Al opiáceo más adictivo y vendido en Estados Unidos se lo conoce en la calle como Blue, Hillbilly o Kicker. En los 2000 una droga similar del grupo de los opioides, pero con los mismo efectos, era la hidrocodona en su marca Vicodin, que ganó polaridad ya que era la que se autoadministraba Dr. House en la serie homónima para calmar los fuertes dolores en su pierna.
Ahora, la droga oxycodona, que es presentada en distintos formatos de marcas, en los últimos años se transformó en un verdadero dolor de cabeza para los médicos y agentes sanitarios reguladores de las drogas contra el dolor.
Es que el abuso de este poderoso analgésico a partir de la fuerte adicción que genera conduce todos los años a miles de muertes en ese país y en todo el mundo. También en la Argentina.
"Las muertes por sobredosis superan las muertes por VIH, accidentes automovilísticos o violencia armada en cada uno de sus puntos más altos", comparó The New York Times. Los datos del CDC "también muestran que el incremento de muertes se corresponde fuertemente con el uso de opioides sintéticos como el fentanilo". Los analistas que consultó el periódico observaron que hay tres factores importantes a interpretar en relación a esto: se recetan menos opioides pero sube el consumo ilegal; cada vez más estadounidenses usaron opioides y las drogas tienen mayor capacidad letal, con lo cual un pequeño error del consumidor lo lleva a la muerte.
Un grupo muy afectado por la crisis de los opioides son los nativos americanos. Según un estudio del CDC, en este segmento étnico las muertes en las que estuvo involucrado un opiáceo aumentaron más del 500% entre 1999 y 2015, mientras que en la población en general esa cifra se ubicó en el 200% en ese período.
La denuncia presentada en el Tribunal Federal del distrito sur de Nueva York contra Purdue Pharma establece que "ocho integrantes de una sola familia hicieron la opción de elegir aquello que ha contribuido a la epidemia del opio y esta nación encara una adicción sin precedentes a los opiáceos que fue iniciada y perpetuada por esta familia".
En Argentina, la oxycondona se vende con el nombre comercial de Oxycontin, del laboratorio extranjero Mundipharma Pharmaceuticals SRL, que en 2016 se instaló en nuestro país.
El 17 de julio de 2018 la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó la comercialización del medicamento mediante la la Disposición ANMAT N° 5743/09 y el Expediente N° 1-47-1110-763-17-8 del registro interno.
Por Certificado N° 46.428, se autorizó la inscripción en el Registro de Especialidades Medicinales de esta Administración Nacional, del producto denominado OXYCONTIN/ OXICODONA CLORHIDRATO 10 mg – 20 mg – 40 mg; forma/s farmacéutica/s: comprimidos recubiertos de liberación prolongada, que es importado desde EEUU a la República Argentina.
Desde la ANMAT, confirmaron a Infobae que la droga está autorizada en la Argentina como analgésico y que se ofrece en comprimidos de 10, 20 y 40 mg. Está indicado para el tratamiento del dolor moderado a severo y se vende bajo receta oficial. También indicaron que en el sitio oficial del organismo se informa sobre sus componentes y efectos adversos.
En la página de la ANMAT, se aclara que "el Vademecum Nacional de Medicamentos (VNM) es una fuente oficial de actualización permanente, en la que se publican todos los medicamentos actualmente comercializados en la República Argentina y donde el usuario puede consultar el precio sugerido, entre otros datos de interés".
También se precisa que "esta herramienta ofrece a toda la comunidad, prescriptores, dispensadores, pacientes y consumidores la posibilidad de corroborar que, sobre el medicamento prescripto y/o dispensado, no pesan restricciones de uso y/o comercialización, y si se trata de un producto alcanzado por el Sistema Nacional de Trazabilidad de Medicamentos".
Marcelo Peretta es doctor en Farmacia y Bioquímica y secretario general del Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos en Argentina y en diálogo con Infobae, explicó que la oxycodona es un analgésico potente, una sustancia para mitigar dolores fuertes.
"Se utilizan en cirugías y también en tratamientos ambulatorios y post quirúrgicos. Se trata de un opiáceo que te relaja y hace que las teminaciones nerviosas no transmitan el dolor. En resumen, te seda, relaja y le cambia el humor al paciente de una sensación dolorosa a placentera", agregó el especialista al describir la droga.
