, requiere dos dosis, pero es más costosa. Es la que está recibiendo Chile”.

El médico infectólogo Roberto Debbag
El médico infectólogo Roberto Debbag

En esta línea, y en relación a las nuevas cepas del virus, expresó que los laboratorios de Pfizer, Moderna y AstraZeneca están “generando vacunas más especificas que servirán de refuerzos de las vacunas ya administradas, esto abre un panorama de esperanza aún más”.

“Lo que uno quiere visualizar, sin miradas políticas, sin geopolítica, solo en evidencia, es tener acuerdos de vacunas y saber cronogramas de entregas de vacunas, para que las personas que necesitan puedan más rápidamente acceder y para que así se disminuya la circulación para sacar la preocupación que tenemos”, destacó.

Sobre esta problemática se refirió en las últimas semanas Anthony S. Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los EEUU: “Necesitamos redoblar las medidas de salud pública. Cuanto menos se propague un virus, menos mutará”. Y amplió: “Es necesario vacunar a la mayor cantidad posible de personas con las vacunas actuales disponibles y prepararse para la eventualidad potencial de que se tengan que actualizar en el futuro”.

El propio Debbag, consultado el por Infobae el pasado sábado, recalcó que “el desafío central hoy en día es que el virus sigue mutando y circulando y el potencial riesgo es que se transforme en otro virus”, y analizó que “esa es una carrera que está teniendo el virus en sí mismo, modificándose y generando variantes de mutación cuya meta final es transformarse en otro virus, que ojalá no ocurra, pero lo cierto es que el SARS-CoV-2 va adquiriendo velocidad en la generación de nuevas variables”.

Por otro lado, con relación al plan de vacunación y a pesar de los contratiempos y las promesas incumplidas, el Gobierno confía en la producción de la Sputnik V. Nuestro país ya debería tener 5,3 millones de dosis de la vacuna rusa de acuerdo a los contratos firmados pero hasta hoy apenas cuenta con un total de 820 mil vacunas

Desde Moscú, el gobierno de Putin reconoció que el retraso es unilateral y se comprometió a aumentar la capacidad de producción “por la alta demanda”. En el último cargamento que arribó a Ezeiza, por caso, se había dicho que llegarían 600 mil dosis y finalmente fueron solamente 220 mil, más otras 20 mil dosis destinadas a Bolivia.

También siguen las negociaciones con China para obtener 1 millón de dosis de Sinopharm, la vacuna que elabora el Grupo Farmaceútico Nacional Chino, organismo estatal del país asiático, lo más pronto posible. Sería parte de un lote de 30 millones de dosis, de las que 5 millones se iban a entregar antes de que termine febrero. 

También es incierto el panorama sobre el Mecanismo COVAX, un fondo firmado por 92 países que garantizaría la provisión de 2 mil millones de vacunas hacia el final de 2021, cifra que incluye un “mínimo de 1.300 millones de dosis” a distribuir entre los 92 países firmantes. Allí la prioridad es de las naciones más pobres del planeta, y en ese grupo no está incluida Argentina, que pensaba recibir 9 millones de dosis en el primer trimestre de 2021.

Seguí leyendo:

Guardar