Minsa advierte sobre los peligrosos efectos de consumir bebidas alcohólicas en lugares de dudosa procedencia

En los últimos años, el incremento del comercio informal de licores en el Perú, que incluye la adulteración, el contrabando y la producción de alcohol artesanal que evade impuestos, ha generado inquietud en la industria. Este fenómeno no solo afecta la economía y la sociedad, sino que también tiene consecuencias trágicas, especialmente debido al consumo de bebidas alcohólicas adulteradas.

A mediados de mayo de 2024, el Ministerio de Salud del Perú (Minsa) informó que una de cada tres bebidas que se consumen en el Perú son adulteradas, informales, falsificadas o de contrabando. Una de las consecuencias de esta problemática es que hasta ese mes se habían reportado 231 personas diagnosticadas con cuadros de infección por consumir estas bebidas.

Al respecto, a través de la Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (Digesa), el Minsa alerta que las bebidas alcohólicas vendidas en locales no regulados podrían estar contaminadas con metanol (alcohol metílico), lo que representa un serio riesgo para la salud de quienes las consumen.

Por eso el Minsa recomienda no adquirir ni consumir bebidas alcohólicas en lugares de dudosa procedencia porque después de su ingesta el riesgo de muerte es entre 12 a 36 horas.

Las bebidas alcohólicas adulteradas se producen sin supervisión de calidad ni medidas de higiene, representando un peligro para su salud. Por eso el Minsa recomienda no comprar ni consumir estas bebidas en lugares de dudosa procedencia.

Los efectos de ingerir bebidas adulteradas son los siguientes:

• Cefaleas
• Vértigo
• Astenia
• Náuseas
• Diarreas
• Convulsiones
• Dificultad para respirar
• Dolor abdominal
• Visión borrosa
• Disminución del nivel de conciencia
  

Además, también existe riesgo de muerte entre las 12 y las 36 horas luego de haber consumido estas bebidas debido a que provocan depresión del nivel de conciencia, coma convulsivo o acidosis metabólica.

Hay que tener en cuenta que el metanol contenido en las bebidas adulteradas puede provocar ceguera, daño cerebral, insuficiencia renal e incluso puede ser mortal.

De acuerdo al Minsa, se puede identificar las bebidas alcohólicas adulteradas si tienen estas características:

• No cuenta con un registro sanitario.
• No cuenta con identificación alguna.
• Se encuentra en envases de otras bebidas.
• No refiere fabricante, código de lote, fecha de vencimiento (mayor a 10 GL no requieren fecha de vencimiento) ni grado de alcohol
• Al agitarlo o verterlo contiene partículas extrañas.
• Los sellos de seguridad de cierres o tapas se encuentran abiertos o movidos.

Por lo tanto, según el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi), los consejos para no comprar bebidas adulteradas son los siguientes:

1. Verificar el lugar de compra y el precio: no comprar ni consumir bebidas alcohólicas en establecimientos que no garanticen su procedencia o legalidad. Si el precio de la bebida es anormalmente bajo, considerar esto como una señal de alerta.
2. Verificar la etiqueta: asegurarse de que las etiquetas estén en buen estado, con letras claras que no se borren al tocarlas. La etiqueta debe incluir información del fabricante, fecha de vencimiento, número de lote, ingredientes y el código de registro sanitario vigente emitido por la Digesa.
3. Revisar la botella y su contenido: la tapa debe estar en buen estado, sin daños, con sellos y precinto de seguridad intactos. El precinto de seguridad adherido a la tapa debe estar bien sellado, lo que garantiza que la botella no ha sido abierta o manipulada antes de llegar a manos del consumidor. Al voltear o agitar la botella, verifique que no haya partículas o elementos extraños flotando en el líquido, ya que esto podría indicar adulteración con alcohol ilegal. Después de consumir la bebida alcohólica, recicle adecuadamente el envase de vidrio o plástico, destruya la tapa y la etiqueta para evitar que sean reutilizados en el mercado ilegal.