La ministra de Salud, Carla Vizzotti, se reúne de modo virtual con sus pares de las 24 provincias argentinas en el marco de una nueva convocatoria del Consejo Federal de Salud (COFESA). En el cónclave, que comenzó a las 15, repasarán los avances en la campaña de vacunación en todo el país, cómo sigue la curva de contagios con la predominancia de la variante Ómicron y una estrategia común que permita acelerar la vacunación pediátrica de cara al inicio del ciclo lectivo.
En la conferencia de prensa que dio este jueves 20 en la Casa Rosada, Vizzotti anunció la compra de otras 18,5 millones de dosis del laboratorio Pfizer que serán destinadas a inocular a los niños de entre 5 y 11 años. En la franja etaria de entre 3 y 11 años, el 69,9% inició su esquema y el 46,7% lo completó, según los datos del Ministerio a nivel nacional. La titular de la cartera de Salud manifestó que “la vacuna Pfizer es a partir de los cinco años, porque es el registro del laboratorio y la división de las edades para los ensayos clínicos”.
A los que tienen menos de 5 años y hasta 3 se les aplica la del laboratorio chino Sinopharm, la primera en ser aprobada por la ANMAT en nuestro país destinada al uso pediátrico. ”Ayer estuvimos en una mesa en la que trabajamos en las estrategias para mejorar coberturas de Covid-19 y de todo el esquema de vacunación porque son vacunas que pueden coadministrarse”, agregó la ministra.
Por otra parte, Vizzotti descartó la exigencia de un pase sanitario para que los niños puedan concurrir a las escuelas, y dijo que si bien “se evaluó” esa posibilidad, se consideró que “no es necesaria por todo el trabajo que estamos haciendo, la demanda de vacunas y el avance de la vacunación”. Vacunar con esquema completo a la mayor cantidad de los niños y adolescentes antes de que comiencen las clases en los distintos niveles es uno de los mayores objetivos que se propuso el Gobierno.
Es factible que otro de los temas que se aborde, aunque en un principio no está incluido en el temario a discutir, sea el que se planteó en las últimas semanas cuando fue creciendo la tercera ola de coronavirus en Argentina: los atrasos en la entrega de insumos que aparecieron en varias localidades para realizar testeos.
El Gobierno admitió que hay faltantes, pero atribuyó este inconveniente a demoras de parte de los proveedores internacionales debido a la alta demanda en todo el mundo por el avance de la pandemia. Algunos municipios de la provincia de Buenos Aires, donde la cantidad de contagios se encuentra en los niveles más altos del país, empezaron a quejarse sobre la escasez de recursos para testear. La municipalidad de Chascomús, por ejemplo, directamente suspendió los hisopados durante varias horas por ese motivo. En centros privados de salud también hubo alertas, y en distintas áreas del sector público aseguraron que tienen cada vez menos insumos.
Vizzotti admitió: “El problema con los testeos no es algo que pase en la Argentina solamente. El aumento exponencial en el número de casos hizo que en el mundo crezca la demanda de testeos”. Y agregó que habían recibido “reportes de algunas jurisdicciones que adquieren insumos de que está habiendo demoras en entrega”. La funcionaria aseguró que desde la Nación están abocados, también, a comprar insumos para distribución. “Las provincias están trabajando para recibir. En este momento no tenemos reporte de faltas, sino que con el uso tan importante se acaban, y se reponen”, dijo.
Este jueves, antes de la conferencia de prensa que brindó en la Casa Rosada, la ministra había visitado en Olivos al presidente Alberto Fernández, quien se encuentra aislado preventivamente tras confirmar que fue contacto estrecho de un caso de coronavirus, aunque en su caso no es obligatorio, de acuerdo a las últimas normas sanitarias. Vizzotti aseguró que conversaron sobre el avance en los esquemas de vacunación y el relajamiento de los requerimientos sanitarios para el tránsito por las fronteras terrestres con los países limítrofes.
Vizzotti enfatizó en recordar las medidas orientadas a restringir la cantidad de testeos: “Las personas confirmadas que cumplen aislamiento y son contactos estrechos y empiezan con síntomas no necesitan testearse. Así vamos a reforzar el uso del recurso, en función de la indicación sanitaria, que requiere actualizar recomendaciones en función del testeo”, dijo.
Además, la incidencia de la variante Ómicron en la gran cantidad de casos mantiene en estado de alerta a la cartera sanitaria. Los números de los últimos días alarmaron: Salud informó ayer que en las últimas 24 horas se registraron 182 muertes y 129.709 contagios de coronavirus. Se trata del cuarto registro más alto de toda la pandemia. Los tres picos anteriores habían sido el viernes 14 de enero, con 139.853 casos; el martes 11, con 134.439; y el miércoles 12 con 131.082.
SEGUIR LEYENDO: