Sal, azúcar y grasa: los secretos detrás de los 3 pilares de la comida industrial que generan adicción

Un alimento procesado es aquel que no puede encontrarse en la naturaleza como tal, es decir un alimento que, como su nombre lo indica, sufrió un proceso de transformación para llegar a manos de los consumidores envasado y -con suerte- con una etiqueta que indica sus valores nutricionales.

Sal, azúcar y grasa son el componente en común de la mayoría de los alimentos que se consumen a diario en el mundo. La "dosis" de cada uno de ellos es elegida con precisión y apunta a que los consumidores vuelvan a comprar los mismos productos.

Las sustancias de los alimentos se alteran químicamente y se adapta la cantidad de éstas según el país y la edad de los consumidores donde se comercializan.

"La sal, al igual que el azúcar, también es refinada para potenciar su sabor y acelerar su metabolización -advirtió la médica endocrinóloga María Alejandra Rodríguez Zía (MN 70.787)-. Una práctica que lleva más de dos décadas utilizándose para elaborar las papas fritas, y constituye el principal 'truco' que las hace irresistibles".

Según la especialista, "si se quita un poco de sal, azúcar o grasa de los alimentos procesados, ya no sabrán igual".

¿Qué estándares tiene que cumplir un alimento para ser considerado procesado?

Un alimento procesado es aquel que no puede encontrarse en la naturaleza como tal, es decir un alimento que, como su nombre lo indica, siguió un proceso de transformación, que podrá ser a través de la cocción, el ahumado, la deshidratación, el congelado, la conservación de cualquier manera o su cambio de sabor respecto de la adición siempre de productos químicos.

Por ejemplo, el más difundido que invadió el planeta y generó entre otras cosas la epidemia de obesidad, es el jarabe de maíz de alta fructosa, obviamente sacado del maíz. En su inicio el maíz nos aporta fructosa desde su composición natural pero al ser extraído un elemento en particular y concentrar transformado en jarabe es uno de los principales paradigmas que hoy conocemos como alimento procesado que desde ya es un gran adictivo. Se trata de un endulzante líquido, transparente, obtenido del maíz después de un largo proceso.

¿Por qué se dice que el azúcar, la grasa y la sal son el trío que nos hace adictos a la comida industrial?

Se dice que el trío "azúcar, grasa y sal" son por separado elementos que pueden tener implicancia adictiva pero mucho más si están unidos.

Los ingredientes más adictivos que van a influenciar sobre nuestro cerebro son la harina y el azúcar. ¿Por qué razón? Porque los alimentos con mayor índice glucémico (aquellos que producen un aumento rápido de los valores de azúcar en sangre inmediatamente después de ingerirlos) de la misma manera producen un estímulo en el páncreas, que 'interpreta' que debe segregar al torrente sanguíneo más cantidades de insulina para bajar esos niveles altos de azúcar que produjo ese alimento. Allí el cerebro vuelve a percibir que le falta energía (porque el exceso de azúcar en sangre bajó) y genera la necesidad de volver a consumir.

Este proceso fisiológico y bioquímico en nuestro organismo genera que queramos comer una galletita tras otra, o una factura tras otra.

Pero hagamos una diferenciación: si el alimento ingerido es una factura, que tiene justamente, grasa, sal, azúcar y harina en su composición, es probable que por la grasa, que es una sustancia que produce saciedad, en un momento la compulsión se detenga.

En cambio, si el alimento procesado tiene menos grasa y más harina, sal y azúcar eso hará que no nos podamos detener, más allá de lo mal que podamos sentirnos luego o la indigestión que podamos llegar a tener.

¿Cuáles son los alimentos que más concentración de estos nutrientes tienen y la gente consume a menudo?

Los alimentos procesados con este trío que más frecuentemente se consumen, podemos verlos a la entrada de los supermercados en las góndolas en exposición. Se encuentran casi siempre paquetes de papas fritas de todas las marcas, que tienen un enorme estudio previo acerca de hasta los colores que más impactan en los envoltorios. Este producto es uno de los peores.

Luego siguen las galletitas saladas, las facturas y cualquier combinación que contenga harina blanca, sal, grasa y azúcar. La harina y el azúcar cumplen una misma función en nuestro cuerpo, que es subir el azúcar en la sangre.

Este trío, sin ninguna duda, está estudiado para que no podamos para de consumir.

¿Cuáles son las consecuencias en la salud de consumir en exceso estos tres componentes?

Las consecuencias en la salud por consumir la combinación de sal, azúcar y grasa va a ser la obesidad y, asociada a esta, en la medida que va aumentando el porcentaje de grasa en el cuerpo (especialmente la grasa abdominal) aumentará la presión arterial.

Con el paso de los años, comiendo de esta manera, lentamente el proceso va a generar arteriosclerosis, con un camino hacia el infarto cardiovascular y por supuesto también puede ser cerebral. En relación a esta misma evolución está la complicación de la diabetes tipo 2.

Estas son las patologías más diseminadas en el mundo occidental, justamente por cómo se extendió la forma de comer alimentos procesados.

¿Cuáles serían las mejores sugerencias para dejar de consumir o consumir menos SAG?

Como estilo de vida, además de huir de la esclavitud de consumir productos en base a SAG, lo óptimo es alejarse de comprar productos empaquetados.

Nada que venga directamente de la naturaleza va a venir empaquetado, mucho menos etiquetado.

No le sirve a nadie leer etiquetas: tomar un producto empaquetado y leer su etiqueta es una pérdida de tiempo. Primero por ser incomprensibles y estar llenas de siglas, códigos muchas veces difíciles de interpretar y en muchos casos ausencia total de lo que debería legalmente tener la descripción de todos sus componentes. Es sin dudas un enorme engaño tanto para profesionales de la salud como para consumidores.

Entonces, primero, comprar productos sin empaquetar, comprar productos en verdulerías, pescaderías, carnicerías, dietéticas, aquellos lugares y aquellos productos embolsados como por ejemplo las legumbres, las nueces, los frutos disecados, que están allí, a la vista tal como la naturaleza los entrega y que no están modificados. De esta manera volveremos a tener una alimentación más saludable, como era antes de la industrialización y poco a poco nos vamos a dar cuenta que la adicción va disminuyendo.

Posteriormente se notará que la saciedad y ansiedad por comer poco a poco se irá modificando.

De este modo, esto va a redundar en la salud, la pérdida de peso, la disminución de la presión arterial, siempre teniendo en claro que así como la adicción no se instaló de un día para otro, tampoco desaparecerá de manera rápida, pero iniciar el proceso es efectivo. Será el mejor camino para prevenir la mayor cantidad de enfermedades que derivan de de comer este trío.

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