Día Mundial de la Salud Bucal: estos son los productos que debes usar para tener dientes sanos

La salud bucal es esencial para el bienestar y la calidad de vida en todas las etapas: desde la infancia hasta la vejez. Sin embargo, en Perú, las cifras son alarmantes: según el Ministerio de Salud (Minsa), más del 90% de la población adulta presenta caries, lo que subraya la necesidad urgente de una mayor prevención y cuidado dental.

“Reconocer las etapas de la salud dental es clave para su cuidado, ya que las enfermedades bucales pueden afectar seriamente el bienestar general”, asegura el Dr. Ítalo Funes Rumiche, ex directivo del Colegio Odontológico del Perú (COP).

El Dr. Funes recomienda el uso de productos adecuados para cada etapa, ya que las necesidades de salud bucal varían con el tiempo. Entre los principales destacan:

• Cepillos dentales: es importante elegir un cepillo adecuado según la edad y las necesidades del paciente, siempre con filamentos suaves para proteger las encías.
• Enjuagues bucales: complementan la higiene bucal, ayudando a prevenir caries y enfermedades de las encías. Es preferible que no contengan alcohol y que incluyan CPC (cloruro de cetilpiridinio) para un mayor control de la placa.
• Cepillos interproximales: son ideales para limpiar entre los dientes y prevenir la acumulación de placa. Es fundamental seguir las recomendaciones del odontólogo para identificarlos correctamente.
• Pasta dental: debe contener flúor y ajustarse a las necesidades específicas de cada etapa. Desde el primer diente, la pasta dental debe tener 1,000 ppm (partes por millón de flúor). Desde los 6 años, la pasta debe contener 1,450 ppm.

El especialista destaca cuatro etapas clave en la vida de una persona donde la salud bucal juega un papel determinante:

• La infancia: la primera visita al odontólogo debe realizarse cuando erupciona el primer diente del niño. Los estudios indican que alrededor del 50% de los niños desarrolla caries dentales en esta etapa, lo que puede derivar en problemas en la erupción de los dientes permanentes si los dientes primarios se pierden prematuramente.
• La adolescencia: los cambios hormonales durante la pubertad pueden aumentar la sensibilidad de las encías. En Europa, el 77% de los adolescentes padecen caries, y la prevalencia más alta ocurre entre los jóvenes de 16 a 19 años.
• La adultez: mantener una buena higiene bucal es crucial para prevenir enfermedades como la gingivitis y la periodontitis, principales causas de pérdida dental en adultos. Además, la salud oral está vinculada con afecciones como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares, lo que hace que las visitas regulares al dentista sean esenciales. A partir de los 35 años, comienza la desmineralización ósea, lo que lleva a una mayor prevalencia de espacios interproximales abiertos.
• La vejez: para las personas mayores, los cambios relacionados con la edad, las afecciones médicas y los medicamentos presentan retos adicionales. Casi todos los adultos mayores de 65 años (96%) han tenido caries, y uno de cada cinco tiene caries dentales sin tratar.

El cuidado adecuado de la salud bucal es esencial para mantener los dientes y encías sanos a lo largo del tiempo. Uno de los aspectos clave en la higiene dental es la frecuencia con la que se deben lavar los dientes. La recomendación general de los dentistas es lavarse los dientes al menos dos veces al día, una por la mañana y otra antes de dormir.

Lavarse los dientes por la mañana ayuda a eliminar la placa bacteriana que se acumula durante la noche y previene el mal aliento. Además, al hacerlo antes del desayuno, se elimina la acumulación de bacterias que se genera mientras dormimos, manteniendo la boca fresca y limpia. Es importante que el cepillado matutino se realice al menos 30 minutos después de tomar alimentos o bebidas ácidas (como frutas cítricas o jugos), ya que el esmalte dental puede estar más vulnerable y la acción inmediata de cepillado podría dañarlo.

El cepillado nocturno, por su parte, es crucial para eliminar los restos de comida, la placa bacteriana y las bacterias acumuladas durante el día. Dormir con los dientes sucios puede aumentar el riesgo de caries y enfermedades de las encías. Además, cepillarse antes de acostarse ayuda a prevenir el mal aliento y el riesgo de formación de placa durante la noche.

En algunos casos, se recomienda un tercer cepillado después de las comidas principales, especialmente si se han consumido alimentos azucarados o pegajosos, para reducir la cantidad de restos alimenticios y placa bacteriana en la boca. Sin embargo, dos cepillados al día, combinados con el uso del hilo dental y el enjuague bucal, son suficientes para mantener una buena salud bucal.