Una rápida intervención médica entre los hospitales de Emergencias Pediátricas de Lima y Regional del Cusco fue clave para salvar la vida de una niña de tan solo un año, de iniciales Z.G.C que sufrió un grave accidente al atragantarse con una leguminosa andina.
El incidente ocurrió en la provincia de Acomayo cuando el pasado sábado la pequeña jugaba cerca de un costal de tarwi y, de forma inesperada, comenzó a mostrar signos de asfixia.
Su madre, alarmada por la tos persistente y la dificultad respiratoria de la niña, contó que la trasladó de inmediato al centro de salud de la zona.
En el establecimiento, los médicos identificaron que la menor tenía un cuerpo extraño alojado en su vía aérea, específicamente en el pulmón derecho, lo que le provocaba insuficiencia respiratoria severa.
A medida que avanzaban las horas, su estado empeoraba considerablemente, y las probabilidades de referirla a un hospital en Lima, dada la urgencia, se volvían cada vez más remotas.
Complicaciones críticas
Ante la gravedad de la situación, los médicos del Hospital Regional del Cusco decidieron intervenir el domingo. Sin embargo, la menor sufrió un paro cardiorrespiratorio durante el procedimiento, lo que complicó aún más su delicado estado de salud. A pesar de la falta de instrumental pediátrico especializado, el equipo médico logró estabilizarla a través de ventilación mecánica.
Paralelamente, el centro de cusqueño inició las gestiones para trasladar a la niña a Lima, donde los hospitales cuentan con mayor capacidad de resolución. No obstante, debido a las restricciones de tiempo y el estado crítico de la menor, se optó por otra solución: solicitar el envío urgente de un equipo médico especializado a la ciudad imperial.
Intervención clave
La operación, que duró más de una hora y media, fue un éxito, y los especialistas lograron retirar el tarwi seco de la vía respiratoria de la pequeña. Su evolución, según el equipo médico, ha sido favorable, y actualmente se encuentra bajo observación en el Hospital Regional del Cusco.
Carlos Enrique Gamarra Valdivia, director ejecutivo del establecimiento, explicó que mantener un objeto extraño en la vía aérea es potencialmente fatal y requiere una atención médica inmediata. Además, destacó la importancia de la coordinación entre ambos hospitales, que fue decisiva para el éxito de la intervención.
¿Qué hacer en caso de atragantamiento?
En situaciones de atragantamiento, la maniobra de Heimlich se presenta como una técnica crucial para salvar vidas, según el Sistema de Atención Móvil de Urgencias (SAMU) del Ministerio de Salud. Esta maniobra es considerada la única segura y comprobada al 100 % para liberar las vías respiratorias obstruidas por un objeto, evitando métodos alternativos que podrían agravar la situación.
Antes de proceder, es fundamental evaluar si la persona afectada puede emitir sonidos. Si es capaz de hacerlo, se recomienda animarla a toser con fuerza para intentar expulsar el objeto por sí misma. En caso contrario, cuando la persona no puede emitir sonidos, es necesario aplicar esta técnica.
Este movimiento, consiste en situarse detrás de la persona, rodear su cintura con los brazos, localizar el ombligo y colocar una mano en forma de puño sobre él. Con la otra mano, se ejerce presión hacia adentro y hacia arriba, comprimiendo con fuerza hasta que el objeto sea expulsado.
En situaciones donde el paciente pierde la consciencia, se debe proceder a comprimir el esternón para intentar liberar las vías respiratorias. Esta acción es vital para asegurar que el objeto causante del atragantamiento sea expulsado.
El SAMU enfatiza que, en caso de emergencia médica, los ciudadanos pueden comunicarse con el número gratuito 106 para recibir orientación médica inmediata. Esta línea está disponible para asistir a la población en situaciones críticas donde se requiera intervención urgente.