Luego del exitoso y revelador simposio conjunto entre el Hospital Universitario Austral de Argentina y la Universidad de Navarra de España en el que dos médicos contaron sus experiencias al frente de la línea de atención, se llevó a cabo una nueva edición de este formato en el que prestigiosos profesionales del Hospital Universitario Seúl Soon Chun Hyang de Corea del Sur compartieron sus vivencias con los profesionales de la salud del Hospital Austral y con un numeroso grupo de participantes que siguió atento la hora y media que duró la conferencia.
El panel de expertos fue presentado por el doctor Fernando Iúdica, director médico del Hospital Universitario Austral y por la doctora Wanda Cornistein, jefa de control de infecciones del Hospital Austral. Abrió el simposio el embajador de Argentina en Corea, Alfredo Bascou, quien agradeció a ambas instituciones: “Estoy seguro que este encuentro representará un paso importante para poder entender más sobre el COVID-19 y que esta sea la primera de muchas colaboraciones entre ambos hospitales”.
El director médico, doctor Iúdica, detalló las características del Hospital Austral: “tenemos 21 años de historia, es un hospital universitario de tercer nivel con 300 camas, 24 de cuidados intensivos y 20 de cuidados críticos pediátricos”.
Luego presentó al doctor Tae Hyong Kim, profesor, internista y especialista en infectología, quien se refirió a cómo desde el primer caso COVID-19 positivo, prácticamente en ocho días instrumentaron medidas de detección de pacientes sintomáticos a través de la técnica PCR (prueba de reacción en cadena de la polimerasa, estos testeos buscan el virus en el ADN y arrojan un resultado sobre si la persona tiene o no COVID-19), se invirtió en la realización de estudios diagnósticos multicéntricos, con camiones que paraban en distintos lugares para testear a las personas.
El doctor Kim también compartió lo que para él fue la clave para poder controlar el nivel y la curva de contagios en Corea del Sur: “Tenemos desde el día cero una aplicación donde se hacía una guía de donde circulaban los ciudadanos, que lugar de testeo debían acercarse para no ir a los hospitales”.
“A su vez fue muy importante nuestro circuito muy controlado de manejo de pacientes sospechosos, o confirmados, sintomáticos, con neumonía, en lugares con presión negativa, áreas de aislamiento específicos y todos en esas áreas con equipos de protección personal”.
Tae Hyong Kim explicó que Corea aprendió del manejo de situaciones de crisis tales como el accidente de un ferry en 2014 en Seúl en el que murieron 304 pasajeros de un total de 476, la mayoría jóvenes estudiantes de un colegio secundario de la ciudad de Ansan. Según el experto, “allí aprendimos lo que respecta al manejo del estrés post traumático”.
Asimismo, en 2015, sufrieron la consecuencia de la epidemia por MERS (síndrome respiratorio de Oriente Medio), esta inusual infección respiratoria. Según Kim, “allí se pudo fortalecer el sistema de hospitales”. Para él, “hay dos males de los médicos coreanos: el servicio nacional de seguros de salud y el servicio de revisión y evaluación de seguros de salud, porque a través de estas dos organizaciones cuentan con un limitado presupuesto para el área, tenemos fondos muy limitados”. Sin embargo, especificó que “el 90% de los hospitales en Corea del Sur son privados, lo que hace que funcione un sistema híbrido que beneficia al sistema de salud”.
Respecto a la epidemiología del COVID-19, Kim sostuvo: “todas las mañanas, observamos un panel de control con el número de casos, lo que nos ayuda a comprender dónde estamos parados, y lo que nos ayudó a tomar medidas a tiempo”.
El panel de expertos especificó que en Corea del Sur, según las últimas cifras oficiales, cuenta con 10.801 casos confirmados, de los cuales 1.332 se encuentran aislados y con respecto al número de muertos precisaron que son 252, 30 fallecidos menos que en Argentina.
Kim especificó que gracias a las investigaciones realizadas en Corea del Sur, pudieron determinar que el periodo de incubación del COVID-19 en los pacientes correspondía a 14 días, y en un promedio de 11.5 días en el 97,5% de los casos. Asimismo, manifestó que “la transmisión en pacientes asintomáticas no es dominante, es sobreestimada, aunque existe”.
Para el médico internista, “los principales factores de riesgo asociados al nuevo coronavirus en Corea del Sur son la edad por encima de los 65 años, el antecedente de enfermedades cardiovasculares en un 59%, la diabetes en un 30%, la hipertensión, enfermedades respiratorias (13%), distintos tipos de cáncer (13%), enfermedades crónicas del riñón (9%) y obesidad".
Luego fue el turno de la doctora Eun-Joo Choo, de la división de enfermedades infecciosas del departamento de Medicina Interna del Hospital Universitario Seúl Soon Chun Hyang de Corea del Sur. En su exposición, se centró en el número y manejo de casos en el país asiático. “Testeamos a 633 mil personas, con un rango de positividad del 1,7%”.
“Estamos muy cerca de China, epicentro de esta pandemia, por lo cual comenzamos a prepararnos para la llegada del virus SARS-CoV-2 muy rápidamente; es por esto que el 22 de enero nos reunimos por primera vez”, explicó Choo, quien precisó que el primer caso lo tuvieron el 21 de enero, de una turista china que había estado en Japón, viajó a Corea con síntomas y finalmente dio positivo en la prueba de PCR. A partir de ese antecedente, comenzaron a tener reuniones diarias en el hospital, y grupos de comunicación a través de redes sociales.
“El programa de respuesta incluyó importantes estrategias de control y prevención de esta enfermedad infecciosa, como así también entrenar a todo el personal en la nueva modalidad de trabajo y equipamientos de protección personal”, detalló la doctora Choo.
Para eso cerraron todas las entradas del hospital, y establecieron puntos de testeo fuera de la institución médica, evitando el ingreso de personas al mínimo e imprescindible. También reforzaron las medidas de higiene, exigiendo a todos los ingresantes el minucioso lavado de manos. Establecieron asimismo zonas de aislamiento, debidamente equipadas, con equipos portátiles de rayos x.
Choo especificó que en el hospital de Seúl tuvieron el primer paciente COVID positivo el 30 de enero.
El Hospital Universitario Seúl Soon Chun Hyang de Corea del Sur cuenta con alrededor de 3 mil camas agrupadas en 4 sedes, 750 en Seúl, 900 en Bucheon, 1.000 en Cheonan y 450 en Gumi.
En diálogo con Infobae, la doctora Wanda Cornistein, jefa de control de infecciones del Hospital Austral, compartió que de la conferencia conjunta pudo concluir que “el uso de los equipos es similar al nuestro aquí en Argentina, es decir los protocolos que se llevan adelante con pacientes COVID-19, en Corea del Sur solamente implementan el uso de equipos completos para entrar a las zonas de aislamiento y fuera de allí los barbijos quirúrgicos para circular, como así también cuentan con un gran control de la circulación de la gente e importante detección de los pacientes sintomáticos”.
“Los médicos en Corea del Sur nunca dejaron de operar, ni de llevar adelante su actividad habitual en la comunidad, sino más bien testearon en la calle masivamente, que tenían síntomas importantes o leves”, agregó.
Participaron también del panel de expertos por parte del Hospital Universitario Soon Chun Hyang: Eun Jung Lee, profesora, internista y especialista en infectología; Se Yoon Park, profesor, internista y especialista en infectología y Byung Wook, profesor, miembro del departamento de medicina familiar. Del Hospital Universitario Austral estuvieron presentes e hicieron preguntas a los expositores el doctor Gustavo Podestá, jefe de trasplante hepático y cirugía hepatobiliar, director del departamento de cirugía; el doctor Matías Tisi Baña, especialista en medicina interna, profesor adjunto de metodología de la investigación y fisiopatología, jefe de clínica médica y la magister Alejandra Parisotto, licenciada en enfermería, magister en comunicación y directora de enfermería.
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