Pero enseguida lanzó una fuerte advertencia: "Se trata de un producto altamente adictivo que en Argentina es fácil de conseguir bajo receta. El peligro radica en que de las 3.000 muertes que se producen en el país por consumo de opiáceos, el 10 por ciento, es decir, 300 casos corresponden sólo a esta droga. Son 300 personas que mueren todos los años por la oxycodona".
Y agregó: "La ANMAT dice que no tienen reporte sobre los efectos secundarios de los usuarios de oxycodona en Argentina. Pero desde hace 10 años que se vienen denunciando los casos de abuso. Y ahora con la demanda gigante que se está llevando a cabo en EEUU, nuestra agencia de control o la Secretaría de Salud de la Nación no hacen nada y no existe ningún tipo de control sobre su comercialización y venta".
El experto en fármacos también hizo un mea culpa respecto a los médicos y farmacéuticos que no controlan la penetración de esta droga en la sociedad. "Los farmacéuticos no estamos acostumbrados a denunciar los efectos adversos de los medicamentos. Se debe completar ante la ANMAT una ficha de narcovigilancia. Pero que no haya reporte no significa que tengamos problemas. Ni que las autoridades deban actuar de oficio ante este gran problema sanitario", precisó Peretta.
Y resaltó: "Es triste la respuesta de la ANMAT que frente a la grave denuncia múltiple en EEUU, no se preocupe. Aquí hay causas judiciales de narcotráfico vinculadas al tráfico de oxycodona a otros países, ya que aquí es más fácil conseguirlo. Se trata de una problemática de salud pública de la que las autoridades deben ocuparse. La gente se convierte en adicta y se muere".
Ficha del OxyContin
-El OxyContin se receta legalmente para aliviar dolores moderados a severos ocasionados por lesiones, bursitis, neuralgia, artritis y cáncer.
-Las personas abusan del OxyContin por los efectos de euforia que produce, similares a los de la heroína.
-El OxyContin se comercializa en forma de tabletas de 10, 20, 40, u 80 miligramos (mg). Las tabletas vienen en diversos colores y tamaños según la dosificación. Las tabletas llevan las letras OC impresas por un lado y la cantidad de miligramos del lado opuesto.
-Las tabletas de OxyContin son de liberación controlada y deben tragarse enteras. Para anular el efecto de liberación controlada, los que hacen uso indebido de la droga las mastican o las pulverizan. Las tabletas pulverizadas se pueden aspirar o disolver en agua e inyectarse.
-Personas de todas las edades abusan del OxyContin. Datos de la National Household Survey on Drug Abuse (Encuesta Nacional de los Hogares acerca del Abuso de Drogas) indican que cerca de un millón de residentes de los Estados Unidos de 12 años de edad o más usaron OxyContin con fines no médicos al menos una vez en la vida.
-El abuso del OxyContin entre los estudiantes de la enseñanza media presenta un problema especial. El 4 por ciento de los estudiantes de último año de la enseñanza media en los Estados Unidos usaron la droga al menos una vez en el pasado año, según la encuesta Monitoring the Future (Vigilancia del Futuro) realizada por la Universidad de Michigan.
-Las personas que abusan del OxyContin se exponen a desarrollar tolerancia hacia la droga, lo que significa que deben administrarse dosis cada vez más elevadas para lograr los mismos efectos.
-Además, los que abusan del OxyContin y se inyectan la droga se exponen a otros riesgos, entre ellos el de contraer el VIH (virus de inmunodeficiencia humana), la hepatitis B y la C, y otros virus transmitidos por la sangre.
-El abuso del OxyContin es ilegal. El OxyContin es una sustancia que figura en la Lista II de la Ley de Sustancias Controladas. Las drogas de la Lista II, entre ellas la cocaína y la metanfetamina, tienen gran potencial de abuso. El abuso de esas drogas crea una fuerte dependencia psicológica o física.
-El precio en Argentina es de entre $658 y $1.500 las treinta unidades.
-Luego de la muerte del Michael Jackson, en su autopsia se reveló que el cantante tenía una gran cantidad de esta droga en su organismo.
-El presidente de EEUU, Donald Trump, declaró la crisis de opiáceos como "una emergencia de salud pública", ya que hay más de 2,4 millones de personas en su país que son adictos a estos fármacos.
SEGUÍ LEYENDO:
Analgésicos: los riesgos del consumo excesivo y la automedicación
Por la crisis de los opiáceos, la expectativa de vida bajó por segundo año consecutivo en EEUU