¿Sin ganas de sexo? 9 causas del bajo deseo sexual en la pareja

Una búsqueda rápida por los sitios webs de diversos profesionales en psicología y sexología de nuestro país demuestra que una de las consultas más comunes de los peruanos en la terapia de pareja es el bajo deseo sexual.

Este problema se caracteriza por la disminución o ausencia de fantasías y deseos de tener sexo, y se puede presentar tanto en hombres como en mujeres, originando discusiones en la pareja e incluso siendo motivo de rupturas amorosas.

La libido, o deseo sexual, surge cuando una persona experimenta un impulso hacia actividades sexuales. Esto puede manifestarse mediante la excitación al pensar en actos sexuales, la masturbación, la creación de fantasías eróticas o las relaciones sexuales con una pareja. Según Planned Parenthood, este comportamiento es un componente fundamental de la sexualidad y del bienestar físico y emocional.

Los cambios en los niveles de libido de una persona pueden ser afectados por diversos factores internos, como los psicológicos y hormonales, así como por factores externos, como el contexto de la relación de pareja en la que se encuentra.

Debido a que el bajo deseo sexual es un fenómeno complejo y multifactorial, para descubrir cuál es su origen los miembros de la pareja deben analizar qué factores a nivel físico, mental y emocional están provocando que la libido haya disminuido o desaparecido en uno o cada uno de ellos.

1. La rutina: la monotonía del día a día, sobre todo en las relaciones de pareja más largas, puede provocar un bajo deseo sexual debido a que el sexo ya no resulta algo novedoso. En muchos casos, las relaciones sexuales se han convertido en una tarea más dentro de la lista de tareas diarias o semanales de una pareja o, también, puede ser que la monotonía haya llegado a la cama y con ello, la atracción sexual hacia la pareja haya disminuido.
2. Las hormonas: bajos niveles de testosterona son los responsables de la disminución de la libido en los hombres y en las mujeres y pueden contribuir a distintos problemas sexuales como la falta de deseo sexual. En el caso de las mujeres, la menopausia reduce los niveles de testosterona y de estrógenos, lo cual provoca no solo bajo deseo sexual sino también resequedad vaginal.
3. Insatisfacción sexual: si el sexo en pareja resulta insatisfactorio porque ya no se experimenta placer como antes, es comprensible que no se desee tener relaciones sexuales y, por ende, el deseo sexual disminuya.
4. Medicación: algunos medicamentos pueden ser la causa de la disminución del deseo sexual. Por ejemplo, el estrógeno presente en las pastillas anticonceptivas puede interferir con el efecto de la testosterona y reducir la libido. Otros fármacos, como los empleados para tratar la depresión, también pueden impactar negativamente en el deseo sexual. por eso es recomendable investigar los efectos secundarios de los medicamentos que ambos están tomando.
5. Enfermedades crónicas: padecer una enfermedad crónica puede provocar una sensación constante de fatiga. El agotamiento puede explicar por qué alguien carece de deseo sexual y de interés en el sexo. También puede ocurrir que, a pesar de tener deseos sexuales, la persona se sienta demasiado agotada, tanto mental como físicamente, para satisfacerlos.
6. Autopercepción corporal negativa: las personas con baja autoestima o que han experimentado cambios significativos en su peso o imagen corporal pueden mostrarse reacias a mantener relaciones sexuales con sus parejas. Estos problemas de autopercepción corporal pueden inhibir los deseos sexuales.
7. Problemas de salud mental: las personas que padecen depresión u otros problemas de salud mental pueden experimentar un bajo deseo sexual. Una gran cantidad de ansiedad o estrés también puede ser una causa significativa de la disminución de la libido en la pareja.
8. Resentimientos y problemas en la pareja: no lidiar con resentimientos mantenidos desde hace mucho tiempo es una de las mayores causas de falta de deseo sexual en parejas de larga duración.
9. Falta de comunicación sexual: debido a la falta de comunicación sexual, es posible que nunca se llegue a saber qué le gusta o no le gusta sexualmente a cada uno de los miembros de la pareja.