En el Perú, la fractura de pene es una lesión más frecuente entre hombres de 20 a 40 años, según un trabajo de investigación que forma parte del Repositorio Institucional de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM).
Aunque popularmente se denomina fractura, esta lesión genital poco común que afecta a 1 de cada 100 mil hombres no es una fractura, puesto que el pene humano no posee hueso. En un alto porcentaje de casos, entre el 30 % y 50 % de las fracturas de pene se producen con el pene erecto durante el coito.
¿Qué es la fractura de pene?
Para entender cómo puede ocurrir una fractura de pene, es importante conocer su anatomía. El pene está compuesto por tres cilindros eréctiles recubiertos de piel llamados cuerpos cavernosos, que al llenarse de sangre permiten la erección; y el cuerpo esponjoso, ubicado en la parte inferior, que contiene la uretra y permite la micción. Los dos cuerpos cavernosos, que constituyen la mayor parte del pene, alojan el tejido eréctil y están envueltos por una capa densa y elástica llamada túnica albugínea.
La fractura de pene, o ruptura de los cuerpos cavernosos, sucede cuando se desgarra la túnica albugínea, pudiendo afectar uno o ambos cuerpos cavernosos e incluso lesionar la uretra.
La causa más frecuente de fractura de pene es una relación sexual con penetración. El coito es responsable del 46% de estas fracturas, debido al impacto del pene erecto contra la sínfisis púbica o el periné de la pareja al salirse de la vagina. Las posturas sexuales en las que la mujer se encuentra encima tienden a aumentar el riesgo de este tipo de fractura. Esto se debe a que, en dicha postura, el peso y control que ejerce la mujer sobre el pene erecto dificulta que el hombre pueda reaccionar rápidamente ante una sensación o movimiento doloroso durante el acto sexual.
Síntomas de la fractura de pene
Aunque este tipo de traumatismo suele ocurrir con mayor frecuencia durante las relaciones sexuales, cuando el pene se desliza accidentalmente fuera de la vagina y golpea la pelvis de la pareja; también puede producirse por una masturbación vigorosa.
Los movimientos rápidos y bruscos al masturbarse pueden ser una causa de esta lesión, especialmente en hombres con dificultades de erección o en jóvenes que se masturban en secreto y con miedo a ser descubiertos.
En ciertos casos, el hombre solo experimenta dolor que desaparece después de un tiempo; sin embargo, si se escucha un chasquido, significa que la túnica albugínea se ha roto.
Cuando se produce una fractura de pene, el órgano generalmente se abulta y adquiere un tono morado, similar al de una berenjena.
Los signos y síntomas habituales de este traumatismo incluyen:
- Dolor intenso e inmediato en el pene
- Un sonido de chasquido o crujido
- Pérdida rápida de la erección
- Hinchazón en el cuerpo del pene
- Decoloración del pene debido al sangrado bajo la piel
En algunos casos, el conducto que expulsa la orina (uretra) también puede resultar dañado, lo cual provoca la aparición de sangre en la abertura urinaria del pene.
Tratamiento para la fractura de pene
La fractura de pene requiere atención médica inmediata, ya que se trata de una emergencia urológica. Para un alivio inmediato antes del traslado, se recomienda tomar antiinflamatorios y analgésicos y, si es posible, vendar el pene con cuidado. Además, la aplicación de hielo en el área puede ser útil para reducir la inflamación inicial.
Por lo general, esta lesión se diagnostica mediante un examen físico, aunque en algunos casos pueden requerirse pruebas adicionales, como una ecografía. Habitualmente, se recomienda realizar una reparación quirúrgica de forma rápida.
Si una fractura de pene no recibe tratamiento, el pene podría quedar con una curvatura anormal o perder la capacidad de lograr o mantener una erección firme suficiente para mantener relaciones sexuales, es decir, que el paciente podría sufrir de disfunción eréctil.