Coronavirus en Argentina: la ONU pone el foco en las compras de alimentos y medicamentos para evitar nuevas irregularidades

Atentos a los eventuales casos de irregularidades en la compra de insumos en medio de la pandemia, las Naciones Unidas lanzarán mañana en la Argentina un observatorio de precios de medicamentos regional y al mismo tiempo profundizó el programa de seguimiento en la adquisición del Estado de los alimentos para los comedores escolares.

Se trata de dos rubros críticos en la crisis de COVID-19: la compra de alimentos y de remedios están en el foco de atención del Estado y a nivel global han generado polémicas o denuncias por severas irregularidades. La Argentina no es la excepción y es por esto que Naciones Unidas está abocada a apoyar los programas de transparencia en este sentido.

“Sabemos que hubo a nivel global tendencias a conductas especulativas en la venta de insumos necesarios en la pandemia y también irregularidades. Por ello queremos hacer un aporte en la Argentina a la transparencia”, explicó a Infobae Roberto Valent, el representante de la ONU en la Argentina.

Todo esto se da en un contexto donde en la Argentina ya se detectaron irregularidades en la compra de insumos sanitarios tanto en el gobierno nacional como en el administración porteña.

En el caso del Ministerio de Desarrollo Social, Daniel Arroyo tuvo que anular por completo una compra millonaria de azúcar y aceite para comedores escolares en los inicios de la pandemia ya que se descubrieron que se había hecho con sobreprecios. En tanto, el gobierno de la Ciudad quedó envuelto en un escándalo por la compra de barbijos con sobreprecios, que algunos casos superaron el 50% del costo real.

En esta línea, el observatorio de compra de medicamentos que mañana presentará la oficina de Naciones Unidas en Argentina busca atender algunos de los desafíos que tienen los gobiernos frente a la compra de medicamentos tales como: la falta de información actualizada y fidedigna de precios internacionales que sirva de referencia; dificultad para acceder a información comparable sobre precios pagados por otros gobiernos; riesgos de cartelización de proveedores y corrupción en las entidades de salud; desabastecimiento y sobreprecios.

Según explicaron a Infobae los representantes de la ONU, el observatorio, que funciona como un repositorio de datos, “es una herramienta que será puesta a disposición de los Gobiernos, para brindar información objetiva al comparar precios internacionales de fuentes oficiales, provenientes de 21 países”. Y la Argentina se encuentra entre esos países.

En la práctica, este observatorio de compra de medicamentos ayudará a comparar precios entre múltiples fuentes para establecer un rango de precios justos. Pero también “contribuye a fomentar la transparencia y rendición de cuentas”, dijeron. También la idea es que haya un incentivo a la transformación digital hacia políticas de datos abiertos y promueve el cumplimiento de los compromisos de gobierno abierto asumidos por los países.

Argentina es uno de los 21 países de los cuales se han tomados precios de referencia para conformar el observatorio, a partir de los datos públicos disponibles en el Portal de Datos Abiertos del PAMI. Aunque la idea es trasladar esto al Ministerio de Salud.

¿Por qué la ONU desarrolla esta herramienta? “En América Latina, la organización gestionó la compra de medicamentos para diversos ministerios de salud y entidades de seguridad social entre 2014 y 2020. Mediante procesos competitivos y transparentes, se logró reducir el riesgo de sobreprecios y corrupción en las compras de medicamentos”, dijeron en las oficinas de Naciones Unidas.

Además, el observatorio permite contar con una red internacional de expertos en compras, que están a disposición de los Gobiernos.

Durante el lanzamiento de este Observatorio de la ONU harán una presentación Alicia Bárcena, la directora ejecutiva de la CEPAL; Zoe Robledo, director general de Instituto Mexicano de Seguridad Social; Carlos Contreras, presidente del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social; Víctor Zamora, ministro de Salud de Perú y Fabrizio Feliciani, director de la UNOPS para América latina.

Según adelantaron a Infobae en la ONU, el observatorio de precios de medicamentos que estará disponible en Argentina servirá para: comparar la lista de precios de insumos de otros países de la región y del mundo en materia sanitaria; mostrar qué gobiernos tienen listas de compras abiertas; buscar precios de referencia para los consumidores y establecer un sistema equitativo de compras públicas.

