En marzo de 2024, el Seguro Social de Salud del Perú (EsSalud) advertía sobre las enfermedades que ocasionan problemas renales, sobre todo en el caso de los pacientes que sufren diabetes o presión arterial alta y pueden desarrollar enfermedades en los riñones.
Pero entre los problemas renales, EsSalud no mencionaba uno relacionado a las glándulas suprarrenales: la enfermedad de Addison o insuficiencia suprarrenal. Se trata de una afección poco común, que en los países desarrollados afecta a entre 100 a 140 individuos por cada millón de personas.
Enfermedad de Addison
La enfermedad de Addison, también conocida como insuficiencia suprarrenal, es una afección rara que se presenta cuando el cuerpo no produce suficientes cantidades de ciertas hormonas. En quienes padecen la enfermedad de Addison, las glándulas suprarrenales, que se encuentran justo encima de los riñones, generan una cantidad insuficiente de cortisol y, con frecuencia, también de otra hormona llamada aldosterona. Estas glándulas son parte del sistema endocrino y producen hormonas que influyen en casi todos los órganos y tejidos del cuerpo.
Esta enfermedad puede afectar a cualquier persona y puede llegar a ser potencialmente mortal. Sin embargo, las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de desarrollar la enfermedad de Addison. Esta afección es más común en mujeres de entre 30 y 50 años, aunque puede presentarse a cualquier edad, incluso en la infancia.
Entre los factores de riesgo que aumentan la probabilidad de sufrir la enfermedad de Addison se pueden mencionar los siguientes:
- Antecedentes de alguna enfermedad o cirugía que involucren la glándula pituitaria o las glándulas suprarrenales.
- Ciertas mutaciones genéticas que impactan la glándula pituitaria o las glándulas suprarrenales, incluyendo mutaciones que causan la enfermedad hereditaria conocida como hiperplasia suprarrenal congénita.
- Otras condiciones endocrinas autoinmunes, como el hipotiroidismo o la diabetes tipo 1.
- Una lesión cerebral traumática.
Síntomas de la enfermedad de Addison
Los síntomas de la enfermedad de Addison suelen aparecer de forma gradual, a menudo a lo largo de varios meses. La progresión de la enfermedad puede ser tan lenta que, al principio, las personas que la padecen no notan los síntomas. Sin embargo, un episodio de estrés, así como una enfermedad o una lesión, puede agravar los síntomas, que son los siguientes:
- Fatiga extrema
- Pérdida de apetito y de peso
- Áreas de piel oscurecida
- Presión arterial baja, con posibles desmayos
- Antojo de consumir sal
- Nivel bajo de azúcar en sangre, conocido como hipoglucemia
- Náuseas, diarrea o vómitos
- Dolor abdominal
- Dolor en músculos y articulaciones
- Irritabilidad
- Depresión
- Pérdida de vello corporal o problemas sexuales en algunas personas
La enfermedad de Addison y la insuficiencia suprarrenal aguda
La insuficiencia suprarrenal aguda es también conocida como crisis de Addison. En algunas ocasiones, los síntomas de la enfermedad de Addison pueden manifestarse de manera repentina. La insuficiencia suprarrenal aguda puede poner en peligro la vida. Es crucial buscar atención médica de emergencia en caso de presentar los siguientes síntomas:
- Debilidad intensa
- Confusión
- Dolor en la parte baja de la espalda o en las piernas
- Dolor abdominal, junto con vómitos y diarrea intensos que provocan deshidratación
- Disminución de la conciencia o delirio
- Presión arterial baja
Tratamiento para la enfermedad de Addison
Para el tratamiento de la enfermedad de Addison se suele recetar medicamentos hormonales para reemplazar las hormonas que las glándulas suprarrenales no están produciendo.
El cortisol se reemplaza con un corticosteroide, con mayor frecuencia hidrocortisona, que se toma dos o tres veces al día por vía oral. Con menos frecuencia, los médicos recetan prednisona o dexametasona.
Si las glándulas suprarrenales no están produciendo aldosterona, el paciente tomará un medicamento llamado fludrocortisona, que ayuda a equilibrar la cantidad de sodio y líquidos en el organismo.
Por otro lado, el tratamiento para la crisis suprarrenal incluye inyecciones intravenosas inmediatas de corticosteroides y grandes cantidades de salina intravenosa, una solución salina con dextrosa agregada. La dextrosa es un tipo de azúcar.