La situación de la seguridad alimentaria en el Perú es crítica, pues según un informe elaborado por diversas instituciones internacionales, entre ellas la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), revela que, en el Perú, actualmente el 51.7 % de la población pasa hambre. Sin embargo, la situación se torna aún más preocupante si se considera que el gobierno de la presidenta Dina Boluarte lo ocultó a la ciudadanía.
Un informe elaborado por el propio Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) analizó el estado de la seguridad alimentaria durante el año 2023, que forma parte de la administración de la presidenta Boluarte, y se puede confirmar que las cifras reflejadas en el documento de la FAO son correctas: más de 17 millones de peruanos pasó hambre durante el año 2023 y superó la cifra registrada durante la pandemia de la Covid-19.
Según el medio La Encerrona, el documento, titulado “Evaluación de la seguridad alimentaria ante emergencias 2023″, fue presentado el 1 de diciembre del 2023 ante un grupo de expertos, pero incluso luego de ocho meses, sigue sin ser publicado en la plataforma del Midis. Esto difiere de un estudio previo como el del año 2021, que fue publicado en el año 2022.
Un resumen de los indicadores analizados y que fue entregado en formato físico a los especialistas asistentes a la presentación en 2023 indica que la inseguridad alimentaria en el Perú alcanzó el 51.6 % durante el año 2023, una cifra ligeramente superior a la registrada en el periodo 2021 (51.0 %), cuando la pandemia de la Covid-19 afectó al Perú.
Áreas rurales son las más afectadas por la inseguridad alimentaria
Los datos son particularmente graves en las áreas rurales. Según el resumen del informe, el 64.1 % de los ciudadanos del Perú que viven en estas zonas son más vulnerables a la inseguridad alimentaria. Además, la sierra (58.9 %) y la selva (57.7 %) presentan una mayor incidencia de inseguridad alimentaria. En las áreas urbanas, esta situación perjudicial alcanza el 46.8 %, mientras que en la cosa casi la mitad de su población (49.6 %) pasa hambre.
En el caso de Lima Metropolitana, el 39.5% de los hogares se encuentra en situación de inseguridad alimentaria. Esto es aproximadamente 1 millón de hogares o la quinta parte de los hogares del Perú que presentan esta situación de dificultad.
A nivel nacional, las regiones más afectadas por el incremento de la inseguridad alimentaria son La Libertad, Puno y Ucayali, que aumentaron más de 10 puntos en la incidencia de la inseguridad alimentaria. En particular, Puno es la región más vulnerable, pues alcanzó la alarmante cifra de 74.7 %, lo que significa que 3 de cada 4 personas está en situación de inseguridad alimentaria.
No solo es hambre: Más peruanos comen alimentos menos saludables
Otros indicadores relevantes no se concentran en el hambre que pasan los peruanos, sino en el tipo de alimentación a la que se puede acceder. El informe del Midis indicó que en el año 2023 solo la tercera parte de los peruanos pudo consumir vegetales diariamente (36.3 %).
Por otro lado, solo uno de cada cinco hogares en todo el Perú pudieron comer algún tipo de proteína animal o frutas durante el año 2023. Incluso el consumo de legumbres -un alimento esencial para la lucha contra la anemia- se presenta en las mesas del 56.9 % de hogares peruanos entre cero y dos veces a la semana, una cifra baja considerando que en Perú el 43.1 % de bebés y niños menores de 3 años presentaron cuadros de anemia en 2023.
No solo eso, sino que la estadística recogida por el Midis y que no se ha publicado hasta el momento sostiene que en el Perú uno de cada cuatro ciudadanos comía “alimentos deficientes” en el año 2023, lo que representó un aumento de 6 puntos porcentuales con respecto al año 2021, cuando se llegó a 19.2 %.
Las opciones para comer: Gastar los ahorros, vender bienes y realizar trabajos peligrosos
Finalmente, la crisis de seguridad alimentaria llegó a un punto tal que el 71.7 % de los ciudadanos peruanos tuvieron que recurrir a gastar todos sus ahorros para comer. Por otro lado, el 64.3 % de los hogares del Perú afrontó la situación reduciendo gastos esenciales. En un estado aún más crítico se encuentra el 34.9 % de los hogares, que además tuvo que recurrir a que alguno de sus miembros realicen trabajos considerados como peligrosos.
Actualmente, el titular del Midis, Julio Demartini, no se ha pronunciado públicamente por los resultados del estudio realizado por su cartera y tampoco se tiene una respuesta por parte del gobierno de por qué el informe no fue publicado oportunamente a inicios del año 2024.