“El Observatorio de compra de medicamentos le dará un empoderamiento a la sociedad para hacer un seguimiento de los medicamentos que compra el Estado”, dijo Valent.

Obras y alimentos

En rigor, el esquema de transparencia en la compra de medicamentos no es el único que fomenta la ONU en la Argentina en medio de esta pandemia.

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) viene ejecutando un esquema de monitoreo de compra de alimentos con el Ministerio de Desarrollo Social para los comedores escolares de todo el país. Se trata en verdad de un convenio con la sociedad civil también que apunta a dar mayor transparencia al sistema.

El objetivo general del proyecto es contribuir a la transformación de la política alimentaria en una perspectiva de integración, social, institucional y territorial, con los consecuentes cambios necesarios en las modalidades de intervención e instrumentos operativos capaces de promover y consolidar acciones en cada lugar del territorio donde las necesidades sociales y principalmente alimentarias deban ser atendidas, profundizando, desde una perspectiva de derechos.

Este esquema contempla la instrumentación de servicios alimentarios con calidad nutricional, seguridad e higiene adecuados fortalecidos; servicios y actividades asociados a la niñez, la adolescencia y el género ampliados y mejorados; organizaciones Comunitarias fortalecidas y articuladas con áreas y organismos del sector público de todos los niveles jurisdiccionales.

Por otro lado, en el marco de la emergencia provocada por la pandemia de COVID-19, el Ministerio de Obras Públicas que lidera Gabriel Katopodis solicitó a Naciones Unidas el apoyo como organismo especializado en compras públicas e infraestructura para la construcción de 11 módulos hospitalarios.

De esta manera, las acciones específicas que le fueron encomendadas a ONU estuvieron relacionadas con el apoyo para la adquisición e instalación de 11 unidades modulares de atención de salud desarrolladas en cuatro provincias; el equipamiento médico necesario para asistir a los pacientes, especialmente aquellos que requieran asistencia respiratoria mecánica; insumos médicos descartables y elementos complementarios como equipamiento informático, grupos electrógenos y provisión de gases medicinales.

Los módulos de hospitales disponibles para la pandemia fueron instalados en las provincias de Buenos Aires (8), Córdoba (1), Chaco (1) y Santa Fe (1).

Como resultado de este programa, se realizó el proceso de compra para llevar adelante estos hospitales. Allí resultó adjudicada la empresa ECOSAN S.A y hubo una compra realizada siguiendo los Procedimientos de Adquisición para Emergencia (EPP Emergency Procurement Procedures, por sus siglas en inglés) de Naciones Unidas, los cuales son procesos simplificados para facilitar una respuesta rápida durante una situación de emergencia cumpliendo con los principios de transparencia, sostenibilidad y eficiencia en las compras públicas.

A través de un trabajo coordinado entre el programa de la ONU, el Ministerio de Obras Públicas y los municipios, se aseguró que en abril los módulos se emplazaran en cada una de las locaciones definidas, con el fin de ampliar la capacidad de las Unidades de Pronta Asistencia (UPA) existentes.

Por otra parte, Naciones Unidas realizó un asesoramiento al gobierno porteño para la compra urgente de: 50 respiradores, 10.000.000 de barbijos de un solo uso y 200.000 barbijos N95. Esto se dio por separado a las compras con irregularidades que luego se detectaron en otras áreas del gobierno porteño. Es decir que en este caso la ONU no detectó irregularidad alguna en esta adquisición de insumos.

Con el programa de Cascos Blancos de la Cancillería, la ONU apoyó un esquema de transparencia en la adquisición de insumos de protección, tales como guantes, barbijos, alcohol en gel, repelentes; tanto para el uso de los voluntarios que cumplen funciones dentro de la comisión, como para la población a la que asisten. Y también difundieron un sistema de información al instante en el marco del Programa Mejoramiento de Condiciones de Habitabilidad que se implementa en más de 30 barrios del conurbano bonaerense y en Chaco, Chubut, Corrientes, Entre Ríos, Tucumán y Santa Fe.

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