Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Perú es el país con mayor inseguridad alimentaria en América del Sur.
La crisis económica, el cambio climático y la pandemia de covid-19 son los principales factores que han intensificado la crisis alimentaria en la región, generando serias repercusiones para el bienestar y la salud como la anemia, causada por una mala alimentación. Otra consecuencia de la inseguridad alimentaria es la desnutrición, que afecta especialmente a los niños menores de cinco años porque le causa la muerte al 45% de ellos a nivel global, cifra estimada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En el caso del Perú, el 51.7% de la población, es decir alrededor de 17.6 millones de personas, no tiene acceso regular a alimentos, de acuerdo a la FAO. Cabe señalar que, actualmente, la canasta básica de alimentos en Perú cuesta S/446 por persona al mes. Mientras que, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la pobreza extrema creció un 5.7% en 2023, afectando a más de 596 mil personas, lo que agrava la situación.
En este contexto, la organización no gubernamental ADRA lanza la Colecta Pública Nacional Auxiliatón 2024, una campaña que busca combatir la crisis alimentaria en nuestro país y que tiene como meta recaudar un millón de soles.
La inseguridad alimentaria
Una persona sufre inseguridad alimentaria cuando no tiene acceso constante a alimentos seguros y nutritivos suficientes para un crecimiento y desarrollo adecuados, así como para llevar una vida activa y saludable. Esto puede ocurrir por la falta de disponibilidad de alimentos y/o por la falta de recursos para adquirirlos.
La inseguridad alimentaria puede presentarse en diversos grados de severidad, tal como señala la FAO:
- Seguridad alimentaria a inseguridad alimentaria leve: incertidumbre acerca de la capacidad de obtener alimentos. Se pone en riesgo la calidad de los alimentos y la variedad de los alimentos se encuentra comprometida.
- Inseguridad alimentaria moderada: se reduce la cantidad de alimentos, se saltan comidas. Esto ocurre cuando una persona no tiene dinero o recursos suficientes para llevar una dieta saludable, tiene incertidumbre acerca de la capacidad de obtener alimentos o probablemente se saltó una comida o se quedó sin alimentos ocasionalmente.
- Inseguridad alimentaria grave: no se consumen alimentos durante un día o más. Esto ocurre cuando una persona se quedó sin alimentos o estuvo todo un día sin comer varias veces durante un año.
Auxiliatón 2024
Bajo el lema “Alimentando esperanzas”, el objetivo de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) es cubrir las necesidades básicas de las familias en las regiones afectadas por la creciente inseguridad alimentaria y la pobreza en el Perú y así seguir ayudando a los más necesitados, a través de sustento temporal y herramientas necesarias para que puedan desarrollarse por sí mismos.
En su versión anterior, gracias a los fondos recaudados por la Auxiliatón se beneficiaron 34,944 personas con la entrega de 304 toneladas de alimentos, 29.000 almuerzos, 24.500 litros de agua purificada y 2.022 kits de alimentos en 9 regiones: Piura, Lambayeque, La Libertad, Ancash, Lima, Arequipa, Moquegua, Tacna y Madre de Dios.
“Con la campaña de este año buscamos brindar una alimentación digna, capacitaciones en emprendimientos y bienestar integral a las familias de las organizaciones sociales de base más vulnerable como comedores populares y las ollas comunes para ir cerrando la brecha de la pobreza. Hacemos un llamado a todas las organizaciones y personas que deseen sumarse a esta noble campaña y contribuir con recursos para lograr esta meta” señaló el ingeniero Jhony Saavedra, vocero de la campaña.
Las personas que deseen contribuir con la Auxiliatón 2024 pueden hacerlo a través de las plataformas digitales de ADRA.