Este domingo 18 de agosto la Red Prestacional Lambayeque de Essalud informó que Jainer Pinedo Vargas, que en los últimos años se hizo conocido como el ‘Ingeniero bailarín’, falleció tras presentar un derrame pleural y un cuadro previo de dengue.
El loretano de 34 años había ingresado Hospital Almanzor Aguinaga Asenjo de Chiclayo el pasado 21 de julio. Según su familia, Pinedo se encontraba en la Unidad de Cuidados Intermedios.
Si bien no se ha detallado la evolución clínica del paciente, lo que se sabe es que el derrame pleural es una de las complicaciones del dengue.
Las complicaciones del dengue
La mayoría de las infecciones por el virus del dengue son leves o asintomáticas. Sin embargo, en algunos casos pueden ser graves, principalmente en presencia de factores de riesgo, como un segundo contagio por este patógeno, edad o comorbilidades, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Tras un periodo de incubación de 4 a 10 días, los síntomas comienzan abruptamente en la forma grave de la enfermedad, también conocido como dengue hemorrágico.
La fase febril es la primera etapa del dengue grave y se caracteriza por un inicio brusco con fiebre alta que puede durar entre 2 y 7 días. Algunos de los síntomas comunes incluyen enrojecimiento facial, eritema generalizado, mialgias difusas, artralgias y cefalea. Asimismo, pueden presentarse náuseas, vómitos, diarreas y sangrado gastrointestinal o de encías.
Lo que sigue es la fase crítica. Generalmente se inicia entre el tercer y séptimo día de la enfermedad, período que coincide con la defervescencia (disminución de la fiebre). Durante esta fase, algunos pacientes pueden experimentar un escape de líquidos y proteínas de los vasos sanguíneos. Esto suele derivar en complicaciones severas como el derrame pleural.
Derrame pleural: síntomas, diagnóstico y tratamiento
El derrame pleural es una condición médica que implica la acumulación anormal de líquido en el espacio pleural, la cavidad que existe entre los pulmones y la pared torácica. Esta situación puede llevar a una serie de complicaciones y síntomas que comprometen la vida del paciente.
Los síntomas del derrame pleural varían en función de la cantidad de líquido acumulado y la rapidez con que se desarrolla. De acuerdo con la Medline, algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor torácico: Generalmente se describe como un dolor agudo que empeora con la respiración profunda.
- Dificultad para respirar: Este es uno de los síntomas más prominentes y puede ser progresivo.
- Tos seca: Una tos sin esputo que puede acompañar al dolor torácico y la disnea.
- Fiebre y escalofríos: Comúnmente están presentes en casos infecciosos.
El diagnóstico del derrame pleural generalmente comienza con una revisión de la historia clínica y un examen físico. El profesional de salud puede usar varias herramientas para detectar y evaluar el derrame:
- Radiografía de tórax: Una de las primeras pruebas que se realiza para confirmar la acumulación de líquido.
- Ecografía torácica: Ayuda a identificar la cantidad y la localización exacta del líquido.
- Tomografía computarizada (TC): Proporciona imágenes detalladas y puede ayudar a determinar la causa subyacente.
- Toracocentesis: Procedimiento en el cual se inserta una aguja en el espacio pleural para extraer el líquido, que luego se analiza para determinar su naturaleza y posible causa.
El tratamiento del derrame pleural, según el manual médico MSD, depende tanto de la causa como de la severidad de los síntomas. Las opciones incluyen:
- Drenaje del líquido: En casos donde la cantidad de líquido es considerable y causa síntomas severos, se puede realizar una toracocentesis para aliviar la presión.
- Tratamiento de la causa subyacente: Es crucial tratar la condición médica que ha llevado al derrame. Esto puede incluir antibióticos para infecciones, quimioterapia para el cáncer, o medicamentos diuréticos para la insuficiencia cardíaca.
- Pleurodesis: Procedimiento donde se introducen sustancias químicas en el espacio pleural para crear una adhesión entre la pleura visceral y parietal; se realiza en casos de derrame recurrente.
- Cirugía: En situaciones severas, puede ser necesario realizar una intervención quirúrgica para abordar la causa subyacente del derrame.
Cabe precisar que un derrame pleural también puede ser causado por afecciones como la insuficiencia cardíaca, tumores o una lesión en el pecho. Por ello, se recomienda el seguimiento médico en cualquiera de estos casos.