¿Cómo celebraremos las Fiestas? Tres expertos comparten sus protocolos para un fin de año seguro

La situación epidemiológica en el país muestra una disminución de casos de COVID-19, lo que habla de una curva lenta pero sostenidamente en descenso. En ese contexto, se acercan las Fiestas de fin de año, momento por excelencia en el que las familias o los grupos de amigos se reúnen alrededor de una mesa para festejar la Navidad, y una semana después, a despedir el año.

En Europa, que atraviesa la segunda ola de la pandemia, ya adelantaron en algunos países que el máximo de personas recomendado en cada reunión será de seis.

Si bien en la Argentina las autoridades sanitarias aún no se manifestaron al respecto, Infobae consultó a tres reconocidos especialistas para conocer sus recomendaciones al momento de reunirse a celebrar.

En la zona el AMBA, que pasó a comienzo de este mes de aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) a distanciamiento social preventivo y obligatorio (DISPO) comenzó un período de mayores aperturas y flexibilidades. Pero, ¿están dadas las condiciones para reunirse? ¿Cuál sería la manera más segura de hacerlo?

Para comenzar, la consulta a los expertos apuntó a conocer qué se sabe acerca de la transmisión del SARS-CoV-2 en temperaturas como las que tendremos en diciembre.

La médica epidemióloga Ángela Gentile (MN 49908) precisó que “el virus se transmite eficazmente tanto en situaciones de clima frío como cálido y así ya lo demostró: es un virus pandémico, y aunque puede ser que a futuro sea un virus estacional del invierno y con una vacuna anual se controle todavía se está lejos de eso”.

“El virus se transmite muy bien independientemente de la temperatura; lo que es diferente es que en épocas de calor hay más actividades al aire libre y se sabe que en esos ambientes la transmisión es menor, pero no en sí por el calor y la humedad, de hecho se comenzó a transmitir aquí en marzo, y lo hizo también en el norte de Brasil, que la temperatura es cálida -agregó la experta-. Nos ha demostrado que no es un condicionante la temperatura, al menos mientras haya una distribución pandémica”.

En la misma línea, el médico infectólogo Roberto Debbag (MN 60253) destacó que “el virus se adapta a todas las temperaturas y ya se vio en brotes en países como República Dominicana, por lo que lo que hay que tener en claro es que cuanto más encerrados, más cerca el uno del otro y no usando barbijo se está, es mayor el riesgo de transmisión”.

El vicepresidente de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica remarcó que “desde el punto de vista epidemiológico, en todo el país hay una disminución en la cantidad de casos y teóricamente no se espera tener ningún repunte en la actividad de transmisión”. En ese sentido, para él, “las reuniones para fin de año pueden llegar a armarse de manera segura”.

“Para unas Fiestas seguras creo que hay que tener en cuenta algunas cosas: una es antes de las fiestas, decidir el lugar donde se va a reunir y que en lo posible no juntar más de dos o tres núcleos familiares y que no haya más de 10 a 12 personas”, planteó Debbag, para quien “mientras más núcleos haya, hay más probabilidad de dificultar el control”.

“Una vez que decidimos quiénes son, unos cinco a siete días antes hay que hablar y establecer que hay que tener comportamientos seguros, no hacer en esos días previos muchas colas para comprar alimentos, hacerlo de manera ordenada, que si hay que hacer colas para comprar regalos no se compren o se utilicen medios electrónicos para realizar las compras -recomendó-. O sea, evitar o reducir los contactos en esa semana previa para, de esta manera, transformarse todos los concurrentes en personas seguras”.

Por otro lado, “antes de llegar al día de la reunión, hay otra cuestión a tener en cuenta y es que no puede ocurrir como otros años, cuando uno se encontraba con alguien dos o tres días antes y lo invitaba a pasar las Fiestas con su familia. En esta oportunidad, se decide 15 días antes quiénes van a ser los comensales y no se adicionan invitados”.

“La manera más segura de reunirnos en las Fiestas y teniendo siempre en cuenta que el aire libre minimiza el riesgo es armar burbujas de diez personas -no más- en las que se mantenga el distanciamiento, en lo posible que se pueda usar barbijo la mayor parte del tiempo, y que haya mucho lavado de manos y por supuesto que si una persona de las que va a participar de la reunión que está enferma o tiene síntomas inmediatamente dé la alerta y no concurra”, aportó Gentile.

Para el médico infectólogo y presidente de la Sociedad Argentina de Infectología Omar Sued (MN 91262), “la manera más segura es hacer el máximo esfuerzo para reducir al mínimo el número de personas en la reunión. Lo ideal sería pasar las Fiestas con el grupo familiar con el que se convive, pero eso no es muy real porque es el momento en que el resto de la familia se junta”.

Consultado sobre la manera de incluir a los adultos mayores en la reunión sin poner en riesgo su salud, Debbag consideró que “las personas con factores de riesgo pueden estar en la reunión pero van a tener que ser cuidados”. “Posiblemente de las 10/12 personas que concurran, dos o tres van a haber tenido la enfermedad, y por ende están protegidos -señaló-. Esas serán las personas que durante la reunión van a ser los encargados de servir la comida, levantar la mesa, y son quienes pueden estar cerca de las personas de riesgo asistiéndolas”.

Además, el experto recomendó que “todas las personas permanezcan con el barbijo la mayor parte del tiempo posible, tapándose adecuadamente la nariz y la boca y distanciadas si no pertenecen al mismo grupo familiar”. “Si son dos grupos familiares pueden estar juntos pero no mezclados, por ejemplo, en una mesa larga, en una punta se pueden sentar los integrantes de un grupo familiar y en otra otro grupo”, agregó.

“Los barbijos se guardan en el bolsillo o en una bolsita individual al momento de la comida -continuó Debbag-. Se asigna una persona para repartir los platos y levantar la mesa (si nadie tuvo la infección, el que lo haga tendrá que tener barbijo) y desde luego que durante la comida lo ideal es que no se compartan vasos ni platos (se identifican los vasos)”.

Y tras aconsejar que “una vez en la sobremesa, se intentará que la reunión no se extienda mucho después de la comida”, el infectólogo sugirió “en preferencia que las reuniones sean más cortas y luego del brindis finalice”.

“Por supuesto que si alguien el día de la fiesta tuvo algún síntoma o está esperando el resultado de una PCR o tuvo un contacto con alguna persona que ha tenido infección por supuesto que no debe concurrir”, sumó.

Sued, en tanto, aportó algunos consejos extra que se pueden tener en cuenta al momento de la reunión, que incluyen:

- Evitar todas las personas que no sean imprescindibles en esos encuentros.

- Si hay una persona mayor de muy alto riesgo y sí o sí va a asistir, avsiarle a todos los que van a ir que minimicen al máximo el riesgo los siete días anteriores, es decir que si hay gente que trabaja en comercios que trate de tener la menor exposición posible, que si es gente que suele juntarse con amigos no lo haga durante esa semana previa para evitar contagiarse y estar asintomáticos.

- Si existe la posibilidad, que las personas cuando se junten lo hagan al aire libre o en el patio, que estén lo más separados posibles y eviten los besos, los abrazos, así como estar demasiado cerca.

- El lavado de manos debe ser frecuente.

- Recordarle a todos los familiares que ante el mínimo síntoma de resfriado, tos, dolor de garganta, dolor de cabeza no vayan a la fiesta.

- Avisar a todos los que hayan compartido la reunión que si en los días posteriores tienen algún síntoma avisen para que se pueda hacer el diagnóstico rápido.

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