Desde hace varios años la kombucha ha ido ganando terreno en el mercado de las bebidas naturales en nuestro país. De origen chino, esta bebida milenaria es popular debido a que su alta concentración de levaduras y bacterias posee propiedades probióticas. Esto quiere decir que la kombucha mejora las bacterias “buenas” que forman parte de la microbiota humana.
Los beneficios para la salud que ofrece la kombucha pueden explicarse también a partir de su ingrediente principal: el té negro, una infusión que hidrata la piel, fortalece los huesos y mejora el funcionamiento del cerebro.
El té negro
El té negro es una infusión que presenta un nivel de oxidación superior al de las variedades de té verde, oolong y blanco. Las cuatro variedades mencionadas se elaboran con hojas de la planta Camellia sinensis pero tienen sus diferencias. Por ejemplo, en el té verde las hojas se mantienen más frescas y se someten a una ligera exposición al calor, mientras que en el té negro las hojas se oxidan y fermentan.
El té negro habitualmente tiene un sabor y aromas más intensos y una mayor concentración de cafeína en comparación a los tés con menores niveles de oxidación.
El té negro hidrata la piel
El té negro aporta una considerable cantidad de vitaminas B2, C y E, así como minerales como magnesio, potasio y zinc. Esto contribuye a una piel sana e hidratada.
Mientras la vitamina B2 mejora el estado de la piel, la vitamina C unifica el tono de la piel y le brinda elasticidad, además atenúa las manchas oscuras y reduce las arrugas. Por eso la vitamina C hace que la piel luzca más radiante. Por otro lado, la vitamina E mejora el tono y la textura de la piel debido a que reduce su aspecto opaco, así como las manchas oscuras. Por último, la cafeína contenida en el té negro ejerce un efecto tonificante sobre la piel y brinda una sensación de frescura.
Este tipo de té también puede ayudar a limpiar la piel al aplicarlo sobre el cutis, ya que es una forma eficaz de combatir el acné y la oleosidad. Solo se necesita preparar el té y, cuando esté tibio, aplicar con una gasa o algodón directamente sobre la zona a tratar. Luego, dejar actuar durante algunos minutos y finalmente lavar dicha zona.
El té negro fortalece los huesos
El té negro contiene fluoruro, lo cual puede contribuir a la salud ósea y dental. El fluoruro contribuye a que los huesos crezcan y se mantengan fuertes, favoreciendo su densidad y reduciendo así el riesgo de fracturas óseas.
En este contexto, se sugiere que el consumo regular de té negro podría fortalecer los huesos en una medida reducida, especialmente en individuos con una estructura ósea frágil.
El té negro mejora el funcionamiento del cerebro
Por su contenido de cafeína, el té negro ayuda a las personas a mantenerse despiertas y mejora la concentración incluso tras largos periodos sin dormir. Además, esta infusión contiene un aminoácido llamado L-teanina, que puede fomentar un estado de alerta y atención pero de manera relajada. Así, se contrarrestan los efectos estimulantes de la cafeína.
La L-teanina aumenta las ondas del cerebro, conocidas como ondas alfa, que promueven una sensación de relajación sin somnolencia.
Este aminoácido también puede contribuir a disminuir el estrés y la ansiedad al generar una sensación de calma. Por ende, puede considerarse que brinda beneficios para el bienestar psicológico.
Otros beneficios del té negro para la salud
Además de los tres beneficios mencionados, el té negro también ofrece otros como los siguientes:
- Previene el envejecimiento prematuro
- Facilita la digestión y sirve para el tratamiento de la diarrea
- Ayuda a controlar la diabetes
- Reduce el apetito y favorece la pérdida de peso
- Disminuye el colesterol
- Previene la formación de placas de aterosclerosis e infarto
- Contribuye a la prevención del cáncer