“A los argentinos no los une ni la Selección”. La frase es del ex presidente uruguayo José “Pepe” Mujica y se la dijo al periodista Luis Novaresio el 1 de enero de 2021. La discusión que presenciamos estos días, sobre el reparto de alimentos a punto de vencer y retenidos en dos depósitos del Ministerio de Capital Humano, no hace más que confirmar ese concepto: a los argentinos no nos une ni siquiera el hambre de los sectores más vulnerables del país.
Las diferencias ideológicas que estos días enfrentó al gobierno, a la oposición, y a líderes sociales como el abogado Juan Grabois, no hace más que profundizar una grieta que solo genera más pobres, más chicos que no llegan a comer las cuatro comidas diarias y a adultos mayores que no pueden comprar sus medicamentos.
El Gobierno de La Libertad Avanza negaba tener comida guardada, pero había 5.902.987 kilos; de ellos, 3.627.815 kilos estaban en los galpones de Villa Martelli y 2.275.172 de kilos en Tucumán. El Gobierno aseguró que no había comida con fecha de vencimiento cercana y un porcentaje ya se había podrido. También había 339.867 kilos de leche en polvo que vencen entre el 7 y el 30 de julio y 4.439 kilos de harina de maíz que vencen el 25 de julio.
En las últimas horas, la principal noticia fueron los camiones del Ejército Argentino que cargaban una mínima fracción de esa leche en polvo para llevar a puntos de distribución de la Fundación CONIN, con quien la ministra Sandra Pettovello firmó un acuerdo.
Este medio se comunicó con funcionarios a cargo de la titular de Capital Humano, para saber a qué lugares iba la leche. La respuesta fue desconcertante: “No se van a blanquear por una cuestión de seguridad”. En el Gobierno expresaban temor a que el convoy de cuatro camiones militares, conducido por militares y custodiados por camionetas de Gendarmería fueran saqueados.
De todos modos, si alguien hubiese querido robar la leche en polvo solo tenían que mirar las señales de los canales de noticias a través de un celular y seguir el recorrido que realizaban los cronistas y que en vivo transmitían los drones. Es más, hasta las cámaras mostraron cómo bajaban las cajas de cartón en una parroquia.
Recordemos que esa leche en polvo no apareció hasta que Juan Grabois, el dirigente de Argentina Humana, denunció en la Justicia que se acopiaba en los galpones del Gobierno y que estaba por vencer.
Hasta ahora Margarita Barrientos, la mujer que por día alimenta entre 7.000 y 10.000 chicos en Buenos Aires y Santiago del Estero en “Los Piletones”, no recibió ni un llamado de la ex cartera de Desarrollo Social, a pesar de sus pedidos. Tampoco CARITAS o los curas villeros o iglesias evangélicas que conocen el territorio.
Afuera, obviamente, quedan las organizaciones sociales y piqueteras que también patean los barrios, pero están sospechadas de extorsionar a beneficiarios de planes sociales para ir a marchas, administrar “comedores fantasma” y vender los alimentos del Estado en ferias.
El 6 de febrero, Pettovello ya había firmado un convenio con Abel Albino (presidente de CONIN), en el marco del Plan Argentina contra el Hambre. El objetivo: desarrollar proyectos y programas de acción para combatir la desnutrición infantil en el país. CONIN ya recibió 43.230 kilos de alimentos por parte de Capital Humano para asistir a los comedores de sus centros, en momentos en que los funcionarios de Capital Humano aseguraban que no había alimentos y que no se distribuía comida.
Mientras los canales de TV seguían el recorrido del convoy militar con la leche, en los tribunales de Comodoro Py se desarrollaba una escena que pinta el contexto de cuerpo entero: el dirigente social Juan Grabois y la subsecretaria de Legal del Ministerio de Capital Humano, Leila Gianni, mantuvieron un feroz cruce de agresiones en una audiencia en la Cámara Federal porteña por la causa de la entrega de alimentos. “Dejá de extorsionar gente, ladrón”, le dijo Gianni en el pasillo del segundo piso del edificio tras la audiencia. “Kuka ladrona”, le respondió Grabois, que calificó de “chanchito” a otro abogado del Ministerio. La escena de pugilato verbal fue descripta por los periodista de Infobae Patricia Blanco y Martín Angulo. Pero, si no bastase con ese relato pormenorizado, también quedó el registro en las cámaras de los teléfonos celulares.
“Ahora te pones un león, antes te ponías un pingüino”, le dijo Grabois a Gianni, por su pasado como funcionaria del gobierno de Alberto Fernández y en referencia a una remera que tenía la funcionaria con una imagen del animal que los libertarios adoptaron como símbolo “Al pingüino se lo comió el león”, le contestó Gianni. La lamentable escena que no los favorece -y mucho menos a la representante de Capital Humano- continuó.
El cruce de lenguas karatecas parece tener ribetes personales. O más aún. Grabois fue precandidato presidencial de Unión por la Patria. La abogada militaba por la candidatura presidencial de Sergio Massa. En el marco de la entonces interna oficialista para dirimir al candidato presidencial que enfrentaría a Cambiemos y a La Libertad Avanza, Grabois medía fuerzas contra el entonces ministro de Economía. Se sabe, Massa venció a Grabois y después Javier Milei fue electo presidente en segunda vuelta a instancias de Massa. Después de la ferocidad de adjetivos que usaron uno contra el otro, ¿ambos habrán votado a Massa en el ballotage? Poco importa ahora. Los pasillos de Tribunales fueron parte del ring ¿o del circo? que gira alrededor de los alimentos que no les llegan a los más vulnerables.
En medio de este escándalo, Cáritas Argentina y el Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA-UCA) de la Universidad Católica Argentina presentaron un informe alarmante sobre la pobreza en el país, en el marco de la Colecta Anual de Cáritas bajo el lema “Tu solidaridad es esperanza”. El informe titulado “Radiografía de la pobreza en Argentina: realidad social y solidaridad que es esperanza” expone un panorama dramático sobre la situación económica y social.
Según el estudio, la aceleración de la espiral inflacionaria generó un incremento en los índices de pobreza e indigencia. Entre el tercer trimestre de 2023 y el primer trimestre de 2024, el indicador de pobreza subió del 44,7% al 55,5%, mientras que la indigencia pasó del 9,6% al 17,5%. Esto implica que, en los primeros meses de 2024, aproximadamente 24,9 millones de personas en áreas urbanas se encontraban en situación de pobreza, de las cuales 7,8 millones vivían en la indigencia.
Una vez más resuenan las palabras de Pepe Mujica con Luis Novaresio. “La Argentina está divorciada desde hace tiempo en materia de sus afectos (...) Si en la Argentina pudieran respetarse un poco más entre ustedes mismos (…) Son un pueblo maravilloso, pero gastan un montón de energía inútilmente”.
El ex mandatario decía que Uruguay, por su extensión, era un “paisito”. Esta Argentina que duele es un “paisito”, pero no por su geografía.